(Prensa Presidencial 22.06.07) En coherencia con los principios y valores socialistas que se enmarcan en el proyecto revolucionario bolivariano, el mandatario venezolano, durante el acto de juramentación de la Comisión Central de Planificación, propuso la reforma del artículo 112 de la Constitución Nacional, aprobada en referendo consultivo en el año 1999.

El Artículo 112, referente a los derechos económicos, dice: “Todas las personas pueden dedicarse libremente a la actividad económica de su preferencia, sin más limitaciones que las previstas en esta Constitución y las que establezcan las leyes, por razones de desarrollo humano, seguridad, sanidad, protección del ambiente u otras de interés social. El Estado promoverá la iniciativa privada, garantizando la creación y justa distribución de la riqueza, así como la producción de bienes y servicios que satisfagan las necesidades de la población, la libertad de trabajo, empresa, comercio, industria, sin perjuicio de su facultad para dictar medidas para planificar, racionalizar y regular la economía e impulsar el desarrollo integral del país”.

La propuesta presentada por el presidente Hugo Chávez, que será llevada a la Asamblea Nacional y luego para su aprobación al pueblo, plantea: “El Estado tiene la obligación de construir un modelo de economía socialista fundada en los valores humanísticos de la cooperación y la preponderancia de los intereses comunes sobre los individuos y teniendo como prioridad la satisfacción de las necesidades sociales. Todas las personas pueden dedicarse libremente a la actividad económica y social de su preferencia sin más limitaciones que las previstas en esta Constitución y las que establezcan las leyes en razón del desarrollo humano, la seguridad, sanidad, protección del ambiente, equidad y justicia social u otros de interés social. El Estado desarrollará distintas formas de empresas y unidades económicas de propiedad social tanto directa como indirecta, de producción social y de distribución social”.

Aclaró que la propuesta no está completamente desarrollada pero que se está trabajando en ella en el marco de los elementos que se incluyen en el Segundo Motor de la Ley Habilitante.

Esta reforma obedece, según el mandatario nacional, a varios puntos dentro de lo que se concibe en el campo de la Economía Política como las relaciones económicas de propiedad, de producción, de distribución y de consumo, las cuales deben transformarse. Ejemplificó que las relaciones de propiedad, una de las más importantes, deben cambiar “de capitalistas, monopolísticas, de explotación, de dominación, de exclusión de la mayoría; a unas relaciones de propiedad socialistas, justas, igualitarias y participativas”.

La transformación de estas relaciones se debe extender a los sistemas y procesos que se dan en cada una e ir mucho más allá, que es hacia la transformación de la superestructura y las estructuras económicas, políticas y sociales a través de un proceso dialéctico que incluye una praxis revolucionaria, donde se integre lo ideológico, lo económico y lo social, planteó el Presidente.

Argumentó que las estructuras económicas y por tanto sociales no deben separarse, porque eso puede generar un evento explosivo como El Caracazo, ocurrido en la ciudad capital en febrero de 1989.

Explicó que en esta propuesta participa el sector privado, pero que esto va a depender de su comportamiento. “La propiedad privada, productiva, en función de la satisfacción de las necesidades del país podrá convivir con este proyecto. Los cochinos no se los vamos a quitar. Queremos trabajar juntos”.

Recordó lo ocurrido durante el golpe de Estado en el 2002, donde se afectó enormemente lo social por causa del sabotaje económico y político. “La columna económica es una columna fundamental”.

Luego de hacer referencias importantes sobre los postulados de la Economía Política, el presidente Chávez ideó la necesidad de desarrollar una teoría económica para el caso venezolano por lo que dejó sentado que “el pensamiento económico venezolano del siglo XXI está por desarrollarse”.

A la Comisión Central de Planificación le encomendó trabajar en función de la transformación de las relaciones de producción, de propiedad, de distribución y de consumo y ordenar holísticamente el conjunto de planes, ideas y documentos que existen rumbo a un solo proyecto.