Entrevista con Mary Pili Hernández, Viceministra para América del Norte y para Asuntos Multilaterales.

Por: Emilce Chacón, con fotos de Antonio Gallardo (MRE).

El Gobierno de Estados Unidos está promoviendo el rechazo a la candidatura de Venezuela al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ¿Tiene moral y derecho este país para manifestarse en contra de la opción venezolana?

“Estados Unidos no tiene el derecho de manifestarse en contra, entre otras cosas, porque no tiene moral para hacerlo. Para declararse en contra de una candidatura, lo primero que tendría que tener es moral y la perdió porque ha violado las propias resoluciones del Consejo de Seguridad. Por delicadeza y por principios ya debería haber renunciado, entendemos que no lo hace porque los intereses son muy grandes.

Estados Unidos no respeta el Consejo de Seguridad (*). Pública y escandalosamente ha violado resoluciones expresas, por ejemplo, cuando utilizó la falsa excusa de que en Irak había armas de destrucción masiva para invadir ese país, en contra de lo que había decidido el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Si hay algún país que no tiene moral para hablar de la pertenencia o no al Consejo de Seguridad es justamente ése, porque ha demostrado que no lo respeta como tampoco respeta el multilateralismo. Hace lo que le da la gana pasando por encima de las decisiones que se toman en organismos tan importantes como éste. Además ha sido responsable de la muerte de cientos de miles de personas. De modo que no tiene ninguna moral para hablar en función de la candidatura de Venezuela”.

¿Por qué ese intento de torpedear el ingreso de Venezuela al Consejo de Seguridad? Estados Unidos es una potencia militar y económica ¿Por qué le preocupa tanto Venezuela en la ONU?
“Evidentemente, Venezuela no puede invadirlo o quitarle el mercado, su única preocupación es que decidimos ser autónomos en nuestra política internacional. El país se ha deslastrado de la posibilidad de que Estados Unidos le dicte lo que debe hacer en el plano internacional y muy especialmente en el plano multilateral. Venezuela es un país independiente y soberano que está dispuesto hacer respetar el derecho internacional en todas las instancias.

Estados Unidos está acostumbrado a ordenar y no a cooperar de manera solidaria, le preocupa que un país pequeño como Venezuela se pare con dignidad y con firmeza ante el imperio”.

A pesar de las presiones para entorpecer la candidatura ¿Venezuela mantendrá su posición de competir por el escaño en el Consejo de Seguridad?
“Es ilegítimo, irrespetuoso, vergonzoso e inmoral que Estados Unidos esté pretendiendo presionar a naciones amigas, naciones hermanas para ir en contra de un país como Venezuela. Nos parece insólito que utilice la gran influencia política, económica y militar que tiene para sabotear la candidatura.

Sin embargo, Venezuela seguirá adelante. Sabemos que el enemigo a vencer en este esfuerzo legítimo que está haciendo nuestro país, es Estados Unidos. Sabemos que es difícil luchar con un poder hegemónico tan grande y su influencia en los organismos multilaterales, especialmente en las Naciones Unidas- recordemos que la propia sede de la ONU está en ese país- Sabemos que tenemos muchos elementos en contra, pero para nosotros es un asunto de principios, de dignidad. Estados Unidos no es quien nos va a decir cuándo competir o no por una opción que es legítima para todos los países del mundo”.

¿Cuántos países han brindado su respaldo a la candidatura de Venezuela?
“En este momento estamos en un período de campaña, los votos se cuentan al final. Tenemos algunos respaldos que naciones importantes nos han brindado, por ejemplo, en el continente americano ya lo anunciaron públicamente Brasil y Argentina”.

¿Qué pasará si no hay consenso entre los países de América Latina y el Caribe y que sucederá si ocurre lo contrario?
“Si el Grupo de América Latina y el Caribe (Grula) se pone de acuerdo en un solo candidato para el escaño que tiene en el Consejo de Seguridad, la candidatura se endosa directamente. Si no es así, y Guatemala mantiene su opción de ser candidato hasta el final -Venezuela ya ha dicho que persistirá hasta el último momento- se llevará a votación de todos los Estados que integran la ONU”.

