Septiembre 19 de 2015.- Su rico sabor y su crujiente contextura hacen de las Panelas de San Joaquín uno de los dulces tradicionales del estado Carabobo más preciado por la población.

Por más de 130 años, ese bizcochuelo dulce se elabora en ese municipio, ubicado en el eje oriental del estado Carabobo, en la región centro- norte del país, convirtiéndose en Patrimonio Cultural de esta entidad.

Las panelitas, como tradicionalmente se le conocen, son fabricadas de forma artesanal por varias familias sanjoaquineras, quienes se han dedicado a lo largo de cinco generaciones a preparar este panetón que se ha ganado el corazón de muchos venezolanos.

Marfred Chacón Ruíz integra una de las familias elaboradoras de Panelas de San Joaquín. Cuenta que la tradición de elaborar estas panelitas para la venta se remonta al año 1885. Desde esa fecha, no se ha paralizado su fabricación.

"La elaboración de este bizcocho dulce era una costumbre de las primeras familias españolas que se asentaron en la zona. Nuestra fabrica se llama Tía Sebastiana en honor a la tía abuela de mi mamá que perteneció a la segunda generación de fabricantes. Ella recibió la receta de una de las ahijadas de la fundadora", explicó.

En los primeros años de elaboración para la venta, las panelitas eran vendidas a las afueras de las casas de las familias que se dedicaban a su producción.

"Se colocaba una mesita en las puertas de las casas ubicadas en la calle principal del pueblo, para que los carros y autobuses que por allí pasaban pudiesen comprar las panelas. Luego se vendían también en la estación del ferrocarril, eso fue lo que ayudó a expandir y a que no sólo se elaboraran para el consumo familiar", narró.

Con la construcción de la Autopista Regional del Centro, específicamente entre los años 1955 y 1960, decayó considerablemente la venta de panelitas ya que el flujo de vehículos por las calles de San Joaquín se trasladó a la nueva arteria vial.

"Luego de eso se reinventó la distribución y se comenzó a recuperar la tradición, ya los vendedores subían hasta la autopista y empezaron a hacer famoso ese vaivén de las bolsitas de panelas en esa vía, para llamar la atención de los conductores y así vieran que estaban vendiendo. Ahora el que ve un empaque con tres sobresitos blancos sabe que se trata de las panelitas de San Joaquín", expresó.

La receta

En la actualidad, las panelitas de San Joaquín se preparan con cinco ingredientes básicos: harina de trigo, azúcar, huevos, vainilla y polvo de hornear.

"Se hace una mezcla con todo eso, como si se tratara de una torta, pero con las cantidades que se plantea en la receta. Se hacen panelones y luego se rebana y se ponen en los hornos y se dejan para el día siguiente, cuando ya se han secado y se ponen crujientes, característica principal de las panelitas", comentó Marfred.

Dijo que desde que se fabrican las panelitas, la variación que han experimentado son los ingredientes que se usan para la elaboración, motivado al proceso de industrialización de los alimentos.

En la receta original, por ejemplo, los ingredientes que se usaban era el almidón de yuca (fue sustituido por la harina de trigo), papelón rallado (en la actualidad se usa azúcar), huevos criollos, nuez moscada (ahora usan vainilla para reducir el olor y sabor del huevo) y se usaba el bicarbonato en vez del polvo para hornear.

El horneado también ha variado. Mientras ahora se utilizan hornos industriales, las primeras generaciones hacían las panelitas en los mismos hornos de sus cocinas, elaborados con brazas de leña, ya que para entonces no se contaban con cocinas a gas.

Aporte económico y cultural

En el municipio San Joaquín del estado Carabobo existen nueve fábricas artesanales de Panelitas, quienes día a día contribuyen, de forma modesta, al desarrollo económico de esa localidad carabobeña, no obstante, el aporte más valioso es el cultural.

"Nuestro trabajo permite que contribuyamos de forma modesta a la economía de San Joaquín, sin embargo lo más importante es que damos a conocer a nuestro pueblo. En toda Venezuela conocen las panelas de San Joaquín lo que para nosotros es un gran orgullo", manifestó Marfred Chacón Ruíz.

A nivel de producción, dijo que particularmente Tía Sebastiana elabora mensualmente unas 800 cajas de panelas.

"Somos fábricas artesanales y así hemos decidido mantenernos, para que siga siendo el mismo sabor, la misma dedicación de la gente, no elaborarlas de manera industrial para que no se abarrote el mercado y después nadie quiera comer las panelas", señaló.

Rosángela Moreno