El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Alí Rodríguez Araque, afirmó que "democracia y pobreza son sencillamente incompatibles", durante su intervención de este lunes en el marco de la XXXV Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se celebra en Fort Lauderdale, Florida, EE.UU.
Aseguró Araque que para que la democracia sea auténtica "deben garantizarse no sólo los derechos civiles y políticos sino también los económicos, sociales y culturales. La democracia y la pobreza son sencillamente incompatibles. Los derechos humanos que se resumen en una vida digna son esencia de una democracia". Según Rodríguez donde se padezcan estos males la democracia está en entredicho y los derechos humanos "resultan una ficción".
"Donde se padezcan calamidades la democracia está en tela de juicio y los derechos humanos resultan una ficción", afirmó el canciller de la República (…) "La OEA debe promover la democracia en la región y no ser un órgano interventor en los asuntos internos de nuestros países", dijo.
Asimismo el representante venezolano señaló que es tan importante es el derecho de los grupos políticos a organizarse en democracia, como lo son la igualdad social y la no intervención de los asuntos internos de los países miembros de los países americanos.
Consideró llevar más allá el lema de la asamblea, "hacer realidad los benéficos de la democracia" llevando el debate a cuáles son esos beneficios y cómo lograrlos, por lo que seguidamente sentenció que uno de los factores que más afecta la estabilidad política de la región es la pobreza y la desigualdad social.