Así lo expresó Zelaya tras el encuentro con su homólogo guatemalteco, Álvaro Colom, en la capital de esa nación centroamericano, en donde expresó que 'la insurrección es un derecho del pueblo que está consignado en el artículo 3 de la Constitución de Honduras, y los hondureños deben hacer valer sus derechos constitucionales', reportó Telesur.
'Yo no me he rendido ni me voy a rendir. Voy a regresar al país en el menor tiempo posible. No quiero avisar la hora ni el día para no alertar a las fuerzas opositoras que sabemos que son criminales. Vamos a regresar al país. Estamos planificando nuestro retorno', reiteró el mandatario hondureño.
Zelaya pidió a los hondureños 'que no dejen las calles que es el único espacio que no nos han quitado'.
'El derecho a la insurrección es un derecho constitucional. Nadie comete un delito en un gobierno de facto por protestar pacíficamente en diferentes campos de la sociedad', agregó.
Subrayó que 'las huelgas, las manifestaciones, las tomas y la desobediencia civil son un proceso necesario cuando se violenta el orden democrático en un país'.
'No hay que dejar la lucha, hay que mantenerla hasta que los golpistas salgan del régimen de facto que han establecido en nuestro país', dijo.
El mandatario hondureño hizo este llamado a la insurrección 'porque un pueblo no puede estar de acuerdo con algo impuesto e ilegal', al tiempo que afirmó que es totalmente 'legítimo defender los espacios, las calles de Tegucigalpa'.
Zelaya comentó que 'la insurrección es lo único que ha dejado el gobierno de facto como medida de expresión del pueblo' contra el golpe de Estado orquestado por Roberto Micheletti.
Hasta ahora no hay una postura oficial de la agenda del mandatario hondureño. Zelaya se encuentra en la Embajada de Honduras en Guatemala, donde permanecerá para hacer contactos con otros líderes sociales.
Manuel Zelaya arribó este martes a Guatemala, cuyo presidente ha condenado el golpe de Estado del pasado 28 de junio y que ha sido repudiado de forma unánime por países de todo el mundo.
Horas antes, el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, convocó para el próximo sábado a las delegaciones de su homólogo legítimo de Honduras, Manuel Zelaya, y del líder del gobierno de facto en ese país, Roberto Micheletti, para reiniciar los diálogos con el fin de encontrar una salida a la crisis y retomar el hilo constitucional en ese país.
Arias, quien actúa como mediador en el conflicto, declaró este martes a periodistas que convocó a las delegaciones de Zelaya y Micheletti para este sábado en San José, y advirtió que las conversaciones podrían alargarse hasta el domingo.