A 955 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en la mitad de la semana 137 de esta contingencia, y siendo el miércoles 26 de octubre de 2022, continúo llamando la atención sobre una alerta que fue formulada hace tres años por el General de Brigada en situación de reserva activa y doctor, Roberto González Cárdenas, el 30 de julio de 2019 en el programa "Dossier" conducido por el periodista Walter Martínez.
En la edición anterior señalé que en lo que espera ser la última entrega de este dossier, me referiré a la Ong Aquita Iuna Swat, un elemento sumamente peligroso denunciado hace tres años por el General del Pueblo, Roberto González Cárdenas.
González Cárdenas en aquella oportunidad denuncio que esta Ong era dirigida por José Figuera, uno de los seguidores y hombres de confianza del pretendido presidente interino, Juan Guaidó. Este señor es un instructor táctico Operativo de la Organización Mundial Swat (acrónimo en inglés de Special Weapons and Tactics, que traducido al castellano es algo así como especialistas en Armas y Tácticas Especiales), con código 22-15. También este señor es Instructor Estratégico de la Organización Mundial Swat con Código 48-15.
Este tipo de organización que operaba para Juan Guaidó tenía profundos vínculos con estas iglesias pentecostales en las que mutaron los que están dentro de la Misión Nuevas Tribus. De hecho comerciaban con armamento de guerra y con conexión con este tipo de organizaciones de la extrema derecha nacional e internacional.
El segundo al mando de esta organización Aquita Iuna Swat, que era de apellido Parisi, que fue detenido en aquella oportunidad en el año 2020 en el mes de marzo, cuando se realizó aquella incautación de armamento en Colombia, dos meses antes de la Operación Gedeón, se pudo comprobar que José Figuera y Parisi eran instructores de varios escoltas y personal de seguridad de muchos ministros y ministras del Gabinete del Presidente Nicolás Maduro.
¿O es que se nos olvidó el papel que jugó el mercenario Jordan Goudreau, mercenario canadiense estadounidense que se atribuyó la responsabilidad de organizar la Operación de incursión "Gedeón" con su empresa privada Silvercorp, contratada por Juan Guaidó para asesinar a Nicolás Maduro y a integrantes del Alto Mando Político y Militar de la Revolución para sumir el país, aprovechándose de la contingencia producto de la pandemia global de la Covid 19, en toda una espiral de inestabilidad y violencia?
Esto fue denunciado hace tres años por el general González Cárdenas. Pero la pregunta que necesariamente surge es: ¿Esta situación se mantiene? ¿Cuántos infiltrados tendríamos aún no solo dentro de nuestros cuerpos de seguridad sino incluso dentro de la propia seguridad de integrantes del Gabinete Ejecutivo, de integrantes del Alto Mando Político y Militar de la Revolución? O incluso: ¿Será que la seguridad del propio Presidente Nicolás Maduro está cien por ciento garantizada y blindada?
Esto es algo que amerita una profunda revisión. Ya que no podemos olvidar que el peor caos es aquel que no hace ruido.
Vaya este necesario llamado de alerta, y luego de completado toda esta reedición del programa de Walter Martínez en aquella oportunidad con el general González Cárdenas, me sumo a la propuesta del llamado de advertir al Ministerio del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, y específicamente a sus Direcciones de Justicia, Instituciones Religiosas y Cultos y de la Dirección de los Servicios de Vigilancia Privada y Prevención, a extremar los controles tanto de las organizaciones religiosas o aquellos "servicios privados" o de escoltas que proliferan en el país, y que podrían actuar como fachadas de organizaciones de delincuencia organizada, tráfico ilícito de drogas o terroristas que podrían estarse infiltrando en el país con fines inconfesables.
Esta alerta temprana espero que no caiga en saco roto.
¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Independencia y patria socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
