TeleSUR _ 16/07/07 - La policía y miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), protagonizaron este lunes severos enfrentamientos que dejaron a 15 agentes policiales heridos y 42 manifestantes detenidos.
Quince policías heridos y al menos 42 miembros de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO) detenidos, fue el saldo este lunes de una nueva manifestación luego que los maestros de la sureña entidad mexicana protagonizaran una marcha que pretendía llegar al auditorio del Cerro del Fortín donde estaba previsto un espectáculo de baile llamado La Guelaguetza popular.
El enfrentamiento ocurrió cuando la policía impidió que un contingente de la APPO llegara al auditorio del Cerro del Fortín, donde presentaría un tradicional espectáculo de baile llamado "La Guelaguetza" popular, en contraposicion con la fiesta que se realiza bajo el patrocinio del gobierno estatal de Ulises Ruiz.
Durante esta nueva jornada de enfrentamientos, 15 efectivos fueron heridos a pedradas y la policía detuvo al menos 47 manifestantes, sin embargo, no pudo impedir que durante la refriega fueran incendiados varios vehículos y la terraza de un hotel.
La trifulca se produjo luego de que los manifestantes intentaran burlar el cerco policial en torno al auditorio del Cerro del Fortín, con el propósito de adelantarse a la ceremonia oficial prevista entre el 23 y 30 de julio.
La Guelaguetza es un festejo que se realiza en Oaxaca desde 1938, en la que representantes de las dieciséis etnias del estado muestran parte de sus costumbres y tradiciones de cada una de las comunidades indígenas.
El secretario de Protección Ciudadana del estado, Sergio Segreste, ratificó que la trifulca dejó 15 policías heridos, 42 detenidos.
Agregó que los manifestantes quemaron seis autobuses de transporte público y un camión cisterna.
Por su parte, el portavoz de la APPO, Florentido López, aseguró que en el enfrentamiento hubo "cuarenta lesionados de su organización, y todos han sido atendidos por médicos particulares".
Explicó que las lesiones fueron consecuencia de los golpes con piedras o intoxicados por gases lacrimógenos, y también resultaron parcialmente incendiados un restaurante y parte de un hotel de cuatro estrellas.