Me referiré a lo extraordinario que es la actitud patriótica, científica, moral, didáctica, social, humanista i hasta espiritual del Presidente de la República Hugo Rafael Chávez Frías, precisamente cuando visitan al país unos dinosaurios de cartón, plenos de odios i vanidades, traídos por la degenerada oposición radical venezolana. Aunque dudo que puedan escuchar ese programa, pues estarán en sus regurgitaciones o bascas como dicen en ciertos países lejanos, colocando sobre la mesa de oradores, sus arcadas de nauseas i sus eyecciones anti éticas, sobre la libertad de expresión i sobre la “dictadura” que existe en Venezuela, donde se les permite hablar. Deberían de aquí irse a Washington, para hablar de lo que sucede en el Medio Oriente o en Guantánamo. Sin embargo, creo que la curiosidad les hará indagar lo que el presidente más demócrata que ha conocido Venezuela i la América toda, expone ante las cámaras de televisión i por consiguiente frente a su pueblo i todas las regiones del planeta a donde llegue la señal, i enterarse de alguna manera, de cómo es un programa que es único en el mundo i en la historia.
En este programa Chávez a demostrado cómo ha sobrepasado por inmenso trecho, toda la cultura, conocimientos i virtudes humanísticas, de cuanto hombre ha ocupado la presidencia en la etapa Republicana, desde la muerte del Libertador hasta el presente; con más bagaje intelectual en lo político, lo social i lo ético, aunado a su creciente devoción por lo que simboliza la patria i el amor por su pueblo; por eso han surgido otros presidentes en América que le emulan i que se abrazan con fervor a los ideales del más grandioso héroe universal: Simón Bolívar. Ahora es verdad que nuestro norte es el sur i como dijo Benedetti, el Sur también existe.
De este modo, Chávez puede mantener ese ritmo de liderazgo, a fuerza de talento; siempre recuerdo los otros presidentes de la IV República, a los cuales para decir un discurso, para comunicarse con la nación, para inaugurar una obra o en la celebración de una fiesta o fecha nacional, no solamente delegaban la mayoría de las veces, sino que los discursos los grandes informes se los escribían. En cambio, no solamente las reuniones de gabinete, de trabajo, las ruedas de prensa, las entrevistas, todas son realizadas con espontaneidad, con perfecto conocimiento de lo que se dice, apenas si como hacemos hasta los profesores universitarios, se lleva una pequeña ficha de los puntos a tocar, cosa que vi hacer hasta el gran profesor belga, Jean Ladriére. Eso lo comprobamos en las numerosas giras, donde toda la atención de los periodistas i del público en general, hace de su figura el centro del evento i para colmo de la desesperación de los periodistas i escritores de la oposición, ahora demuestra que es un buen i me atrevo hasta decir, excelente escritor, en sus Líneas de Chávez. Empero, todo eso, cuando hai conocimientos, se matizan las exposiciones con acertadas cita del Libertador por ejemplo, i de autores i obras estudiadas o consultadas, (Galeano, Chomsky, Siglif, Benedetti, Martí, i obvio Bolívar, etc.) teniendo de paso su oratoria, el carisma de la oportunidad bien administrada i hasta un fino humor, una copla, un recitar de poesía, hasta una breve canción. Solamente la captación de auditorio por tantas horas, lo ha hecho antes que él, Fidel Castro, la dignidad de América. I donde me parece que pone más énfasis, es cuando toca aspectos éticos de la política i de la vida, o hasta de la religión cristiana, superior a los sosos sermones que se escuchan en las iglesias o las estupideces políticas o pretendidamente científicas de los obispos, arzobispos o el Cardenal, como aquel acto bochornoso en una misa, por el cavernícola del Cardenal Castillo Lara, i por ejemplo también, cuando entran en la biología, las matemáticas o temas concretos como el aborto. El presidente Chávez está sobrado, ante cualquier gaznápiro de la oposición venezolana, donde no solamente faltan líderes o los que creen serlo son de pacotilla, sino ante los “intelectuales” que publican libros como hechos en microondas, tal como sucedía con Brewer Carías, o con el antibolivariano genético de Manuel Caballero. Siempre he repetido entre mis amigos, haber conocido como cristianos de verdad, no de apariencia o de boca, a dos personas: una profesora española en Madrid, María África de la Cruz, i el presidente Hugo Chávez Frías. Sería largo de exponerlo. Como sería objeto de otra oportunidad de escribir, el apuro en que pone a la oposición i a los mismos chavistas, cuando insiste en las matemáticas, en el comprender la energía i el trabajo, etc., donde tendríamos que empezar por los símbolos como W (fuerza i trabajo a la vez así significados) i medidos en joules (J). A mí a veces estas cosas, i cuando cita a Pitágoras o a Platón, para muchos resulta como si nombrara extraterrestres; me divierte porque me gusta la Filosofía de la Ciencia i a la oposición se les fue Rosales que era su “filósofo” ¡Cómo estarán los demás!
