Honrando mi palabra empeñada y a 72 horas de culminada la "muerte cruzada" en la hermana República de Ecuador, quiero permitirme complementar los análisis y apreciaciones realizados desde el pasado lunes 21 de agosto, a fin de poder avizorar los posibles escenarios en ese país.
Sobre todo, porque aprovechando que ayer estaba escuchando a un analista opositor acá en Venezuela en un programa radial, señalaba creo que de manera apresurada y sesgada un eventual triunfo de Noboa en Ecuador, sin considerar muchos elementos. Claro el sesgo de ese análisis es para incidir en los escenarios a manejar en el caso nuestro, de cara a los comicios presidenciales a celebrarse en nuestro país en 2024.
Uno de los elementos que señalamos en los análisis preliminares que hicimos el lunes una vez conocidos los primeros resultados en Ecuador fue que la candidata de la Revolución Ciudadana, Luisa González se impuso en 13 de las 24 provincias de la geografía ecuatoriana (Azuay con el 26,12%; Cañar con el 28,70%; El Oro con el 36,14%; Esmeraldas con el 45,83%; Guayas con el 37,92%; Imbabura con el 33,06%; Los Ríos con el 45,53%, Pichincha con el 26,43%; Orellana con el 36,26%; Santa Elena con el 35,44%; Santo Domingo de los Tsáchilas con el 34,19%; Sucumbíos con el 45,85%). En la provincia de Manabí obtuvo el 50,23% y Pastaza, aun por determinar.
Noboa se impuso en las provincias de Carchi con el 31,83%; Chimborazo con 25,93%; Cotopaxi con el 25,25%Loja con el 30,42%, Tungurahua con el 36,06% y Zamora Chinchipe con el 32,84%.
Christian Zurita, del movimiento Construye y sustituto del asesinado candidato Fernando Villavicencio se impuso en las provincias de Bolívar con el 25,81%, Galápagos con el 25,84%; Napo con el 26,92%,y Pastaza con el 29,83%
En cuanto al voto en el exterior, en América Latina, el Caribe y África, Luisa González obtuvo el 31,75%; Daniel Noboa el 14,6% y Christian Zurita el 28,66%; en Estados Unidos y Canadá Christian Zurita obtuvo el 37,70%, Luisa González el 29,41% y Daniel Noboa el 11,51%, faltando por determinar los porcentajes en Europa, Asia y Oceanía.
La votación por provincias y cantones en este proceso electoral indica que los partidos políticos en ese país pasan por su peor momento y que la única organización que mantiene una estructura y militancia real como indique en el análisis anterior es la Revolución Ciudadana.
El voto duro del correísmo se mantiene sin importar el nombre del partido o el número de lista que le toque. Pero indudablemente es dependiente del respaldo que el líder de la Revolución de ese país, Rafael Correa brinde en la campaña electoral a los candidatos de turno.
Las demás organizaciones políticas tuvieron participaciones irrelevantes, e incluso perdieron espacios que habían logrado obtener hace apenas dos años. Los que tomaron las decisiones y marcaron las condiciones fueron los candidatos y candidatas en esta oportunidad.
Como los partidos y movimientos no tenían candidatos para terciar en estas elecciones, se ‘subieron a la camioneta’ de la candidatura que más les convenía, para auspiciar a figuras con las que no tenían ningún vínculo político.
Y esto tuvo un costo político elevado porque la población sabía quiénes estaban en las papeletas o boletas electorales y poco importaba el partido o la estructura que estuviera detrás. La población ecuatoriana no votó por partidos o por listas sino por candidatos y candidatas, por nombre y apellido y por propuestas y ofertas electorales, salvo la militancia de la Revolución Ciudadana.
Una mirada general de estos resultados por provincias nos indica que el único bastión de la Revolución Ciudadana es Manabí, donde superaron el 50% de los votos válidos, muy por encima de Esmeraldas, Sucumbíos y Los Ríos, donde obtuvo el 45% de los votos válidos.
Aunque haya vencido en otras 10 provincias, la diferencia con las otras opciones se acorta y la fragmentación deja muchos votos por captar para la segunda vuelta.
