Son tantos los temas que exigen alguna consideración i tan limitadas las oportunidades de exponer artículos diversos, a lo que se suma las limitaciones que tenemos algunas personas, por diversos motivos, entre ella los ineludibles problemas de salud, que estimo debo hacer estos recuentos breves en lo posible.
Primero que todo, referirme a los absurdos i disparates de la oposición, entre ellos los “sagrados” rebuznos de la élite de la Iglesia católica i que “cristiana”, ocasionado por la impreparación o la incultura política, social, científica e ideológica, de los miembros del “alto clero”, como los casos de un rector universitario vitalicio, con una mentalidad medieval, contaminada luego de fascismo i de disparates comunes. Estoi casi seguro que, tanto este cura retardatario i soberbio, como el presidente de la CEV -que por cierto lo tenemos en el Zulia antibolivariano del gobierno regional- no se han leído la Ley de Educación (uso la supuesta /y/ griega i no la correcta latina, porque es “nombre propio” de un documento) ni mucho menos reflexionado o analizado su contenido; sin embargo, se oponen ridículamente a ella, porque viene de la AN i el proceso revolucionario del presidente Chávez. Desearía tener los medios de desafiar a alguno de esos energúmenos fascistas a un debate público sobre esa importante i completa lei, para frente al pueblo venezolano, demostrar que son ignorantes e incompetentes; repito: ¿Qué estudios serios tiene un cura o hasta un Cardenal, cuando pasan la vida estudiando una supuesta ciencia sin objeto de estudio? Por eso a los verdaderos sacerdotes o los estudiosos de la realidad que viven, ellos (los “jerarcas”) mismos, los excluyen o sancionan de manera absurda i ridícula. Lo hemos visto.
En el caso que tantos han tratado o comentado, respecto a la posición del Sr. Mario Silva i su programa LA HOJILLA (para mí importante, indispensable i verdadero bastión de lucha revolucionaria) i la actuación de Lina Ron i su grupo partidista, convengo tener simpatía por una mujer revolucionaria, valiente i decidida, quien comenzó a estudiar medicina i no es como algunos piensan, carente de preparación i cultura. Hasta cierto punto produce admiración su consagración a la lucha por i para el pueblo. Sin embargo Mario Silva, razonadamente tiene toda la razón: esta revolucionaria cometió un delito i un acto anti revolucionario que perjudica al proceso pacífico por excelencia, un verdadero delito que, le da alas a la oposición fascista i qué, es un principio jurídico; no podemos convalidar o apoyar un delito, recurriendo al ejemplo de mencionar muchos otros delitos del bando opositor. De todos modos, merece consideraciones, porque en medio de todo, es una patriota que defiende la soberanía de su país i los intereses justos de su pueblo.
El colmo de la agresividad de los medios de comunicación, es lo que sucede con la ciudadana Fiscal General de la Nación, Dra. Luisa Ortega Díaz, al ser amenazada de muerte por presentar una razonada sugerencia a la Asamblea Nacional, para elaborar una lei de delitos mediáticos, o sea, faltas contempladas en la lei con sus respectivas penas, por los medios de comunicación insocial en gran parte en manos de una oligarquía antipatriótica i traicionera de los ideales del Primer Ciudadano del Mundo, el Libertador Simón Bolívar. Realmente, a diario, especialmente en televisión, prensa i radio, los delitos llueven. Incluso, nuestro Código Penal en el Art.148 antes i ahora creo que en el 149, asientan que el irrespeto al Presidente de la República es un delito condenable con privación de la libertad por meses i aumentado en casos de reincidencia. Esto sucede todos los días, en todos los medios i en casos particulares, como de aquel falso “izquierdoso” tiempo atrás, de apellido Mujica, que llegó a sacarle la madre cobardemente, fundado en la incomprensible impunidad que existe tantas veces. La ciudadana Fiscal, tiene todo el derecho, los conocimientos i la autoridad moral suficientes, para hacer esa acertada recomendación.
