A pesar del lugar común: "Estamos viviendo tiempos difíciles", es inevitable no hacer referencia a ello. El día a día y la semana a semana, es lo más que podemos ver en lontananza, dada la cantidad de enemigos, operaciones psicológicas, destrucción de nuestra moneda, inflación y la guerra mediática bien planificada y mejor ejecutada, etc, que le dan al bloqueo criminal varios matices, el uno más desesperanzador que el otro. De allí que sólo podemos plantear algunas perspectivas para Enero del próximo año. No nos atrevemos a considerar dichas perspectivas para todo el año 2.021, pues sería una temeridad colosal.
A partir de 1.998, el objetivo primario de los enemigos internos y externos del pueblo venezolano ha sido deshacerse, al costo que sea, del Comandante Hugo Chávez, y ahora, del Presidente N. Maduro, para así liquidar la Revolución Bolivariana, su consecuencia inmediata. Esta panorámica, nos permite visualizar las perspectivas de nuestro país para Enero del 2.021, según el peso específico de los factores externos e internos descritos a continuación.
Entre los factores externos tenemos:
1) La guerra económica y el bloqueo de cualquier actividad económica y financiera. En general, todas las medidas coercitivas ilegales y unilaterales se acentuarán.
2) El recrudecimiento de la guerra mediática y comunicacional por las grandes corporaciones de la información, aliadas incondicionales y excelentes brazos ejecutores de las políticas de desinformación y fábricas de fake news del gobierno estadounidense, en todos los países de habla hispana y en Europa.
3) Un posible respiro temporal, al salir el actual presidente norteamericano; mientras el presidente entrante se acomoda y se prepara para recomponer el caos social y de salud en su propio territorio y hacerle guiños a los países de la Comunidad Europea, para luego meterlos al redil, para que sean serios.
3) Se dejó de amenazar con "Todas las posibilidades están sobre la mesa".
4) Se cayó por si sola y por completo la campaña, que Venezuela es el principal productor y traficante de drogas, sin que el Gobierno Bolivariano hiciese un esfuerzo importante, como consecuencia del lapidario informe de la ONU, donde queda muy claro donde está el origen de todo lo relacionado con la cocaína.
5) El lento desplome de toda la algarabía y la grosera manipulación de la violación de los derechos humanos en Venezuela, Almagro dixit. Ahora, ha comenzado a resaltar en todo el mundo, las terribles e inocultables masacres y asesinatos de lideres sociales campesinos e indígenas, así como el exterminio de los ex-guerrilleros de las FARC. En pocas palabras, el propio Genocidio del Estado Colombiano.
Entre los factores internos tenemos que reconocer algunos avances en nuestro país. Veamos algunos:
1) El lento acceso a la gasolina y la progresiva recuperación de la producción y redistribución del petroleo.
2) El inicio de un excelente intercambio comercial con algunos países, estimulado por la oportuna y sagaz creación de nuestra criptomoneda. Esto ha permitido paliar las dificultades.
3) La potencial posibilidad de inversión privada, basada en la Ley Antibloqueo.
4) La extraordinaria producción nacional de frijol, caraotas, arroz y de maíz en algunas de las regiones agrícolas del país, lo cual ha permitido auto-abastecer los masivos programas de Mercal y del CLAP, con un sustancial ahorro de divisas.
5) El manejo excepcional de la pandemia por el Gobierno Bolivariano, lo que le ha valido el reconocimiento del pueblo venezolano y de la OMS, a pesar de las serias limitaciones para el acceso a medicamentos y otros insumos.
6) La reciente elección parlamentaria, un triunfo político reconocido por la sociedad venezolana y varios países, cuyo alcance fortalecerá la institución y permitirá legislar en función del bienestar e intereses de nuestro pueblo.
Puesto que todo el diseño de la desestabilización del país y la eliminación de la Revolución Bolivariana, elaborado por el gobierno norteamericano ha fracasado, se imponen nuevas estrategias y reacomodos con la oposición transnacionalizada. A esta oposición ya nada le importa, hace mucho tiempo que hizo un arreglo Faustiano con el Departamento de Estado norteamericano, la CIA y el Comando Sur. De allí que está dispuesta a hacer lo que sea, para alcanzar el objetivo primario mencionado al comienzo.
Finalmente, considero que según lo descrito anteriormente, en Enero las perspectivas para Venezuela deberán ser mejores. Tenemos que ser más conscientes y más responsables con la pandemia y con el tremendo reto político que se nos ha presentado. Estamos inmersos en un compromiso histórico muy grande, el cual no podemos eludir, sobre todo por nuestro convencimiento que sólo el Socialismo permitirá una sociedad más justa, más humana e integral. Hay que seguir resistiendo, no hay otra alternativa!.