7 sept. 2015 - El presidente venezolano, Nicolás Maduro, volvió a llamar a su homólogo colombiano, Juan Manuel Santos, para hablar "dónde, cuándo y como quiera" para canalizar la solución del problema fronterizo entre ambos países.
"Al presidente Santos nuevamente le hago un llamado. No tenga miedo al diálogo presidente (…) No me huya más (…) Pongamos la verdad sobre la mesa y saquemos soluciones de esa mesa. Es mi último llamado", manifestó el domingo Maduro desde Kingston, donde participó en los actos para conmemorar los 200 años de la carta de Jamaica.
"No me huya más. (…) Me quedo esperando, presidente Santos por usted para una reunión. No siga rehuyendo a la conversación que solo a través del diálogo es posible buscarle solución a los problemas de la frontera", recalcó el jefe de Estado venezolano que a fines del pasado agosto ya había llamado a su par colombiano a dialogar para definir estrategias en contra de delincuencias organizadas en la frontera.
Maduro que ordenó el cierre de la frontera con Colombia en el estado Táchira para restablecer la paz tras incidentes de violencia y contrabando, asegura que la abrirá tras un acuerdo con Santos sobre mecanismos conjuntos que permitan construir una frontera de paz entre ambos países.
Sin embargo, Maduro consideró que Santos "no quiere hablar" por presiones internas "de la oligarquía" y de los medios de comunicación. Esos medios que "han llamado a que me maten, presidente Santos", advirtió el presidente bolivariano.
De acuerdo con el gobernante bolivariano, "las élites de Bogotá pretenden que esos compatriotas colombianos de la frontera (...) vivan de traficar gasolina venezolana, de traficar con la moneda venezolana, con los productos que se producen o que circulan por la economía venezolana".
En otra parte de sus declaraciones, Maduro confirmó haberse reunido el día anterior, sábado, con los cancilleres de Brasil y Argentina, quienes buscan mediar en la crisis colombo venezolana, y que ellos le comunicaron que Santos "estaba dispuesto a aceptar mi propuesta de una reunión cara a cara".