El gobierno venezolano se equivoca cuando retrasa la entrega o renovación de sus pasaportes a los venezolanos que viven en el extranjero. En primer lugar, no todos los venezolanos que vivimos en el exterior somos adversarios del gobierno bolivariano.
Esa es una presunción muy arbitraria sobre la cual me permitiré aburrir a mis lectores con una anécdota personal. Me encontraba en Cochabamba para asistir a la Cumbre continental contra el ALCA como el especialista de Mesa Global sobre acuerdos de comercio internacional ( Mesa Global era una alianza Centroamericana contra el ALCA )una charla en representación de Mesa Global sobre la similitud entre ALCA y el TLCAN (NAFTA) que entonces se estaba negociando entre Estados Unidos y México. En ese congreso también estaba presente Judith Valencia quien debía dar una charla sobre el Pacto Andino a la que asistí. Cuando hice una pregunta ella me respondió de manera muy agresiva. Luego se disculpó ante la audiencia diciendo ¡ Perdónen la grosería! Pero es que este tipo es un venezolano que vive en Guatemala.
Judith asumió por vivir fuera de Venezuela yo era adversario del régimen bolivariano. Yo residía en Guatemala desde 1991. Visité Guatemala en 1988, cuando yo era funcionario del Instituto de Comercio Exterior ICE, con ocasión de la única Misión Comercial conjunta que hizo el Pacto Andino.
Me ofrecieron trabajo en dos universidades chapinas, acepté y en 1990 regresé a vivir en ese bonito e interesante país donde encontré una colega que es la madre de mi hija.
Creo que aquella abrupta y prejuiciada reacción de Judith se refleja en la notoria negligencia con la que las autoridades bolivarianas tratan el tema de renovar los pasaportes de venezolanos que viven en el extranjero.
No es sólo una política injustificable; es una mala política porque quien trata con negligencia a los amigos o indiferentes no genera simpatías.
Es un momento de graves tensiones en que la amenaza de guerra mundial es una realidad; por ello muchos venezolanos que viven en países extranjeros desean regresar a reunirse con sus familias en Venezuela; pero no pueden abordar un avión sin un pasaporte válido. En mi caso particular hay una compañera que desea venir a ayudarme pero desde hace 3 años que le renueven el pasaporte. La compañera es una guaireña que vive en Chile porque enviudó de chileno y es madre de chilena, sin que eso tenga la menor connotación política.
Al gobierno bolivariano le conviene acelerar la entrega de sus pasaportes a los venezolanos que están en el exterior para que puedan movilizarse y regresar a Venezuela cuando aún es tiempo. Entre los venezolanos que están afuera hay muchos que pueden aportar algo en un momento de grave crisis internacional.
El sabotaje descarado de OTAN a los dos gasoductos rusos del Baltico fué una una provocación que no quedará sin adecuada respuesta.
La víctima sacrificada con el sabotaje al gasoducto North Stream, no es Rusia; es Alemania, la mayor socioeconómica de China.
" La vendetta é un piatto che si mangia freddo" dicen los capos sicilianos cuando no hay prisa en mostrar su potencia.
Putin es culto, cortés , educado y seguro de sí; un hombre que actúa sin amenazar.