Hoy, sábado 26 de julio de 2008, presentaremos al público la primera escultura dedicada a Fidel Castro, realizada por el artista plástico zuliano Daniel Paz y con el patrocinio del Centro Nacional Antiimperialista Simón Bolívar, que me honro en coordinar. El acto será en El Moján, a orillas del Lago, a las 10 de la mañana.
Historia y arte se conjugan en esta iniciativa que asumimos con mucho amor y respeto. Somos de la idea, que los gestos de afecto tanto como los honores merecidos, deben expresarse en vida a quienes los ganaron. Nos resulta paradójico ver los mares de flores en manos de huérfanos taciturnos que acuden en ciertas fechas a los cementerios. Pero antes nunca ofrendaron un humilde ramo a la madre o al padre en vida. ¿Cuántas palabras de amor se quedan ahogadas en las gargantas de millones de hijas e hijos que luego, al llorar la pérdida del ser querido, se desagarran hacia los adentros sin encontrar oídos?
Por eso no se trata del culto a la personalidad. Los que hemos tratado de seguir sus ideas y su ejemplo no sufrimos de esos fetichismos, al contrario, somos ajenos a cualquier clase de cultos. Pero un Fidel ya retirado de las responsabilidades de Estado merece todo el reconocimiento y el amor de los pueblos del mundo que han sido testigos de su abnegada entrega revolucionaria y su infinita dignidad, con la que ha ilustrado al género humano.
Toda una vida dedicada a la liberación y la redención. Hoy se conmemoran 55 años del Asalto al Cuartel Moncada, acción armada contra la tiranía por la que Fidel es encarcelado y juzgado, donde, en una brillante y audaz salida política le atribuye a Martí la autoría intelectual de la rebelión y pronuncia aquella célebre frase: “la historia me absolverá” como epílogo de su propia defensa.
Desde ese día, en que cayeron Abel Santamaría y otras decenas de patriotas cubanos, hasta estos días en que los Cinco Héroes resisten en las cárceles del imperio por luchar a favor de la vida, Fidel ha sido el dirigente revolucionario más preclaro de toda nuestra historia.
Como estadista advirtió a comienzos de los ochenta sobre la grave crisis de la deuda externa y la necesidad de un nuevo orden económico mundial. Recientemente fue Fidel quien alertó sobre la locura del gasto militar estadounidense y los riesgos de la producción masiva de biocombustibles que tendrá como consecuencia un aumento del hambre en el planeta.
Sus reflexiones son pura consecuencia martiana al confirmar una y otra vez que trincheras de ideas pueden más que trincheras de piedras. El combate de ideas proclamado por Fidel ha contagiado a líderes como Chávez, Correa, Evo, Lula, Lugo, Daniel Ortega y muchos otros que aprecian el aporte fidelista como una luz en las tinieblas.
Él enfrentó en solitario la recolonización de nuestros pueblos con el ALCA y ha sido pionero en la gestación de polos alternativos de poder en el plano internacional por un mundo más justo y equilibrado.
En solidaridad Fidel es “pura bondad” como lo calificó la madre Teresa de Calcuta. Por sobre las carencias y dificultades que ha enfrentado el glorioso pueblo cubano, no hay lugar de la Tierra donde no haya llegado la mano amiga, sanadora y solidaria de la Revolución Cubana. Es razón de ser.
Por eso esta escultura es sólo un pretexto para decirle a Fidel cuánto agradecemos sus entregas y sus aportes para una mejor humanidad. Hoy le declararemos Héroe Eterno de Nuestra América y el Sueño Socialista. Él, por modestia, no es amigo de estas cosas, como cuando un padre se incomoda porque le hacemos un regalo que considera ostentoso. Pero se lo damos, porque se lo merece.
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