John Vicente Salvatierra salió lleno de contento con su cámara al hombro y su lap top en el maletín, dispuesto a luchar contra el socialismo del siglo XXI donde quiera que esté. Se acercó al estacionamiento y fue directo a su Audi 2010, lo acarició y luego lo abrió a través de su sistema inalámbrico y una vez adentro se dijo. “Audi 2010, el carro del siglo XXI”.
Iba muy molesto porque el presidente Chávez había rectificado la medida de suspensión de la racionalización eléctrica y de paso le había pedido la renuncia al ministro. Eso no le parecía bien, porque él quería que se fuera la luz en toda Caracas, en hospitales, clínicas, escuelas y ojala se fuera en un juego Caracas- Magallanes porque ahí sí es verdad que los fanáticos se van a Miraflores y tumban el gobierno”
Mientras manejaba, pensaba: “Si este presidente empieza a rectificar es muy peligroso, porque entonces habrá gobierno para toda la vida, y lo bueno sería que no rectificara nunca, porque eso garantiza que en cualquier momento se le puede tumbar. Esas rectificaciones lo pueden salvar”
Encendió la radio y fue directo a Radio Nacional de España – “yo no escucho emisoras venezolanas, por muy escuálidas que sean”- se dijo. Y entonces escuchó que el locutor de la Radio Española decía: “Hoy vamos a hacerle un homenaje al poeta venezolano Andrés Eloy Blanco, y vamos a escuchar en su voz el poema La loca Luz Caraballo”.
John Vicente dudó por un instante en escuchar el poema. Pensó que no era posible que aquella emisora tan apreciada estuviera perdiendo el tiempo hablando de poetas venezolanos. Sin embargo escuchó el poema hasta al final. Y una vez que el poeta terminó de recitar, John Vicente dijo: ¡Adiós Luz que te apagaste!
Y ahí se le prendió el bombillo. Mientras manejaba, veía detenidamente las paredes de la ciudad, y descubrió una que estaba limpiecita como un sol, entonces tomó su spray azul- en el carro los tiene de todos los colores- se bajó del carro y se acercó a la pared, escribió con el spray el graffiti- Adiós Luz que te apagaste. Y luego sacó la cámara, tomó distancia y tomó la foto. La pasó a su lap top y desde allí comenzó a enviarla por correo electrónico a todas sus listas con el título: Se prende el peo en Caracas.
Una vez en su carro se dijo: “Nosotros los ricos tenemos que salir a luchar solos, porque las mayorías son muy pobres para defendernos”
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