¿Han sido efectivos los criterios manejados por la ONU, hasta ahora, para garantizar la paz y la seguridad en el mundo?
“La Organización de Naciones Unidas tiene 60 años de constituida, hubo momentos muy importantes, en donde el esfuerzo mancomunado que se ha hecho, a lo interno de la organización, ayudó y promovió mecanismos de paz en el ámbito mundial. En algunas oportunidades dentro de esas seis décadas los esfuerzos fueron más exitosos, en otras oportunidades lamentablemente no ha sido así. Lo importante es tener claro que solamente por la vía multilateral se pueden resolver los problemas de manera pacífica.

Es fundamental que no desistamos en ese esfuerzo, tomando en cuenta que existe un país que pretende ejercer su hegemonía por encima de todo el globo terráqueo. Si desistimos, estaremos logrando que el imperio pueda adueñarse del planeta como lo intenta hacer. Tenemos que darnos cuenta que somos muchos más los países que realmente creemos en que el diálogo y el respeto por el derecho internacional, son los mecanismos apropiados para defender cualquier diferencia en términos pacíficos.

El reforzamiento del multilateralismo es lo único que garantiza la posibilidad de que, dentro del marco del Derecho Internacional, las naciones más pequeñas tengan los mismos derechos que las naciones más grandes. Por eso, Venezuela trabaja ardientemente para lograr que el este sistema permanezca y se fortalezca cada día”.

¿Cuál es el fundamento de la política exterior de Venezuela hacia Norteamérica y cuál ha sido el fundamento de la política exterior de Estados Unidos hacia América Latina?
“Venezuela quiere tener buenas relaciones con todo el mundo. Eso incluye a Estados Unidos. Ahora, hay una sola condición que el país pone para que esto se cumpla: el respeto. En la medida en que Estados Unidos respete nuestra soberanía, nuestra Constitución, nuestras leyes, nuestro pueblo, nuestra autodeterminación, nuestras autoridades democráticamente electas; seguro tendremos excelentes relaciones con Estados Unidos.

Ahora, el respeto no es un problema retórico como ellos lo han querido hacer ver. No es un problema de lenguaje bonito o feo. Es un problema práctico, que se mide en las acciones. No podemos permitir que Estados Unidos intervenga en nuestro país financiando grupos que dan golpes de estado, no podemos permitir que intervengan en nuestro país con espionaje militar, ni que participe activamente en el intento de derrocar a nuestras autoridades democráticamente electas”.

¿Una muestra de esa intervención es obstaculizar la compra de armas a otros países?
“Esa es una intervención directa que impide que nuestras fronteras se defiendan de los grupos irregulares, el narcotráfico y de los secuestradores. Estados Unidos acaba de mandar 6 mil soldados a la frontera con México. Nosotros tenemos 20 mil soldados en la frontera colombo-venezolana porque la situación es complicada, como todo el mundo lo conoce. Esos soldados necesitan suministros, fusiles, porque cuando van a luchar contra los narcotraficantes o los secuestradores no pueden ir con bombitas de agua. Esos soldados necesitan helicópteros para que les lleven los alimentos y los insumos que necesitan para estar en la frontera.

Para eso que Venezuela necesita el armamento que está comprando. Para salvaguardar su frontera. Pero Estados Unidos constantemente boicotea los intentos de Venezuela de ser un país soberano. Sea como sea, manteniendo como siempre lo hemos dicho, que queremos tener buenas relaciones con todos los países y también con Estados Unidos. No estamos dispuestos a que nos diga lo que tenemos que hacer, porque Venezuela es un país soberano que se declara libre e independiente”.

(*) El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas tiene la responsabilidad de mantener la paz y la seguridad internacional. Está integrado por cinco miembros permanentes: China, Francia, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos. A su vez, lo conforman 10 miembros no permanentes electos cada dos años. Los Estados que lo integran están obligados aceptar y cumplir las decisiones del Consejo. Los 10 miembros no permanentes por un período de dos años y no pueden ser reelegidos al término de su mandato.
(Fuente: Consejo de Seguridad de la ONU. www.un.org)

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