APORREA, lo escribo con mayúscula, es lo máximo. En esta página se publica todo sin cortapisas. Es la primera vez que les escribo. Pero lo hago, a pesar de mi estado de salud, motivado por la acción que ha tomando el Presidente Nicolás Maduro en una cruzada contra la corrupción. Nadie puede dudar que se haya desatado, en todo el país, una gigantesca ola de corrupción. Eso no es nuevo. Pero el Presidente parece haber dado cuenta que ya es hora de ponerle una parado a este flagelo, y empezar a encarcelar a todo aquel funcionario que abuse de la confianza que han depositado en él y que esté robando, no sólo al Estado, sino a todos los venezolanos. Se debe ejemplarizar especialmente con los que se visten de rojo y se dicen chavista. Esos son capitalistas, ladrones, antichavistas y traidores. Por lo tanto se les debe aplicar todo el peso de la Ley sea quien sea.
Celebro que el Presidente Maduro nombrara a Eduardo Samán como jefe del INDEPABIS, organismo que se había convertido de la noche a la mañana en un nido de corruptos. Por cierto, llamo la atención de Eduardo Samán sobre lo que acontece en el Estado Bolívar. Por ejemplo, no debe quedar ninguna empresa pública o privada, grande o pequeña, sin ser fiscalizada. Sobre todo hay que caerle al Abasto Bicentenario de Altavista, en Puerto Ordaz. Algo raro está pasado allí. Todos los días de cada semana y de cada mes, se forman gigantescas colas fuera del establecimiento. Pregunté a alguien que pasaba con eso? Y me dijo que esa era la misma gente de todos los días que compraba para revender. Y me dijo allí debe haber un negocio grande para algún o algunos funcionarios. Eso no tiene otra explicación. Eso es público y notorio.
Señor Presidente Nicolás Maduro, es prioritario sanear de la corrupción a la Región Guayana, otrora región de alta motivación para el trabajo, para la creación de divisas y para la generación de riqueza para el Estado y los trabajadores.
Soy de quienes piensan que la Corporación Venezolana de Guayana, y las empresas básicas puede ser rescatada y puesto al servicio del proyecto que inició el Comandante Eterno Hugo Chávez. El General Carlos Osorio tiene la gran oportunidad de su vida de hacer de la CVG el organismo dinamizador de la economía regional. Pero tiene que enfrentar, en primer lugar, a ciertas mafias que están enquistadas en casi todas las empresas básicas. Desmontar esas mafias no será fácil, pero alguien tiene que dar el primer paso. Y la comunidad guayanesa espera que ocurra el milagro.
Presidente Nicolás Maduro, Eduardo Samán y Carlos Osorio: duro, durísimo con la corrupción, sin importar que sean peces gordos o no. La cárcel espera…
*Comunicador Social. Egresado de la UCV Año 1982.
Ex Gerente de Información de la Corporación Venezolana de Guayana.
Militar retirado de la Armada. Ex preso político de la década de los sesenta por participar en El Porteñazo (1962). Tres meses en el Cuartel Carabobo. Un año en el Cuartel San Carlos y cuatro años en la Isla del Burro.
Actualmente jubilado de la CVG.
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