Harto conocido es el chiste de Juan Salazar el espía. Forma parte de aquellas metáforas para decir algo que todo el mundo conoce. Qué Juan Salazar era un espía que vivía en la isla de Margarita y que espiaba para Rusia era sabido por todos menos para el espía ruso que venía a hacer contacto con él.
Algo así está ocurriendo cuando el Presidente Maduro ordena investigar las denuncias de contrabando y bachaqueo de semillas de maíz y también la "que algunos funcionarios policiales les decomisan a los agricultores las semillas que adquieren a altos costos".
Esta situación es un secreto a voces. Raimundo y todo el mundo sabe de estas irregularidades y quienes son los funcionarios a los que se les acusa de ellas. Todo el pueblo sabe que no sólo esta irregularidad ocurre con las semillas de maíz, que también ocurre con los fertilizantes, pesticidas, implementos de trabajo, que Agropatria es un cascarón, que las cosechas las cancelan mucho tiempo después de entregadas y que los créditos llegan retardados ya cuando el tiempo de siembra va a terminar, que los agricultores tienen que pagar vacuna para que les lleguen los insumos o al menos le lleguen a tiempo.
Todo el mundo sabe quién es Alí Babá y sus secuaces. Todo el mundo conoce a Juan Salazar
Pareciera que el único que no lo sabe es Maduro. Y lo peor es que los tiene sentaditos a su siniestra, pegaditos.
No sé ¿Pero será que Maduro cree que realmente somos? Bueno pero por los vientos que soplan al menos lo parece.
Cuando salgamos a la calle debemos tener cuidado con los carritos de helados, nos pueden atropellar. Así que mosca.
La pelea se gana peleando, no haciendo sombras.
Hasta la victoria siempre. Venceremos.