Mientras Daniel Noboa como hemos observado, fue el más votado en seis provincias y Christian Zurita en 4.
La Revolución Ciudadana alcanzó el triunfo en 153 cantones (69,21%) de 221 cantones que conforman la geografía ecuatoriana y su mayor respaldo estuvo en 13 cantones con más del 60% de votos en Pichincha (Manabí), Jaramijó, Jama, Olmedo, Muisne, Palenque, San Vicente, Pedernales, Rioverde, Colimes, Eloy Alfaro, Mocache y Putumayo.
La mayoría de estos cantones se ubican en las provincias de Esmeraldas y Manabí, dos con los mayores índices de criminalidad que asolan al país meridional.
Los peores resultados para la Revolución Ciudadana se dieron en 9 cantones con menos del 15% que estuvieron en la Sierra Centro y la Amazonía, en lugares con alta población indígena: Quero, Chambo, Guano, Taisha, Ambato, Pelileo, Pillaro, Pastaza y Mocha.
Aunque Daniel Noboa pasó a la segunda vuelta, auspiciado por la alianza Pueblo Igualdad y Democracia (PID) y el Movimiento Mover del ex presidente y ex militante del correísmo Lenín Moreno, estas agrupaciones políticas no cuentan con capital político propio.
Noboa se encargó de que los votos que obtuvo se debieran a que el color de su fundación fuera el que apareciera en la boleta electoral, y que las siglas de su alianza política (ADN) fuesen las mismas de su fundación, pero con otro orden (DNA).
Con su propia campaña en el territorio más apoyo de plataformas tecnológicas, el remezón del tablero electoral con el asesinato de Fernando Villavicencio y el impulso final que le dio el debate presidencial, Noboa logró captar mucho del voto joven y de los indecisos.
Noboa venció en 40 cantones ubicados a lo largo de la sierra ecuatoriana. En otros está muy cerca de los resultados obtenidos por la Revolución Ciudadana por pocos puntos, incluso diferencias de apenas décimas.
En el caso de Christian Zurita, el sustituto de Villavicencio y el tercer candidato más votado, aglomeró el voto de la indignación y del rechazo a la ola de violencia que cobró la vida del candidato antes mencionado.
Zurita venció en 22 cantones, especialmente en la sierra ecuatoriana y la Amazonía. En 40 cantones apenas consiguió menos del 10% de los votos mientras que en 66 obtuvo entre el 20 y 33%.
Jan Topic, el cuarto mas votado, y que podría considerarse que era el candidato del presidente Lasso, no venció en ninguna circunscripción, aunque obtuvo entre el 20 y 31% de los votos en siete cantones.
Otto Sonnenholzner, auspiciado por Avanza y SUMA, estuvo apenas entre el 10% y 21% en 11 cantones.
Yaku Pérez fue el vencedor en seis cantones del Austro y la Amazonía, con un respaldo entre el 23% y 39%. Pero en otros 34 osciló entre el 10% y 22% de respaldos.
La Revolución Ciudadana obtuvo el 39,37% de los votos en este proceso electoral, seguido por el Movimiento Construye del asesinado candidato Fernando Villavicencio con el 20,66% de los votos; ADN de Daniel Noboa con el 14,66%, PSP de Topic con el 3,17%, Claro que se Puede de Yaku Pérez con el 2,88%, Actuemos con el 4,52%, Reto y Amigo con el 1,71 y 1,21% respectivamente.
Ahora, cabe recordar que no solamente el domingo se elige el Presidente o Presidenta de la República y el Vicepresidente o Vicepresidenta para el resto del período constitucional 2021-2025 sino a los 137 diputados y diputadas de la Asamblea Nacional por el mismo período en virtud de la activación de la "muerte cruzada" por el actual mandatario de ese país, Guillermo Lasso.
Esto es muy importante considerarlo, sobre todo tomando el rol que este Poder ha jugado en la actual coyuntura ecuatoriana, y párrafos más adelante explicare el por qué.
