10 de Mar de 2008. El embajador de Venezuela en México, Roy Chaderton, aseguró que en la Cumbre del Grupo de Río, “hubo un desenlace muy serio, muy inteligente y muy sabio, que logró darle un frenazo a los cánticos belicistas que ya estaban presagiando una radicalización de hechos violentos de carácter militar en nuestros países”.
Chaderton, en una entrevista telefónica realizada por el periodista Héctor Escalante para YVKE Mundial, manifestó que el encuentro de los Jefes de Estado y de Gobierno en Santo Domingo, fue, desde el mejor punto de vista, un espectáculo educativo, y desde el punto de vista emotivo, especialmente por todas las opiniones que pude recoger de gente que no se interesa mucho en política internacional, fue algo así como la final del mundial (de fútbol), sólo que los dueños del estadium más grande se quedaron con las ganas de ver una riña”.
México en la Cumbre
El embajador calificó la participación del presidente mexicano Felipe calderón en la Cumbre, como una “presentación muy cuidadosa dentro de un espacio nuevo que México está recuperando en el escenario internacional”, ya que “anteriores experiencias dieron la impresión de que México se estaba alejando del contexto de los intereses de América Latina, y concentrándose exclusivamente en sus intereses prioritarios de política exterior”.
Refirió el diplomático venezolano que “hubo en el pasado y hay en el presente, intereses muy poderosos, comprometidos en perturbar la evolución positiva de las relaciones entre los dos países”. Sin embargo, aseveró que “para nosotros, los latinoamericanos, es prioritaria una buena relación con México, y un esfuerzo colectivo de cooperación junto con el gobierno mexicano, para atender, no sólo los problemas que tenemos en común, sino también las aspiraciones y los sueños”.
Relaciones binacionales
Destacó, por otra parte, la evolución que han alcanzado los acuerdos bilaterales en materia de comercio exterior. “A partir de la toma de posesión del presidente Chávez en 1999, el comercio entre ambos países ha ido creciendo de forma casi geométrica, con excepción del 2003, cuando por causa del sabotaje petrolero, nuestra economía se fue temporalmente al fondo, pero ya en el 2004 recuperamos y aumentamos el volumen de ese comercio, sobre la base del 2002, y a pesar de la salida de Venezuela del Grupo de los Tres, las inversiones mexicanas en Venezuela se han multiplicado, en este momento son muy importantes, y nosotros hemos aumentado nuestras exportaciones a México también, y estamos explorando áreas donde podamos crecer juntos, con una gran voluntad, sobre todo cuidando una relación histórica y cultural que a veces se olvida pero que se remonta, inclusive, hasta su aspecto más llamativo en 1799, cuando el jovencito Simón Bolívar arribó a México en su primera experiencia internacional”.
El Embajador Roy Chaderton mencionó algunos de los proyectos binacionales que se están desarrollando de manera conjunta con el estado mexicano: “en el área educativa tenemos posibilidad de intercambios universitarios. Con respecto a la misión milagro, algo que estamos tratando de que termine de despegar, ya hemos hecho algunas iniciativas en ese sentido, pero hace falta todavía darle mayor cuerpo a esto”.
El comercio, según Chaderton, es importante porque “México es un país que produce alimentos y que puede cumplir una función en estos tiempos de amenaza de desabastecimiento. En el área petrolera las oportunidades son muchas y sobre esto hay que conversar”.
De igual modo, consideró factible el intercambio político, que incluye el intercambio de “líderes parlamentarios de todas las tendencias políticas”, área en la que a su criterio, "ya se han logrado algunos avances importantes". También mencionó el intercambio cultural y el intercambio científico.
PSUV, inspiración popular
Ubicándose en el plano nacional, Roy Chaderton calificó los comicios internos del PSUV como un “ejercicio democrático, abierto y con una inmensa inspiración popular, porque es la base y no los cogollitos tradicionales, independientemente del poder de los liderazgos establecidos". El Embajador considera que este ha sido “un buen ensayo” por lo que recomienda que “hay que cuidarlo para evitar caer en los vicios pasados”. En definitiva, el Embajador de Venezuela en México asume la conformación de este partido como un “acontecimiento inspirador” y espera que sirva de “lección democrática para todas las organizaciones políticas del país”.