En el día de ayer, viernes 5 de mayo de 2023, el Secretario General de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el señor Dr. Thedros Adhanom Geybresus anunció la finalización de la emergencia por pandemia. Y ese anuncio en lo personal marcó un punto de inflexión para mí.

Recuerdo que en varias oportunidades anuncié que la famosa columna, Diario de una cuarentena finalizaría, pero lo que si no culminaría sería mi labor de continuar escribiendo. Era un poco como esa dicotomía dialéctica planteada por Gramcsi entre lo viejo que no termina de morir y lo nuevo que no termina de nacer.

O como alguna amistad en algún momento me preguntó, cuando Venezuela pasó de la etapa del famoso "7+7" a la de Normalidad Relativa y Vigilada, que me preguntaba el por qué si todo estaba "normal" para ella, yo seguía haciendo teletrabajo y permanecí durante largo tiempo en casa. Más allá de las consideraciones legales del caso, era la transición de una etapa en la humanidad importante en la que todas y todos nos transformamos un poco.

Y, al igual que al Dr Adhanom Geybresus, varias veces le pusieron en su escritorio y le sugirieron el levantamiento de la emergencia por pandemia de la Covid 19, pues este servidor varias veces consideró poner fin a la etapa de los Diarios de Una Cuarentena, pero las circunstancias siempre me obligaron a mantenerlas, así como al Dr Adhanom a mantener la emergencia, aunque las motivaciones mías y las de él fueran diametralmente opuestas.

Recuerdo que incluso en mis cuentas estimaba solamente escribir 100 ediciones de Diarios de Cuarentena. Pues bien, si tomamos en cuenta la fecha del 13 de marzo de 2020, cuando el Gobierno Bolivariano de Venezuela declaró la emergencia por la pandemia y hasta ayer, transcurrieron 1.146 días y escribí 557 ediciones de esa columna los Diarios de una Cuarentena, que ahora las dejo como testimonio a la posteridad de una etapa particular y no exenta de complejidades que vivió la humanidad.

Y también la dejo como propuesta editorial, que a las personas o editoriales que deseen apoyar, luego de las correcciones de estilo correspondientes, y que sea el primer libro de este servidor, pues bienvenido sea. Ya el propio compañero y camarada Isaías Rodríguez, ex vicepresidente ejecutivo de la República, ex fiscal general, dos veces constituyente y que también fue uno de nuestros diplomáticos más insignes e ilustres que nos haya representado, ha señalado la intención de prologar dicha propuesta editorial en caso de prologarse, lo que sería un verdadero honor para quien estas líneas suscribe.

Lo cierto del caso es que, la fecha del 5 de marzo de 2023 marca un punto de inflexión para este servidor, y bueno mis escritos como todo en la vida, pasa a una nueva etapa. Hecho no fortuito tomando en cuenta que un día como ayer se conmemoraban los 205 años del natalicio de Karl Marx.

Y es un poco de eso que en esta primera columna me refiero. En la medida de lo posible continuaré dando aportes, análisis, alertas como fue parte de los objetivos de los Diarios de una Cuarentena. Pero también como en su momento trató de hacerlo Chávez con sus famosas "Lineas de Chávez" y uno de mis mentores políticos, el Comandante William Izarra, que al final de su vida terrenal me honré en leer varios relatos de su vida y otro tipo de escritos más allá de lo político, que me mostraban otra faceta de lo que ellos realmente fueron. Eso fue uno de los objetivos que me había planteado en los Diarios de una Cuarentena, que lo cumplí a medias.

Espero que en esta nueva etapa, y con el lanzamiento de esta nueva columna, pueda cumplir si con ese objetivo que me he planteado.

Como por ejemplo, desde estas líneas le deseo una pronta recuperación a uno de mis compañeros de caminos y lucha, un hermano de esos que te da la vida como lo es Omar Hernández. En la mañana de hoy me enteré que se encuentra en un centro de salud, producto de una situación que se le presentó y que estoy seguro superará, y de esta manera honro la amistad, la hermandad que me une con Omar.

Incluso de poder ir a visitarlo en el centro de salud donde se encuentra, lo haré sin ningún tipo de problemas.

Como también en el nacimiento de esta columna, enviar mis felicitaciones de cumpleaños a dos extraordinarias, inteligentes y hermosas mujeres en cuerpo y alma como lo son Sonia Campos y Rosalba Lo Bue Antico, a las cuales espero más temprano que tarde tenerlas enfrente y poder darles a ambas un beso, un abrazo y una flor, casi que igual a la canción del inmortal Nino Bravo.

Pues bien, de esta manera le doy nacimiento a esta columna, en esta nueva etapa que he comenzado. Y bueno, así como en esos 557 Diarios de una Cuarentena, durante 1146 días estuve acompañándoles y justo es de señalar que no todo fueron fríos análisis, alertas y escritos, sino que también expresé por momentos sentires y dolores, como lo fue la partida de amigos como el Dr Félix Gustavo Valerio Matihuán, de mi tía Rita Croce de Castillo o del Coronel William Izarra, o hasta de mascotas como Luna y Puky, que me hicieron recordar la anécdota de Chávez con la atención de una perrita callejera, dándonos la gran lección de que la capacidad de amar es infinita, pues ahora les invito a que me acompañen en esta nueva etapa y con esta nueva columna.

Serían muchas las cosas por expresar debido al cúmulo de sentimientos que hoy me embargan, pero creo que ya habrá tiempo para poder hacerlo.

Nunca olvidaré aquél 4 de abril de 2020 cuando inicie y transité junto a ustedes una importante compleja, pero cargada de muchos aprendizajes, donde hubo personas que fueron, vinieron, aportaron y se fueron. Otras llegaron y permanecen aun, y bueno ahora me abro a esta nueva etapa y presto a las nuevas experiencias y a abrirles las puertas también a esas nuevas personas que quieran venir y quedarse.

Creo que con este poderoso impulso, con esta energía mofogenética doy la bienvenida a esta primera edición de la columna de Martorano. Les invito a que me acompañen en este nuevo tránsito y en este nuevo camino, por el que sus orientaciones y siempre oportunas observaciones serán muy importantes para mí

Y vaya desde aquí, y me tomó como mía una frase de un excelso artista como Gustavo Cerati: "Gracias, totales".

¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!

¡Independencia y Patria Socialista!

¡Viviremos y Venceremos!