"80% y más de enemigos del gobierno copan la burocracia del Estado hasta en niveles de media y alta gerencia", lo denunció el General Müller Rojas hace ya varios años, a comienzos de 2009, en conferencia de prensa con medios nacionales y quien -para entonces- detentaba la Vicepresidente del PSUV, casi dos años antes de que falleciera, lo cual sucedió el 4 de agosto de 2010, muerte esa que no podemos dejar de recordarla, pues su partida resultó un duro golpe para el proceso Bolivariano, ya que se trataba no solamente de un dirigente revolucionario a carta cabal, sino de un soldado indoblegable que jamás apartó su mirada del compromiso histórico que como dirigente había asumido, para evitar los desvíos y las inconsistencias que pudieran horadar los cimientos y el firme propósito de llevar a nuestro pueblo por la senda muy segura hacia la construcción del socialismo.
Para aquel momento nos hicimos eco de tan importante denuncia a objeto no únicamente de mostrarla en términos mucho más reales y, por tanto, de mucha mayor gravedad, sino para avalar las palabras del denunciante y hacerle saber a él, dada su alta posición en el partido de la Revolución, que se había quedado corto, pues le afirmábamos que no es el 80% de la nómina del Estado que está integrada por opositores al chavismo, sino que la cantidad es muchísimo mayor, que nos atrevíamos asegurarle que es superior al 95%… Esta realidad la hemos seguido abordando y -efectivamente- como lo señalamos en el título, no ha habido en nuestro gobierno el compromiso revolucionario de revertirla…
Decíamos, entonces, por la experiencia y conocimiento que teníamos del tema en importantes entes públicos, de manera directa en dos de ellos, por haberles servido, uno parte del Poder Ejecutivo, correspondiente al área de la salud, el otro, aun cuando cueste creerlo, un ente parido en Revolución, adscrito al Poder Moral y adicionalmente, por referencias que recibimos de fuentes de nuestra mayor confianza, en otras tres instituciones, dos de ellas parte de la trama centralizada del Ejecutivo Nacional y la otra del Poder Judicial. Años más tarde, de nuevo tuvimos la oportunidad de acumular una experiencia adicional para nada distinta a las anteriores, en un ente descentralizado adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Salud, debiendo señalar que allí nos enfrentamos a los diablos de la corrupción, sin pausa alguna y luego de algo menos de dos años, fuimos desplazados conjuntamente con las más altas autoridades gerenciales, sin ninguna tipo de explicaciones…!!!
Decíamos en esa nota que publicamos en medios digitales en enero de 2009, que dábamos fe que en una institución creada luego de que entrara en vigencia la Constitución de 1999, de al menos 100 empleados de una de sus direcciones generales, solamente cinco (5) éramos quienes manifestábamos, sin ningún tipo de reservas, nuestra afiliación con la revolución y esa realidad, nos enardece tener que decirlo, no ha variado en lo absoluto a la fecha…
En el resto de los entes a los que hemos hecho referencia, la situación no solamente se mantiene inalterable, sino que se ha modificado para peor, pues el número de quienes se declaran abiertamente anti chavistas ha aumentado. Ya los muy pocos chavistas o simpatizantes que quedan, se manejan, -políticamente hablando- como si estuvieran prestando servicios en una dictadura, pues sus compañeros de equipo no hacen sino ofender y hablar pestes del Gobierno y, obviamente, muchos de ellos optan por callar, decisión esa que, por supuesto, la condenamos, pues con ello no solo se demuestra debilidad, sino muy poca claridad ideológica revolucionaria…
Con esa denuncia quedaba desmentida la especie del sectarismo del chavismo; que era totalmente falso que el Gobierno sólo empleaba a sus seguidores, que los cargos públicos, sin excepción, estaban cubiertos con militantes y/o simpatizantes rojos rojitos, lo cual sigue siendo a la fecha una absoluta falsedad que es objetivamente irrefutable y tanto lo es que con toda firmeza decimos que es un farsante y de los peores, aquel que se atreva a desmentirnos…
Pero más allá de que es una falacia absoluta asegurar que la administración actual es roja rojita, es interesante que reflexionemos un tanto sobre el tema, pues durante los 40 años del puntofijismo, es decir cuando se alternaron en el poder los adecos y los copeyanos, sí era una verdad absoluta que estaba copada con sus militantes y/o de los muy amigos de sus respectivos dirigentes.
