18 de oct. 2010.-El presidente de Bolivia, Evo Morales, sugirió este lunes llevar a juicio al Fondo Monetario Internacional (FMI) por destrozar la economía boliviana mediante la aplicación de políticas de privatización en gobiernos anteriores.
Morales precisó que el organismo internacional implantó políticas de privatización que significaron un grave daño a la economía boliviana.
"En la gestión de Gonzalo Sánchez de Lozada (1993-1997/ 2002-2003) nos impusieron políticas económicas privatizadoras (...) Esas fueron sus recetas para descapitalizar al país", recalcó.
Reiteró que el FMI debe indemnizar a su país por los daños económicos que le causó con esas medidas, que terminaron "agudizando la pobreza de Bolivia".
"Eso (el FMI) nos perjudicó el crecimiento económico del país (...) en algún momento, tendrán que resarcir los daños que hicieron a Bolivia y a Latinoamérica con sus políticas económicas de privatización y saqueo de los recursos naturales", puntualizó.
Ratificó que desde que el país en su primer gobierno (en 2006), "no siguió las recetas del FMI" y se centralizó en "exportar políticas y programas económicos y sociales", se dio un repunte en la economía boliviana y las reservas internacionales aumentaron a 9 mil millones de dólares.
"Este es el mejor nivel que han tenido en la historia del país", destacó.
Las declaraciones surgieron como respuesta a los reclamos de la Asociación de Víctimas y Heridos de octubre de 2003, que denunció a Morales por no querer ir a declarar como testigo en contra de Gonzalo Sánchez de Lozada y sus ministros, quienes se encuentran residenciados en Estados Unidos (EE.UU.) y son acusados por la muerte de más de 60 personas y cerca de 500 heridos.
Ante la imputación, el mandatario expresó que si bien el llamado Octubre Negro, trajo luto y sangre al país, es también urgente el "nuevo amanecer" de Bolivia.
Las políticas económicas aplicadas por Morales han logrado la nacionalización de varias empresas importantes del país, incluidas las de los hidrocarburos, la riqueza gasífera y varias distribuidoras de gas y gasolina, así como de telecomunicaciones, electricidad y fundidoras de minerales.
Durante el 2009, la economía de Bolivia experimentó un aumento de cuatro por ciento y su inflación no superó el dos por ciento.
En abril de este año, el Presidente afirmó que la economía de su país era una de las que más se había fortalecido a pesar de la crisis financiera que afectó a gran parte de las economías mundiales.
Morales, destacó que para ese momento, Bolivia mostró el índice más alto en recuperación y crecimiento entre los países de Latinoamérica.
El 8 de octubre de 2003, en la ciudad de El Alto, (oeste de Bolivia), se inició un paro cívico decretado por la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve), con el apoyo de la Central Obrera Regional (COR) y la Federación de Trabajadores Gremiales.
La protesta fue convocada para defender los recursos naturales en respuesta a un proyecto gubernamental de Sánchez de Lozada para la exportación de gas hacia Estados Unidos a través de puertos chilenos.
Por los sucesos, que dejaron un total de 68 muertos y más de 400 heridos a lo largo de varios días de protestas, el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y sus ministros José Carlos Sánchez Berzaín, Jorge Joaquín Berindoagüe y el Alto Mando de las Fuerzas Armadas, están imputados por los delitos de genocidio, lesiones graves, entre otros.