Desde ofrecimientos de barcos y aviones, víveres o personal de protección civil, hasta una modesta pero muy simbólica donación de 25.000 dólares de Sri Lanka, país que fuera devastado por un tsunami en diciembre del año pasado, el mundo entero intenta ayudar.
Los ofrecimientos llegan luego de que Estados Unidos, el país que más dinero dona, señalara que está abierto a asistencia externa, a pesar de no hacer un pedido específico de ayuda, reseñó AFP.
Nueva Orleans, la ciudad más afectada por el ciclón, se encuentra en emergencia sanitaria y aparecía militarizada este viernes, con el despliegue de soldados llegados de Irak para controlar el caos por los saqueos y disturbios que se desataron tras el ciclón, que según la más dura estimación hasta ahora podría dejar 10.000 muertos al devastar la costa sur del país.
La crudeza de las imágenes del desastre, contribuyó a desatar una ola mundial de solidaridad con la mayor economía del planeta.
''Les daremos todo lo que pidan, desde reservas de petróleo hasta cualquier otra cosa que necesiten'', declaró Javier Solana, alto representante para la Política Exterior de la UE, en el segundo día de reunión de los cancilleres europeos en Newport, Gales.
La OTAN también está dispuesta a ayudar, anunció el viernes en Sofía el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jaap de Hoop Scheffer.
''Dadas las imágenes que vemos por televisión desde Nueva Orleans y las consecuencias del huracán Katrina'', hay que decir que ''cuando nuestro socio en la OTAN y amigo importante -Estados Unidos- pide ayuda, la OTAN está dispuesta a responder a esta solicitud'', declaró sin dar detalles sobre el tipo de ayuda.
La Agencia Internacional de Energía (AIE) confirmó el viernes que sus 26 países miembros llevarán adelante una ''acción colectiva'' para utilizar dos millones de barriles de crudo por día de sus reservas estratégicas durante 30 días, para enfrentar las consecuencias del huracán Katrina.
Individualmente, los principales aliados de Estados Unidos y otros países también se movilizan.
El primer ministro francés, Domininique de Villepin, dijo el jueves que su país está ''dispuesto a aportar su ayuda'' a Estados Unidos y ofreció ''recursos de seguridad civil que están basados en las Antillas''.
La cancillería francesa ofreció ocho aviones y dos barcos, 600 tiendas y 1.000 camas de campaña.
El canciller germano, Gerhard Schroeder, está personalmente detrás de los detalles de un paquete de ayuda, señaló un portavoz del gobierno alemán. Berlín puede proveer asistencia en tratamiento de aguas y refugios, indicó el vocero.
Japón ofreció 200.000 dólares para la Cruz Roja de Estados Unidos, y más de 300.000 dólares en tiendas de campaña, generadores y tanques de agua. El fabricante de autos Toyota ofreció cinco millones de dólares y Nissan 500.000.
Australia prometió 7,5 millones de dólares a través de la Cruz Roja Estadounidense.
El ministro de Defensa de Canadá, Bill Graham, dijo por su parte que su país está preparando un paquete de asistencia, que incluye materiales militares.
Holanda enviará una fragata con material de socorro y propone ayuda de sus expertos en diques, Suecia ofrece equipamiento médico y apoyo técnico en comunicaciones, así como tratamiento de aguas y refugios, y Austria un equipo de la Cruz Roja para ayuda psicológica.
Italia está lista para enviar ayuda, pero las autoridades estadounidenses todavía no pidieron nada, anunció el jefe de la protección civil italiana, Guido Bertolaso, muy crítico sobre la gestión de la catástrofe.
Taiwán donará dos millones de dólares para los siniestrados.
También Israel, México y Rusia ofrecieron solidaridad y ayuda a Estados Unidos.
Incluso Venezuela, país con el que Washington mantienen difíciles relaciones, dispuso rescatistas, alimentos y agua potable que enviará ''inmediatamente'' a Estados Unidos cuando este país lo solicite, y que se sumará al millón de dólares para tareas de rescate donado por Citgo, filial estadounidense de la petrolera estatal PDVSA, informó el jueves a la AFP el jefe de Protección Civil, Antonio Rivero.
El presidente venezolano Hugo Chávez ofreció ya el lunes pasado ayuda a Estados Unidos, mientras que ha fustigado a Bush por no haber previsto, a su juicio, un eficiente plan de evacuación en las zonas afectadas.