Es imposible olvidar que quienes lograban ingresar a una nómina en cualquiera de los organismos del Estado eran los que portaban el carné de esos partidos y uno que otro recomendado, pero eso sí, que lo fuera de un "chivo" pesado. En todos los casos, el visto bueno lo otorgaban, bajo un riguroso chequeo, las respectivas Secretarías de Profesionales y Técnicos de ambas toldas políticas, las que, por cierto, tenían la misma denominación… Y eso ocurría para cualquier cargo, hasta para aquellos de las nóminas del personal del aseo y limpieza…
En el gobierno de la Revolución Bolivariana eso no ha ocurrido, ni con el Comandante Chávez ni ahora con el Presidente Maduro. A nadie se le pregunta su orientación ideológica o política, y menos se le exige el carné del partido o una recomendación. Únicamente deben satisfacer los requisitos establecidos para el cargo que fuere. Tal práctica en lo absoluto la cuestionamos y esto lo hemos dicho ene veces, pero lo que no hemos podido entender y no creemos que jamás lo entenderíamos, ni siquiera que, inclusive, lleguemos a ver como algo intranscendente y de poco monta, que se acuerden ingresos de ciudadanos opositores al gobierno y hasta militantes de toldas políticas que adversan a la Revolución, en algunos de los CARGOS DE CONFIANZA del Estado, es decir en aquellas posiciones burocráticas que están calificadas en el ordenamiento legal como de LIBRE NOMBRAMIENTO Y REMOCIÓN, las cuales sólo y únicamente tienen que estar reservadas para personas que compartan de forma plena, absoluta y total, las orientaciones ideológicas y estratégicas de la agrupación o agrupaciones políticas que con el voto del pueblo obtuvieron su beneplácito para ejercer el poder en los términos como lo contempla la Constitución Bolivariana, como fórmula necesaria e indispensable que pueda garantizar, a todo evento, que los elegidos cumplan en todas sus partes los planes y programas de gobierno que ofrecieron al electorado durante la respectiva campaña y que por ello resultaron ganadores en el correspondiente evento electoral.
Incluir en esos cargos de confianza, sea el nivel que fuese, a sujetos afiliados a partidos de la oposición o a quienes abiertamente adversan el proyecto Bolivariano y Revolucionario es, cuando menos, un tremendo desatino, para no calificarlo de otra manera…!
¿Pero, qué ha sucedido…?
Transcurren los años y esa denuncia del General Müller y muchísimas otras que se hicieron antes de la de él y las posteriores, incluyendo la campaña de varios meses que adelantó el camarada Diosdado Cabello a través de su muy visto programa "Con el Mazo Dando", para resolver tan terrible pifia en que ha incurrido el Gobierno de la Revolución desde que se instaló en 1999, no han tenido eco, ni siquiera en entes públicos que tienen como su máximo jefe a militantes que seguimos creyendo Bolivarianos y Chavistas indomables, en donde esa realidad es invariable. En días recientes preguntábamos por el destino de un personaje antichavista, cuyo nombre nos lo reservamos, que ejerció altísimos cargos en un ministerio y se nos dijo que como su jefe fue transferido a una posición de mayor relevancia en donde él no tenía cabida, salió de la nómina mayor donde estuvo varios años, pero eso sí, beneficiado con un muy jugoso contrato…!!!
Historias como esa o muy parecidas se repiten… Pero esa realidad pareciera que no mortifica al alto Gobierno y ello, por supuesto, el pueblo que se entera de todo y que la conoce y son muchos que la padecen, les produce mucha más que indignación, rabia incontenible…!!!
Esperamos muy convencidos de su éxito, que la camarada Vice Presidenta, la Dra. Delcy Rodríguez Gómez, a quien el Presidente Maduro le ha asignado la responsabilidad de exterminar la corrupción en el ámbito público, comience con el apoyo de las estructuras de contraloría disponibles, previa revisión y calificación de su personal técnico, revisando la gestión de quienes ejercieron o ejercen Cargos de Confianza y que por ello dispusieron o disponen del presupuesto en sus áreas de acción, hacia el objetivo de verificar si las contrataciones que suscribieron o han suscrito, al menos durante los tres o los dos últimos años de gestión, ya sean referidas a la ejecución de obras públicas o a la adquisición de bienes y servicios, que otorgaron, incluyendo las que fueron sometidas a licitación, se aprobaron y se suscribieron acatando el ordenamiento legal que regula la ejecución de toda partida del presupuesto nacional, poniendo especial énfasis a los procesos correspondientes a los actos inexcusables de contraloría, como son, a título de ejemplo, si se acordaron precios justos y razonables, si se dieron las garantías necesarias y suficientes y, finalmente, si los bienes y/o servicios entregados cumplieron con las cantidades, especificaciones y calidades acordadas…
No somos adivinos, ni tenemos una bola de cristal para precisar qué resultados se obtendrían de ese proceso de revisión que proponemos, pero la experiencia de más de 35 años que tenemos cumpliendo tareas de contraloría en el sector público (casi 25 años al servicio de la Contraloría General, desde 1961 a 1985), así como los partes que hemos estado escuchando durante este últimos tiempos del Fiscal General, Tarek William Saab, acerca de los escandalosos hechos de corrupción que su Despacho ha venido detectando sobre todo en la industria petrolera, en los cuales nos ha reiterado que tiene en la mira algo así, no lo recordamos bien, como más de 4 mil contrataciones, para decirnos que todas las que ya fueron revisadas, no habido una sola que pase la prueba y nos ha agregado, además, que en su totalidad están plagadas de irregularidades, por lo que vaticinamos que igual ocurrirá si nos atienden esa sugerencia de fiscalizar dichas gestiones. Allí aparecerán, sin duda, fichas del chavismo, pero por seguro estamos que al examinar las trayectorias de los que pudieran resultar implicados, se podrá establecer con toda propiedad, que en su mayoría se trata de sujetos muy vinculados a los distintos sectores de la oposición…
Ninguno de esos procesos de fiscalizaciones es complicado ejecutarlo, solamente basta la decisión de llevarlos a cabo y no esgrimiendo razones políticas, sino morales…!!!
El pueblo lo exige, de manera que manos a la obra. Hay que enmendar ese grave error que se cometió y que, lamentablemente, se sigue cometiendo…