La Comuna

 “Quiero que me digas amor que no todo fue naufragar, por haber creído que amar es el verbo más bello, dímelo nos va la vida en ello, nos va la vida en ello” 

 

                                                                                           Silvio. R

 La revolución bolivariana esta encontrando en la organización comunal el modelo al socialismo democrático y revolucionario. Modelo que no carece de peligros y dificultades dadas las condiciones en las que ha debido debatirse el proceso venezolano, entrampado, acosado y bajo las reglas de la democracia liberal burguesa.

 Apuntando a las metas de la veintena, “la comuna” debe responder al reto lanzado por el Comandante presidente cuando anunció la gran “Misión Cristo”, “pobreza cero en el 2.021” para superar las terribles condiciones de pobreza en que consiguió a la patria de Bolívar en 1.999, con el 55 % de sus habitantes viviendo en la pobreza y un 25% sufriendo los rigores de la  pobreza extrema. Durante el gobierno de Chávez las cifras de esos dos indicadores han descendido de manera drástica: del 55,1 por ciento a 33,9 para la pobreza y del 25 al 10,9 por ciento para la extrema pobreza. A pesar de estas metas alcanzadas en la gestión revolucionaria dos millones 34 mil 736 hogares continúan en la pobreza y 639 mil 690 en la miseria.

 DEL COOPERATIVISMO A LA COMUNA

Del auge cooperativista se pasó a la desilusión y luego a la desolación de miles de venezolanos que motivados por el discurso del Presidente se lanzaron a construir cooperativas para no conseguir la respuesta, ni el apoyo técnico, ni el financiero, ni la contratación apropiada, ni las fianzas necesarias, ni la supervisión de nadie. Luego, una iniciativa que ha funcionado en el mundo entero, aun en el capitalismo más feroz, se ha venido a menos en la Venezuela revolucionaria. El rescate del cooperativismo debe ser prioridad del gobierno nacional. El echo de que cooperativas como la “San José Obrero” en el estado Falcón, fundada en 1.962, funcione y funcione bien, que albergue mas de 39 mil asociados, maneje un flujo de caja de millonario, que posea una entidad de ahorro y prestamos con cajeros electrónicos propios, tiendas de electrodomésticos propias y siga creciendo es un ejemplo innegable de las ventajas del cooperativismo bien llevado.

 El anuncio de la creación de Las Comunas, vuelve a llenar de expectativas al pueblo venezolano. Y vuelve a desatar la carrera loca de los aventureros y los oportunistas que medran en la revolución e infestan todo cuanto sea anunciado por el presidente, Salen a “fundar comunas” sin saber realmente de que se trata, sin la mas mínima investigación, “chimbeando” diagnósticos, reuniendo a cuanto Consejo Comunal encuentren en el camino y….hablando en nombre del comandante prometen villas y castillos, sembrando falsas expectativas.

La revolución se juega el todo por el todo con al construcción del poder Comunal. La Comuna o funciona o el proceso muere en el intento. La construcción de La Comuna amerita entonces dejar de lado la improvisación y los “pujos” de la prisa. Es estrictamente necesario:

 1) Revisar las condiciones reales de los consejos comunales (también existen consejos comunales de maletín),

2) Establecer un “Sistema Financiero del Poder Popular” de control y evaluación de los bancos comunales y a los futuros entes financieros de La Comuna.

3) Establecer una dinámica de trabajo de los consejos comunales y de La Comuna en base al diagnostico integral  “real” y a la ejecución “supervisada” de los proyectos en atención a los tiempos y costos de ejecución de los mismos.

4) Debe construirse la comuna con TODAS las organizaciones sociales que hacen vida en la comunidad (Consejos comunales, Consejos de trabajadores de artistas, de estudiantes, Mesas Técnicas, Comités de Tierras, Asociaciones Civiles, Misiones Sucre, Ribas; Robinsón etc.) sin prevalecía de una sobre la otra y sobre todo que no se convierta en una simple “asociación de consejos comunales” que se subrogan la “representación” de las comunidades enteras y que en muchos casos funcionan como mafias.

LOS VICIOS DEL CAPITALISMO

 El “economicismo” dio al traste con el experimento cooperativista, pone en peligro el desarrollo de las comunas si desde su génesis el interés primordial se ubica en consecución del dinero fácil y desde los vicios del capitalismo decadente un grupo de “aventureros” se hagan de

 los recursos del estado para su propio beneficio burlando las esperanzas y expectativas de comunidades enteras, tal y como ya ha sucedido con las cooperativas y como suceder algunos consejos comunales (los hay también de “maletín)

El simple pregón de que en los consejos comunales actúa la “comunidad organizada” no garantiza que eso sea verdad. En muchos casos una decena de personas “controlan” al consejo comunal y  los recursos financieros son  escamoteados a la comunidad entera por dos o cuatro pillos estafadores. Asó sucedió en la comunidad de Ziruma en Maracaibo donde una sola “pilla” se alzó con 600 millones de bolívares viejos del banco comunal e inmediatamente “brincó la talanquera” y ahora es “operaria” de Un Nuevo Tiempo. En otro consejo comunal de una zona rural aledaña a Maracaibo 4 “pillos” se pusieron de acuerdo para “adueñarse” de 17 mil millones de bolívares viejos del banco comunal y nadie les puede reclamar nada “porque son matones”.

DE LA CARRERA LO QUE QUEDA ES EL CANSANCIO

 La COMUNA debe afianzarse sobre cuatro pilares básicos sin prevalecía de uno sobre el otro, para garantizar la sostenibilidad, en el sentido de hacerse perdurable en el tiempo y lograr sus objetivos a largo plazo y son:

1) El sociopolítico. Que se refiere conjuntamente a los procesos sociales y a los políticos, especialmente en tanto y en cuanto a la participación protagónica y no “representativa” de la comunidad como poder constituyente.

2) EL ECONÓMICO. Que obedece a un diagnostico amplio, profundo, sistemático y COLECTIVO de las necesidades, fortalezas, debilidades de la comunidad o comunidades que conforman la COMUNA, pero que además requiere de la compilación de datos de las fuerzas productivas de la Comuna, de las posibilidades socio productivas del espacio geográfico determinado, de las capacidades y saberes de los habitantes de la COMUNA con que se cuenta para el desarrollo y mucho más.

3) El FORMATIVO: Cuya amplitud se pierde de vista y abarca desde la formación socio política de la comunidad, la educación en valores, ética socialista, seguridad y defensa, cátedra bolivariana, historia contemporánea, elaboración de proyectos, principios de administración comunitaria, ciencias jurídicas sobre todo derecho comunitario comparado) y más hasta la formación para el trabajo (en asociaciones estratégicas con el INCES por ejemplo) , la aldea universitarias y la articulación con todas las misiones.

4) El MILITAR: Desde el cual todo hombre y mujer venezolan@ debe integrase a  la Milicia Popular Bolivariana y hacer vida militar en su COMUNA.

No podemos darnos el lujo de que la COMUNA mueras en el intento, la continuidad del proyecto revolucionario depende del éxito del proyecto comunal por eso es preciso actuar con paso seguro pero sin apresuramiento ni improvisaciones suicidas.

¡Solo El Pueblo Salva Al pueblo!


 

rafaelurdaneta@gmail.com




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Rafael Urdaneta


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