Lo cierto es que, cuando ha explicado lo que ha sucedido con los pescadores de oriente i el rescate de la empresa La Gaviota, ha dado una clarísima distinción con un ejemplo irrefutable, de las diferencias que existen entre capitalismo i el socialismo que se construye con la revolución; dónde el capitalismo distorsiona la verdad i la vida. Lo mismo con una empresa del llano. Luego que se les ayuda i producen apoyados totalmente por el gobierno, el comején capitalista les lleva a vender su pesca o su cosecha al mejor postor, porque es lo que les inculcaron toda la vida. I con la misma claridad ha tratado los problemas de la pretendida acusación de los medios, de no haber libertad de expresión o estar limitada, precisamente cuando están visitantes descalificados, diciendo estupideces i mentiras en CEDICE i otros medios que no se tolerarían ni en el Norte Imperial ni en la Europa recalcitrante i oligarca. Cuando un escritor del montón, amparado en la fama de su padre, de conciencia i prestigio irrecuperable, dice que el presidente le teme a un antro de la más baja naturaleza como Globoterror, porque ni siquiera se ve en todos los estados de Venezuela (en la cual el presidente tiene “todos los medios”), creyendo que nos tragamos esa “tortilla” de posturas de avestruz, no es que se olvida, sino que la estupidez le cae encima como el que escupe hacia arriba; Globoterror, pese a su “poca cobertura nacional” es reproducida millones de veces por Radio Caracol, Radio i TV Caracas, todas las televisoras i radios de los estados Unidos, toda la prensa imperial e idéntico en toda Europa i el mundo, hasta donde alcanzan los tentáculos del Imperio, tergiversando las noticias i agregando falsedades. ¿Lo dice por bruto? No, por descarado sinvergüenza, bien remunerado mercenario de la política o mejor la politiquería asquerosa. Por todo esto i mucho más que no recuerdo de momento, los venezolanos hasta deberíamos grabar estos capítulos del ALÓ PRESIDENTE 331, porque es una lección de civismo, de dignidad, de verdades i al mismo tiempo una visión de cómo, pese a toda esta conspiración internacional, el país avanza hacia un mundo mejor, hacia una superación excepcional del nivel de vida i que los que no estudian, no leen, no amplían sus conocimientos, que sigan llorando al no saber interpretar ni las palabras. John Locke, cuando quiso empezar a exponer sobre el entendimiento humano, o su ensayo sobre el gobierno civil, ninguna de los dos campos tuvo verdaderos éxitos en conclusiones; pero lo primero que dijo era necesario hacer, fue el inventario de las palabras. I por lo menos, dentro de su filosofía del empirismo inglés, tuvo sí un gran acierto: “Nos demostró los límites de la experiencia: nada hai en nuestro cerebro, en nuestra mente, que no haya pasado a través de los sentidos”. Por todo esto, el desespero de la iglesia al no poder argumentar que la idea de Dios, era una idea innata, i el desespero i la agresividad de la oposición de ultraderecha, buscando refuerzos entre los mercenarios del pensamiento i de las guerras mediáticas, con palabras vacuas; porque, simples novelistas, ¡zapatero a tus zapatos! ¿Quién puede afirmar que la parejita de los Vargas Llosa, son pensadores o filósofos para pontificar? Absolutamente nadie, ni ellos mismos.
Adelante, Presidente Chávez. Patria, socialismo o muerte, ¡Venceremos!
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