Berlín, marzo 1ero - Karl-Theodor zu Guttenberg ya presentó su renuncia a la canciller alemana Angela Merkel. La dimisión del político ya fue notificada a la casa presidencial de ese país.
Sin embargo, la jefa de Gobierno volvió a garantizar este lunes su apoyo al ministro conservador, pese a las fuertes críticas de la oposición y amplios sectores de la sociedad. El caso ha sido bautizado como el 'copygate' o el 'googleberg'.
"El ministro alemán de Defensa tiene la confianza y el apoyo de la canciller. Nada ha cambiado", subrayó. La tarea del político es la de ministro y no la de científico, añadió a través de su portavoz.
La semana pasada, la Universidad de Bayreuth le retiró el título de doctor en derecho que le había otorgado con la máxima calificación y está investigando si copió de forma premeditada. Fue el mismo Guttenberg quien solicitó que se anulase el título por haber incluido textos de otros autores sin citarlos como fuentes.
El joven político, de 39 años, reiteró en todo momento que se trató de errores y no de plagio.
Guttenberg -cuyo nombre completo es Karl Theodor Maria Nikolaus Johann Jacob Philipp Franz Joseph Sylvester, Baron von und zu Guttenberg- y quien está casado con Stephanie Gräfin von Bismarck-Schönhausen, tataranieta del 'canciller de hierro' Otto von Bismarck, fue acusado de plagio en 286 páginas de su tesis doctoral de la Universidad de Bayreuth en el 2007.
Según GuttenPlag, plataforma digital alemana dedicada a detectar plagios, el 72,77 por ciento del trabajo del ministro corresponde a otros textos doctorales y de pregrado.
Tras la aceptación pública de graves errores en la elaboración de su tesis, aunque descartó la intención de engañar, Guttenberg fue despojado del título de doctor por parte de la universidad de la región de Baviera, que aún investiga a fondo el caso.
Lo particular de este capítulo es que Guttenberg es el político más popular del país y la estrella del gabinete de la canciller Angela Merkel, quien consideró lógico que su ministro fuera despojado del título de doctor, pero aclaró que no lo necesita como asesor científico sino como ministro de Defensa.
El ministro ha sido el impulsor de la suspensión del servicio militar en Alemania, recién aprobada por la coalición de Merkel tras décadas de defensa del reclutamiento obligatorio, y tenía ante sí el cometido de reformar las estructuras militares hacia un Ejército profesionalizado.