09 de julio 2009. - Marco Guía, abogado de la familia de Rufina Morales, tía del Presidente de Bolivia, que fue hallada en junio descuartizada en Cochabamba, denunció el miércoles que este crimen formaba parte un plan, urdido por el mercenario croata boliviano Eduardo Rózsa, cabecilla de un grupo irregular desbaratado en abril por la Policía, para matar al presidente Evo Morales.
"De la revisión de antecedentes logre evidenciar que hay una flagrante tentativa de magnicidio contra el presidente Evo Morales, una venganza política de parte de separatistas que promovieron el terrorismo", enfatizó.
El jurista se presentó ante la Fiscalía de Distrito de La Paz para denunciar que "la próxima víctima de los planes criminales de personas allegadas a la célula de sicarios, sería el Presidente".
Dijo que las personas que perpetraron el asesinato de Rufina Morales lo hicieron por vendetta, por la muerte, en un choque con la Policía, de Rózsa y dos milicianos europeos, y para lanzar, de paso, una advertencia.
Entre los responsables de la muerte de Rufina Morales, Guia nombró a un brasileño de apellido Rodríguez, recluido en la cárcel de El Abra, de Cochabamba, y dos prófugos bolivianos oriundos de Cochabamba y Santa Cruz.
La mujer, una septuagenaria fue descuartizada después de muerta, establecieron las pericias de policía científica.
De acuerdo con el abogado, "Rodríguez confesó que descuartizó el cadáver de la tía del Presidente y que fue por una venganza política".
Además que en su declaración lo vincula con la célula de milicianos de Rósza.