Pero este proceso comicial, es evidente que la Revolución Ciudadana obtuvo la mayor cantidad de curules con 52, seguido de cerca por el movimiento Construye de Fernando Villavicencio con 31 parlamentarios, Partido Social Cristiano con 17 de Topic, ADN de Noboa con 12 diputados, Actuemos con 7, 6 de Movimientos locales, 4 de Pachacutik, 3 de Claro que se Puede, 2 de Reto, 1 del Centro Democrático, 1 Amigo y 1 de Sociedad Patriótica.
Es decir, la Revolución Ciudadana es la primera minoría en el parlamento con esta cantidad de diputados. Y hablo de la primera minoría porque no tiene siquiera la mitad más uno del parlamento (69 diputados) para los temas que deben discutirse en el mismo, por lo que deberá tender puentes con otras alianzas políticas para asegurar esa mayoría, pese a tener la bancada con más diputados en el parlamento. Acá se pondrá a prueba la capacidad de maniobra política de la actual dirigencia de la Revolución Ciudadana.
Pero necesariamente, hay que comparar estos resultados con respecto a la correlación de fuerzas del parlamento que fue cesanteado por Lasso el pasado 17 de mayo y que fue el detonante del actual proceso que vive hoy el Ecuador. Para el momento en que el actual Jefe de Estado ecuatoriano disolvió el parlamento en aplicación del artículo 148 de la Carta Magna de ese país y activó la figura de la "muerte cruzada", la principal fuerza política era la Revolución Ciudadana con 47 diputados (aumentó 5) seguida del Movimiento Pachakutik con 24 (perdió 20), Izquierda Democrática con 15 (no obtuvo ninguno), Movimiento Creando Oportunidades (CREO) del actual presidente Lasso (no obtuvo ninguno), Partido Social Cristiano con 12 (aumentó 5), Avanza con 2 diputados (en esta elección ninguno), Sociedad Patriótica con 1 diputado (lo mantuvo), Partido Socialista Ecuatoriano con 1 (no obtuvo ninguno), Suma con 1 (No obtuvo ninguno), Movimientos provinciales con 5 (En esta elección tuvieron 6 diputados) e independientes 16 (en esta elección no obtuvieron diputados).
Sin embargo, se demostró lo importante que es para nuestros proyectos políticos actuales, no solo contar con el Ejecutivo sino el papel que puede jugar un parlamento dominado por la oposición. Ya que de no haber activado el Presidente Lasso la figura de la "muerte cruzada" en Ecuador, el parlamento liderado por el correísmo logró la alianza no solo para aprobar el juicio político al mandatario, sino que tenía los votos para destituirlo (101 diputados producto de la alianza de la Revolución Ciudadana, Pachakutik, Izquierda Democrática, Sociedad Patriótica, Partido Socialista Ecuatoriano, Movimientos Provinciales y la mitad de los diputados independientes).
Por ello, cuando escuché a Rafael Simón Jiménez, a quien creo confundió su deseo con la realidad, al señalar que Noboa derrotaría a Luisa González en la segunda vuelta, pues me parece que no ha leído bien la política y los mensajes que el pueblo ecuatoriano ha venido enviando desde los últimos procesos electorales y ahora con estos resultados y con la correlación de fuerzas en el actual parlamento. Y como ya lo señalé en párrafos anteriores, veremos la capacidad de maniobra de la dirigencia de la Revolución Ciudadana.
Sin embargo, y sin ánimos de pecar de triunfalistas, pero todos los datos que producto de una investigación ardua he realizado, demuestra que todo apunta a que la Revolución Ciudadana triunfara el 15 de octubre.
Las posibilidades de Noboa se centrarán en los respaldos de los candidatos que no resultaron favorecidos, es decir la reconfiguración ante una elección más polarizada, la campaña en el territorio, el uso de las plataformas tecnológicas y el resultado del debate presidencial del 1 de octubre del presente año.
Y sobre todo, que en el supuesto que la derecha empresarial de la mano con Noboa llegase a imponerse en la segunda vuelta, pues a partir del 25 de noviembre del presente año deberá lidiar con un parlamento en contra tal y como le tocó a Guillermo Lasso durante el período que le correspondió gobernar a Ecuador.
Así están planteadas las cosas.
¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron sigue!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!
