El lodo cloacal del ejercicio de la tribuna pública en la dirección de los aparatos del Estado en Venezuela viene dado por una descomposición ética de dicho ejercicio. El circo montado, no el pan, entre las dos mediocridades que tienen en jaque el país, junto a sus bufones es digno de una novela dentro de lo real maravilloso. De telón de fondo un cuerpo social que busca en los en los botaderos de basura algo para comer en el día. Las luces de iluminación del escenario es la ostentación de vehículos de último modelo, los bodegones de venta dolarizados en donde antes había una residencia para estudiantes, el consumo de bebidas que sólo se ven en esa películas de Hollywood, grandes rumbas en centros comerciales donde los sitios nocturnos albergan a los hijos de la burguesía revolucionaria, alternando con la burguesía de los otrora los Amos del Valle. Como música de fondo la plomazón en los barrios olvidados donde la ley del más fuerte se impone ante la ausencia del Estado y la complicidad de sus cuerpos de inseguridad; armas de alta potencia, drogas, alcohol y una población famélica que reconoce en el PRAN y sus luceros como la única autoridad.
Una sociedad en tal grado de descomposición donde se aumenta el pie de fuerza policial formado en "Derecho Humanos", según la nueva ministra, en un curso intensivo de cuatro meses, para que luego salgan a la calle a extorsionar, matraquear en nombre de la paz; mientras, maestrxs de primaria, profesorxs de secundaria, docente universitarios viven en un curso permanente para dar clases por dos dólares quincenales pagar la renta del internet, pagar la reparación del computador, pagar la renta del teléfono todo eso para dar clase; para comer, vestir , medicinas se encomienda a dios, a las ánimas benditas, al doctor José Gregorio Hernández que ahora anda fachoso por la segunda que le hizo el pana, perdón el Papa Francisco; una sociedad en tal estado de postración o enajenación está al borde de una ruptura.
El tema fundamental es preguntarse quiénes están preparados para acompañar la ruptura. Otra pregunta que salta a la vista es hacia dónde se acompañará la ruptura. Una tercera sería con qué se cuenta para acompañar esa ruptura.
Acerquémonos a las respuestas desde la negatividad. No pueden acompañar la ruptura los responsables del actual estado de cosas en el país. Aquellos que teniendo los recursos, las instituciones, los poderes públicos, los recursos económicos, el control de los medios no supieron, no pudieron, no quisieron hacer el trabajo para lo cual fueron designados.
En cuanto a la segunda pregunta la ruptura no se puede acompañar para cometer los mismos errores, deshonestidad, incompetentica, nepotismo, violación a los derechos humanos, censura, criminalización de las protestas, corruptela cabalgante, sociedad de cómplices.
En cuanto a la tercera pregunta habría que decir que no se puede proponer una salida a la crisis si se carece de un plan; no se puede propiciar la ruptura en solitario; no se puede salir de este infierno con soberbia; no se pueda dar un paso hacia adelante sino analizamos a profundidad los errores cometidos en el pasado.
Esos errores en el pasado han cobrado caro su factura. El 23 de enero fue la consolidación de una gran esfuerzo unitario de diversas corrientes de pensamiento: desde las más radicales imbuidas en la Internacional Comunista de la que formaba parte el Partido Comunista de Venezuela (PCV), pasando por partidos de la tendencia socialdemócrata como Acción Democrática (AD) y Unión Republicana Democrática (URD) y el partido socialcristiano Comité de Organización Política Independiente (COPEI) de tendencia conservadora. Esa unidad fue rota por la traición de la cúpula AD, URD y COPEI. De esta manera el desgaste de la juventud adeca, comunista y de urredista fue despreciada por Rómulo Batancourt, Jóvito Villaba y Rafael Caldera.
Lo que pudo ser un triunfo para lograr la independencia de Venezuela y el desarrollo del país se convirtió en una caricatura de democracia cupular, corrupta y entregusita al capital norteamericano.
El agotamiento del pacto de Punto Fijo se produjo sobre la base de la descomposición social de la élite política que llegó para enriquecerse, para entregar al país en nombre del pueblo. Fueron estas razones las que le permitieron que surgiera en la escena pública la figura de Hugo Chávez. Chávez se impuso como líder indiscutible sobre la base de cuestionar los elementos arriba mencionados. Sobre estas banderas acumuló un gran caudal electoral. Antepone a la democracia de la representatividad la democracia de la participación y el protagonismo.
Su carisma posteriormente, junto a la audacia política le permite superar varios episodios de traiciones; finalmente, logran asesinarlo físicamente.
Sus "herederos" amalgamados en los aparatos del Estado los asesinan hoy espiritualmente. De la democracia participativa se quedó en el mero hecho lectoral, es decir en los mismos vicios de la cuarta república, se arrebatan siglas partidistas al mejor estilo de Jun Charrasqueado, cuando no gana como por ejemplo las gobernaciones se inventan una figura que no está por ninguna parte de la legislación venezolana como es la figura del Protector; Lo de la democracia protagónica se quedó en el triste célebre el lema: "lo que diga Nicolás".
Todos estos elementos nos permiten precisar algunos elementos que conduzcan acompañar al pueblo para que la ruptura se produzca para fortalecer el papel protagónico de los intereses colectivos por encima al de los partidistas, la protección real de los más necesitados no con migajas sino creando las condiciones objetivas para que logren desplegar todo sus poderes creadores. De manera, que de lo que se trata, es de acompañar la construcción de un nuevo bloque histórico, ya no de vanguardia sino de retaguardia que trascienda la lucha por el control de los aparatos del Estado, que no quiere decir descuidar ese frente, y que vaya consolidando espacios de liberación al margen del control del Estado. Estos espacios aunque locales y/o regionales deben ser orientados hacia la lucha más global.
ELEMENTOS PARA LA CONSTITUCIÓN DE UN BLOQUE DE RETAGUARDIA
- Debe ser un bloque lo suficientemente heterogéneo que permita incluir las diversas visiones de país y lo suficientemente homogéneo para excluir a los responsables del actual desastre. Esto sin duda ayudará a fortalecer a los sectores que aunque vinculados a estos dos extremos que fomentan una falsa polarización para sostenerse en el poder, no participan del festín, que lo rechazan pero que no ven otra propuesta que seguir y se quedan allí anhelando el surgimiento de los líderes que le den voz y acción a la disidencia.
- La diversidad viene dada entre otros elementos porque incluye fundamentalmente a los sectores que no están organizados, que no se sienten representados ni por partidos políticos, ni por sindicatos, ni por organizaciones de otro tipo. Esto supone una política lo suficientemente audaz que seduzca a participar de manera PROTAGÓNICA A LOS QUE NO SE SINTEN REPRESENTADOS Y CON RAZÓN POR NINGUN TIPO DE ORGANIZACIÓN SOCIAL.
- La retaguardia de dirección tiene que propiciar el debate asambleario que vaya proponiendo ideas en lo concreto y en lo teórico para superar las crisis. Hablamos entonces que en vez de una disciplina partidista, que es autoritaria por excelencia fomentar la PLURISCIPLINA COMUNITARIA que tiende más a lo HETERÁRQUICO, sin jerarquías de ningún tipo lo que no supone que no haya conducción.
- Por último esta retaguardia de dirección debe plantearse un plan coherente que dé respuesta a las necesidades más sentidas de los sectores menos desfavorecidos y que debe partir de una idea central: DE CADA CUAL SEGÚN SUS CAPACIDADES, A CADA QUIEN SEGÚN SUS NECESIDADES. En otras palabras ni dádivas, ni explotación, condiciones para la liberación.