A la luz del Proceso Bolivariano Socialista que se lleva a cabo, la acción política no puede partir de los conceptos de categorías de la política de dominación, necesita un nuevo punto de partida, una redefinición de los conceptos y categorías para afirmar objetivamente la nueva política como voluntad de servicio y no como política de dominio.
Esta nueva política que es el parto histórico que está alumbrando el Bolivarianismo debe ser de liberación de toda forma de dominio, y al mismo tiempo debe estar al servicio de un proceso de emancipación y liberación. Así, la Carta de Jamaica, escrita por el Libertador Simón Bolívar, en fecha 6 de septiembre de 1815, después de 200 años, en este momento en que los poderes imperiales amenazan con mayor ferocidad la Paria Grande debemos tomar las advertencias y las recomendaciones hechas por Bolívar, porque tienen plena vigencia. No podemos olvidar, igualmente, que la libertad e independencia de NuestraAmérica está amenazada "y nuestros enemigos pretenden de nuevo esclavizarnos".
Con la unidad de los pueblos, tras el pensamiento Bolivariano ganaremos la batalla contra el neoliberalismo, demostraremos que siguiendo el camino señalado por Bolívar forjaremos una América Meridional, soberana, libre e independiente, sin injerencias de ninguna naturaleza. Todavía falta camino por recorrer la obra de nuestra regeneración. Ahí está el gran guía, Bolívar, quien acometió la tarea de construir escenarios anfictiónicos y políticos, consciente de la necesidad de un "equilibrio del universo", esto es, una paridad en el ámbito internacional entre NuestraAmérica y Europa. En suma, Bolívar para encarar las maniobras de la doctrina Monroe, asentó las bases para hacer valer la independencia de la República Bolivariana de Venezuela, ante las nuevas apetencias colonialistas del imperialismo.
Estamos en la era en la que la mujer y el hombre, así como los pueblos son capaces de dominar su propio destino, la era del Socialismo Bolivariano. Finalmente, el proceso de reivindicar una visión socialista involucra, la necesidad de aprender de las experiencias del siglo XX, incluyendo sus fracasos.