Miembros de la Directiva de la Asociación Sindical nacional de Bomberos y Bomberas de Venezuela (ASIN.BOM.PRO.VEN) han iniciado una huelga de hambre en la planta baja del Edif. Vargas, en la Esquina de Pajaritos, sede administrativa de la Asamblea Nacional.
El motivo de esta acción extrema de protesta lo atribuyen a lo que consideran una lamentable continuidad de las políticas anti laborales practicadas por el ex alcalde golpista Alfredo Peña con el personal de Bomberos del Dtto. Metropolitano de Caracas. Dicen que para decepción de éstos, según un comunicado público que repartieron, en la administración del actual alcade Juan Barreto siguen las conductas antisindicales y el desconocimiento de derechos de los trabajadores que brindan este servicio. Consideran que esto es contrario a la prédica socialista y a la profundización de la revolución.
Afirman que la Alcaldía Mayor se niega a reconocer el sindicato a pesar de estar legalmente constituido, utilizando los mismos argumentos de Peña, que pretendía restringir dicha libertad al catalogar a los Bomberos no como un organismo de seguridad civil sino como un organismo de seguridad y defensa nacional. Señalan que esta es una conquista que ha sido lograda y es respetada en otros países. Acusan al alcalde de que tampoco cumple con la Ordenanza de Creación del Cuerpo de Bomberos Metropolitanos de Caracas (que data del 22 de marzo de 2002), según la cual todos los beneficios de los funcionarios debían ser nivelados y homologados tomando como base la aplicación de la Contratación Colectiva de Trabajo.
Reclaman que Peña nunca tomó en cuenta esta disposición, pero tampoco lo estaría haciendo Barreto, agregándose a esto una serie de actos que deterioran aún más sus derechos, entre éstos la reducción del salario de todo el personal administrativo, la eliminación de la antigüedad del personal uniformado, la reducción del monto de cobertura del HCM, la eliminación del pago en contribución para la adquisición de útiles escolares y juguetes, la eliminación de la jubilación con 20 años de servicio y con 100 % del último salario, etc., todo ésto contemplado en el contrato.
Denuncian algo que califican como de suma gravedad y es que la Alcaldía -según los informantes- ejecutó un allanamiento de la oficina sindical y hurtó los bienes del sindicato.
Algunos bomberos denunciaron además la práctica de utilizar a grupos mercenarios y hasta alcohólicos que reciben pago para que actúen como fuerza de choque para el desalojo violento de los trabajadores que realizan acciones de lucha. Al respecto dicen que ya les han visitado, y que los agresores usan el pretexto de calificar sus acciones como contrarrevolucionarias o contrarias al gobierno del presidente Chávez, cosa que niegan por completo, ya que la mayoría de estos trabajadores se identifica con el proceso revolucionario y por eso mismo defienden sus derechos en pos de un mejor nivel de vida para sus hijos y sus familias, así como defiende el ejercicio de la democracia participativa y protagónica, que no puede existir si se atropella a los sindicatos.
Piden la solidaridad de todas las organizaciones de los trabajadores y del movimiento popular, así como de los medios comunitarios y alternativos.