El más reciente artículo: “Nos dolarizaron la vida, nos bolivarizaron la muerte”, tuvo un impacto tal, que gente de oposición al gobierno bolivariano, me felicitó por mis críticas constructivas hacia la gestión gubernamental. A esos opositores respetuosos que se tomaron la deferencia de reconocerme, me permito reproducir mi respuesta a través de este mensaje: “Los reconozco a ustedes, que tienen el legítimo derecho a ser opositores legítimos y que no nos veamos como enemigos sino como hermanos. Políticamente podemos adversarnos, pero que la defensa vehemente de nuestras ideas no se traduzcan en irrespetos en lo personal. Mi reconocimiento y mi abrazo de hermano venezolano”.
Luego de este mensaje de introducción, necesario, pasemos de una vez al tema objeto de análisis de este artículo.
En anteriores entregas, había señalado sobre el papel de Guyana y de la isla de Montserrat respecto al posicionamiento de las fuerzas armadas británicas en un potencial escenario de conflicto contra Venezuela. Vaya desde aquí mi agradecimiento a las fuentes extranjeras que me han pasado estas valiosas informaciones, y que por razones obvias, no revelaré, en aras de preservar su integridad.
En vista del empuje que hemos tenido en los artículos recientes para la identificación de las posibles fuentes de agresión hacia nuestro país; las fuentes me recomiendan que es necesario incluir las fuentes de información que me han enviado. La razón fundamental es que las mismas son públicas, y por tanto disponibles para cualquiera que desee indagar sobre este tema.
La primera que se mostrará es un análisis presentado en el mes de marzo de este año, donde el “establishment” analiza y documenta las razones por las cuales el Reino Unido de Gran Bretaña necesita una expansión geográfica de sus áreas de “influencia”. Como se podrá ver en el link que a continuación se reproduce (https://ukdefencejournal.org.uk/a-look-at-the-considered-locations-for-new-british-military-bases-overseas/ ) es un documento descriptivo de buena calidad e identifica tanto la isla de Montserrat como a Guyana (que fue ya objeto de un artículo anterior) como buenos candidatos para desarrollar su presencia por estos lares.
De igual manera, el referido documento hace énfasis en que en el caso de Guyana, el interés británico significaría su seriedad para con este país al tratar de tener presencia militar, algo que les gustaría a los guyaneses teniendo en cuenta su historial.
El segundo link que también se reproduce a continuación: (https://en.wikipedia.org/wiki/Guyana_Defence_Force ) nos da una idea de la capacidad en término de equipos y hombres que tiene o ha reportado el gobierno guyanés. Como se podrá observar, un batallón (y otro de reserva) no son en comparación con nuestra FANB una amenaza, sin embargo, representan un estímulo más para el gobierno de Guyana, y este del Reino Unido de asociarse con vistas a “influenciar” los eventos en nuestra patria y a “proteger sus intereses”.
No podemos obviar que también hay intereses franceses y holandeses, ya que muchas de estas islas del Caribe fueron (y siguen siéndolo) sus colonias. Recordemos que Total y Shell están en Guyana con los desarrollos petroleros en su plataforma continental.
La relación de estas pequeñas islas con su pasado colonial es que los europeos retuvieron la responsabilidad por su defensa, como se observa en el link que se anexó anteriormente. Existen los tratados de defensa entre el patrón europeo y los isleños.
Solo espero que estas informaciones puedan servir de base y prueba del punto que he venido presentando en los artículos más recientes y que se ha hecho de manera muy clara. El riesgo está creciendo y esta gente no tiene lealtades. Los isleños siguen al patrón, ya que tal vez no tienen otra opción o no la quieren tener.
De ahí que la pelea de Venezuela no es con cualquiera, sino en contra de los grandes poderes hegemónicos que dominan el planeta.
Ahí se las dejo.
¡Leales Siempre! ¡Traidores Nunca!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
