¡La vida nos trata como un balón de fútbol! Nos han dado patadas por todas partes y más allá de más nunca, y hemos fracasado en todo, pero ahora da como pena decirlo, ganamos una con Uribe en Colombia. Hasta allá se fueron Antonio – Pensionado- Ledezma, a celebrar lo que nunca ha podido celebrar aquí, y María -Sumate- Machado, tampoco perdió la oportunidad, y se acercó a ponerse a la orden para apoyar todo lo que sea contra Venezuela para ver si salimos de la dictadura. Al compañero Duque-Uribe se le veía asustado, porque ya sabe que dónde llega Pensionado Ledezma se va el presidente dentro de poco, así que esa pava macha ya es conocida en el mundo es y será una porquería.
Y menos mal que el país está más pendiente de Messi que de Espoleta Allup. Este mundial nos tiene un poco opacados sobre la grama polìtica, y mientras tanto la dictadura va haciendo lo que le da la gana, y nosotros, que fuimos tan sinceros, no decimos nada porque estamos alumbrados con el mundial y con la cantidad de goles que nos ha hecho la dictadura. El único gol que hemos metido es este de la cancha de al lado, y el compañero Uribe- Duque ya está declarando que no reconoce la dictadura y pide elecciones libres, y ojala que no vuelvan a hacer elecciones, porque entonces sí es verdad que la volvemos a poner. Además, el compañero Matemático Borges anda como volador sin rabo dándole la vuelta al mundo en 80 días y más, pidiendo más sanciones porque todavía no está satisfecho con las que ha conseguido. Y mientras tanto la oposición, o sea nosotros, nos vamos dividiendo en partiditos que se van convirtiendo en partículas, y hasta el Chúo Torrealba nos viene a dar clases de política pidiendo unidad, unidad, clap, clap, clap. Y menos minimud.
Además, es que nosotros somos más incoherentes que el carajo, antes, para joder a la dictadura, decíamos que con mis hijos no te metas, y ahora el compañero Trump separó a los carajitos de sus padres en la frontera de México y nos hacemos los locos, porque claro, ese Trump es un gran hombre y sabe lo que hace, por eso ni con el pétalo de una rosa pintada de azul. Así nos vamos cayendo a patadas como que fuéramos un balón de fútbol que lo van pasando por aquí y por allá, y lo toma Falcón Crest y Falcón Crest se lo pasa a Espoleta Allup y Espoleta Allup se lo pasa a Pozo de la muerte Barboza y este se lo pasa a Ismael García y fuera del área Talanquera García vende el balón.
El papá de Margot estaba viendo el juego entre Francia y Australia, y de repente se puso de pie y gritó: “Gol, gol, gol. Viva La France, carajo”. Y se fue al cuarto y le metió ese coñazo a la puerta como que fuera un balón, y se estremeció el edificio y la gente gritaba: Goooooooool, desgraciado.
- Sola, fané y descangayada.- me canta Margot