Respaldo plenamente la campaña contra la corrupción iniciada por el presidente Maduro.
La disputa por la renta petrolera ha determinado los conflictos políticos en Venezuela y fue factor clave en la geopolítica del presidente Chávez y de la conducta del liderazgo opositor.
Del golpe de Estado de abril de 2002, el paro petrolero y la desestabilización permanente. Cuando el presidente Chávez, en nombre del Estado, asumió el control de Pdvsa y expulsó a la gerencia transnacional que la gobernaba, el capital radicalizó la tarea de revertir este proceso y fortaleció la penetración de la revolución y la corrupción como relación económica que garantiza transferencia de renta petrolera hacia los monopolios privados, se alía con las redes delictivas del narcoparamilitarismo y fortalece un patrón de consumo que nos somete cada vez más al mercado mundial y alimenta la fuga de divisas. La corrupción es también un problema geopolítico.
Hay que simplificar los trámites administrativos, derrotar el poder de la burocracia sobre el pueblo y reivindicar el Art. 5 de la Constitución nacional, que dice: "La soberanía reside intransferiblemente en el pueblo" y "Los órganos del Estado emanan de la soberanía popular y a ella están sometidos". El pueblo no delega poder en los funcionarios. Esa era la democracia representativa cuartorrepublicana.
Ellos son servidores públicos en la medida en que reciben un mandato y cumplen con él. Por tanto, es necesario desarrollar los procesos de control y rendición de cuentas. Especialmente, avanzar en la contraloría social, lo que significa avanzar hacia el Estado comunal, como lo plantea el presidente Chávez en "Golpe de Timón".
Sobre esa base política, más ordenamiento institucional, transparencia, y un poder sancionador que haga más costosa la violación de la norma, que los beneficios que se obtendrían violándola, es posible garantizar el crecimiento de una fuerza moral capaz de crear servidores públicos cumplidores de las normas éticas y acorralar al poder transnacional, que corrompiendo el proceso bolivariano aspira a recuperar el control de la renta petrolera y destruirnos como nación soberana.
Adelante, presidente Maduro. Los corruptos, estén donde estén, son aliados del capital transnacional y enemigos del pueblo. Ud. cuenta con él.