Ante el anuncio de que el cupo de dólares para la compra a través de internet será renovado automáticamente el año que viene, me permito llamar la atención de las autoridades competentes sobre algunas innovaciones ideadas por los amigos de lo ajeno, a raíz de la puesta en práctica de este tipo de renovación este año.
Lo primero que cabe destacar y estoy segura lo pueden certificar en INDEPABIS es que inmediatamente después de la notificación de la disponibilidad del cupo se sucedieron infinitud de casos de uso indebido del mismo por parte supongo yo de quienes tenían conocimiento de esa disponibilidad. En mi caso particular, luego de 4 meses y una infinitud de viajes al banco, a INDEPABIS y a SUDEBAN, logré recuperarlo sin tener que llegar a mayores.
Que el cupo es pequeño es verdad, pero es mío. Que ese tipo de robo no tiene nada de novedoso, también es verdad. Lo que si representa una innovación de carácter científico y motiva este escrito es la matemática aplicada por distintos bancos a diferentes clientes. A titulo de ejemplo recurro a un estado de cuenta propio:
Certificados de Operaciones Cambiarias:
Internet
Autorizado Utilizado Disponible
400,00 271,81 44,73
Completamente desactualizada en esta nueva matemática financiera, me dirigí al banco para que me explicaran cuál era la fórmula de la resta que conducía a ese resultado. Quien me atendió no supo hacerlo y me remitió a CADIVI. Allí me informaron que según su sistema, diseñado con base de la matemática convencional, aún tengo disponible 128,19 dólares estadounidenses, lo cual transmití triunfante al banco. Sin embargo, mi satisfacción sólo duró hasta que volvieron, volvieron y volvieron a rechazar la tarjeta por no estar autorizada, sin que hasta el momento yo haya recibido ninguna explicación coherente al respecto por parte de la entidad emisora de mi tarjeta.
Repito, no soy el único caso. Vistos los constantes abusos de las entidades financieras contra los clientes, me permito sugerir a quien corresponda que se diseñe un mecanismo expedito para recibir las denuncias, sin recargar a INDEPABIS que ya bastante trabajo tiene, y otro para aplicar de una las correspondientes sanciones a las empresas.
mariadelav@gmail.com