La inflación es un tema muy sensible que debe ser manejado con responsabilidad y eso no lo hacen los llamados grandes medios de comunicación del país, para quienes el asunto no es más una formidable razón para atizar aún más las iras de los que, con el mayor odio, se exhiben como enemigos a muerte del gobierno de Chávez. En lo absoluto lo asumen como un serio problema que a todos nos afecta.
La inflación la explican muchas variables económicas, como pueden ser una excesiva liquidez, quizás un desmedido e incontrolable gasto público y muy escasas opciones de inversión al más corto plazo, pero hay otras muy perversas a las que esos medios no le otorgan ni una palabra, como lo son la especulación y el acaparamiento descarados y cuando lo hacen se cuidan de aderezar los comentarios para que ni por asomo se piense que sus responsables directos son los comerciantes y lanzan, por el contrario, todas las culpas al gobierno, alegando de manera simplista que “carece de políticas económicas serias, pues su único objetivo es hacer pedazos al país para luego echarlo hacia la abismo”. En lo absoluto coadyuvan para que se libre, como debe ser, una exitosa campaña contra esas terribles y condenables conductas mercantiles, sino que se convierten en ardorosos defensores de quienes las practican, poniendo en evidencia el propósito persistente que se han trazado de desestabilizar el país.
Pero es que hay una historia sobre el fenómeno bastante reciente de la cual tampoco los medios hablan y su más amplio conocimiento es lo único que nos permite evaluar de forma objetiva el desempeño del país en ese tema de la inflación durante el chavismo, frente a como lo fue durante los dos últimos gobiernos de la cuarta República. Veamos:
Durante estos ocho años de Hugo Chávez la inflación más alta ha sido del 22% en 1999, la más baja del 12,3% en el 2001 y el promedio anual se ubica en el 19,54%.
Durante los mandatos de CAP y Caldera la más alta fue de 103,% (1996), la más baja de 29,9% (1998) y la promedio anual se situó en el 54%, debiéndose observar que si promediamos solamente el lapso de los cinco años de Caldera II, el nivel llega a casi el 60% (59,64%).*
El gobierno ha tomado una serie de medidas para enfrentar el problema, entre las cuales se destaca la disminución del IVA del 14% al 9%, por lo que es muy probable, tal y como lo han venido asegurando sus voceros responsables en el área económica, que este año cerrará la inflación por debajo del 17%, la cual esperan que se ubique en el 12%. Los economistas del sector opositor descartan tal posibilidad, pero ya sabemos que desde que Chávez está en la presidencia, esos “expertos” siempre han fallado en sus predicciones sobre el tema y en otros tan importantes como la de que “es inminente la devaluación del bolívar", lo cual lo reiteran persistentemente.
Finalmente, es interesante observar que los más ácidos opositores del gobierno actual sobre el tema inflacionario fueron quienes manejaron la economía de esos dos últimos gobiernos cuarto republicanos, entre quienes recordamos a los exministros Miguelito Rodríguez, Moisés Naim, Ricardo Haussmann y Teodoro Pettkof, así como a la señora Ana Julia Jatar, exsuperintendente para la promoción y protección de la libre competencia (Precompetencia).
(*) Cifras tomadas de la página del BCV, www.bcv.org.ve
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