Una anécdota con humor. Para quienes piensan que soi un hombre que incito no merecer consideraciones por mi posición anticlerical i Russelliana en cuanto a las religiones (“Todas son falsas y nocivas” dice el filósofo) i cara de poca “santidad” volteriana, me sucedió que andando en el vehículo de mi hijo el arquitecto i pintor, un auto grande negro, ya con achaques de edad vehicular, i faltándole por ahora el asiento delantero derecho que lo están tapizando, tenía que sentarme en la parte posterior con oportunidad de extender las piernas; usaba una gorra estilo inglés i bastón por alguno de mis problemas de edad. Él se bajó frente al Palacio Episcopal, pues está tratando de que ingrese al libro de marcas o récords de Guinness, la Cara del Papa Juan Pablo II, que realizó como mural de más grande dimensión, cuando su visita a Maracaibo. Quedé esperando en el carro. Una señora de la clase media-alta, de esas que tienen pasaporte al cielo, se acercó i tocó el vidrio. Cuando le atendí me dijo con sumiso respeto: ¿Usted es monseñor Ubaldo Santana? Me estremeció la comparación. ¡Tengo cara de gaznápiro! ¿Dónde mi cara de médico i filósofo? ¡Deben ser cosas de la edad!
En medio de un ataque de risa al contárselo a Andrés Eloy mi hijo, me dijo: Fíjate papi, es la mentalidad de la gente; carro grande, negro, sentado atrás en pose de gran pachá, quizá disimulando la personalidad con gorra i bastón, ¡este debe ser el monseñor, el arzobispo presidente de la CEV! Para muchos soi Voltaire, Anatole France o Russell con cara de vengador; pero por momentos tuve cara de “santidad” profesional i de gaznápiro. Si fuese un negrito, es un Coquito que se quedó cuidando el carro, si no que lo diga la Majo.
Según muchos analistas -que han aparecido como la verdolaga- o algunos presidentes blandos, lo de las siete bases norteamericanas en territorio colombiano, no solamente es negocio para Uribe i estrategia de guerra para Obama continuador de Bush, sino que no debemos preocuparnos porque eso es cuestión de la soberanía de los pueblos que debe respetarse, así sean preparativos de invasión o agresión armada para Venezuela i toda la América revolucionaria; empero, que Corea del Norte, Irán u otro país del mundo, desarrolle energía nuclear con fines pacíficos, eso no es soberanía de los pueblos, sino peligro inminente para los Estados Unidos i no debe permitirse, aunque esté contra la lógica más elemental: un pequeño país, aunque fabrique 5 bombas atómicas, por ejemplo, va a atacar a una superpotencia que tiene por la medida chiquita, más de 5.000 bombas atómicas, de Hidrógeno i de cuanta nueva tecnología destructiva se pueda imaginar. Capaz no sólo de desaparecer un país, sino de hacer peligrar de muerte al planeta Tierra. Es el caso de la hormiga en el cuello de un elefante, i otra que desde abajo le grita ¡Ahorcalo ahora!
Por último i por ahora, una pregunta a las personas que hayan vivido como yo, gran parte del siglo XX i estamos ya concluyendo la primera década del siglo XXI, i especialmente los años infaustos de la Dictadura de partidos de AD i COPEI, peor que la de Marcos Pérez Jiménez, que duró apenas 8 años i la del Puntofijismo de casi unos 40, i todavía sigue haciéndole mal a la patria. La pregunta es: ¿Cuándo vimos redactar o consultar una Constitución o cuándo vimos hacer la discusión de alguna lei? Siempre, misterio entaparado. La inmensa mayoría de los venezolanos, entre los que me incluyo, jamás habíamos visto el Congreso Nacional por dentro, i jamás el pueblo fue consultado para nada, excepto participando en elecciones, todas fraudulentas. Jamás hubo una limpia, pues entre ellos se sacaban las tripas.
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