¡Estamos en guerra! La historia no es más que el registro de sus hechos!
De su presencia en la historia destacan dos temas: Primero. Ayer, la percepción de lejanía por las distancias entre pueblos. Hoy, la cercanía por la globalización del mundo. Segundo, la modificación del territorio. Siempre, tras la guerra opera un cambio en la geografía.
La configuración de la civilización occidental y cristiana es producto de las guerras europeas. Las guerras de los dos últimos siglos configuraron nuestro mundo actual. Del tronar de sus tambores, en el s XIX se conformó, al otro lado del Océano Atlántico, el desarrollo del Caribe y de América.
Al compás de las guerras fuimos incorporados a Occidente y su historia. La “guerra de Sucesión” (1700-1714) fue el enfrentamiento entre reinos europeos. La paz se consigue con la firma del Tratado de Utrechc en 1713 y Restadt en 1714, por parte de Francia, Holanda, Inglaterra y España. Los siglos XVII y XVIII fueron los tiempos de mayor intensidad en las luchas entre los europeos por el control del Caribe.
Se reconoció la introducción de la dinastía de los borbones con Felipe V, además de espacios políticos, unos adquiridos y otros perdidos. Así mismo, conquista y pérdida de territorios, unos y otros de los reinos participantes.
La guerra se renueva al tratar los Borbones de reconquistar Cerdeña y Sicilia, es declarada por Gran Bretaña a finales del 1718 y Francia a comienzos del 1719. Del mismo modo, La paz de Ultrechc, que autorizaba un navío, Ingles de la Compañía de los Mares del Sur, a comerciar con las Américas. Se les acusó que de además del comercio regular, utilizar el navío para contrabando, lo cual desato la guerra. Así transcurre el siglo XVIII hasta bien entrada la segunda mitad del siglo.
Operaba un cambio radical en el mundo que exigía un nuevo sistema internacional; un nuevo reacomodo. Los siglos XIX y XX son el producto de ese proceso de trasformación. Las guerras, la aparición de la burguesía y las nuevas formas de producción configuraron otro mundo. La conformación de América es producto de ese proceso.
La historia se repite.
La guerra actual es global y su expresión externa es Rusia y Ucrania. Se confirma la premisa del “Eterno retorno de la historia”. Estamos en una guerra mundial que implica todo el globo terráqueo. Son los hechos que manifiestan el cambio civilizatorio global, cuya manifestación es Asia vs Occidente. Vuelve a ponerse de manifiesto el tema de las cercanías y lejanías, así como la de las mutaciones de los territorios
Digamos, parafraseando a García Márquez, la guerra de Ucrania es la “Historia de una guerra anunciada”; nos lo dice el plan de la “Rand Corporatión presentado en septiembre de 2019, ante la Cámara de representantes de los EE.UU. ([i])
En el informe se puede leer:
“guerra económica (obstaculizar exportaciones de petróleo, reducir exportaciones de gas, imponer sanciones, incitar la fuga de cerebros rusos), cuando no una simple y llana provocación a la agresión militar (proporcionar ayuda letal a Ucrania, aumentar el apoyo a «rebeldes» sirios, promover cambio de «régimen» en Bielorrusia, entre otras).
La guerra de Ucrania implica a todo Occidente que está detrás de ella, principalmente EE.UU, la Unión Europea y la Otam. Y por otro lado, China Rusia y demás actores. Volvamos a las premisas de la guerra: distancias y territorios.
La presente guerra mundial, donde estamos inmersos tiene una intensidad y alcance sin precedentes en la historia. Nada es distante, todo es cercanía en las implicaciones de la guerra. No hay distancias entre pueblos y los en los efectos de la guerra.
Con respecto al territorio, en tanto que saldo de la guerra, ya no será como en el siglo XVII y XVIII, ya no queda territorio por “descubrir”; ahora se trata de territorios por configurar. El viejo tema de Euroasia vuelve sobre el tapete, como posible saldo de guerra. Un nuevo “continente”, una nueva geografía emergerá en la anunciada nueva era.
De esta cuestión nos dice el historiador y comentarista marxista indio Vijaj Prushad: “Estados Unidos quiere evitar un acontecimiento histórico, la integración de Euroasia. ([ii])
Lo que hoy sucede en Ucrania estaba planificado desde 2019 y así lo demuestra el plan de la RAND Corporation presentado en la Cámara de Representantes del Congreso de EEUU el 5 de septiembre de 2019.” Las implicaciones en esta guerra no es el control de Ucrania. El columnista indio Vijay Prashad nos dice: “Estados Unidos quiere evitar un acontecimiento histórico, la integración de Eurasia”
El llamado cambio de era no es una simple elucubración. La idea de la Eurasia no es nueva y ocupa una de las potenciales salidas de la presente situación de guerra que aqueja al mundo. O bien, de no ser exacto el destino anunciado, si lo es la trasformación del territorio. Europa no será la misma
[i] https://www.lahaine.org/mundo.php/ucrania-todo-estaba-escrito-en
[ii] https://rebelion.org/estados-unidos-quiere-evitar-un-acontecimiento-historico-la-integracion-de-eurasia/