Es realmente impresionante percatarse de la cantidad de denuncias, quejas, expresiones, escritos, pero sobre todo, comentarios constantes de la gente de la calle en todas partes y en todos los sectores, acerca del tremendo problema que tenemos en estos momentos en Venezuela, desde hace ya prácticamente un año, con la angustia más presente y palpitante del pueblo en general: la escasez de productos FUNDAMENTALES de la cesta BÁSICA, la escasez de productos no tan básicos, pero necesarios en general para la vida y la cotidianidad, la especulación, el encarecimiento de prácticamente todo, incluyendo los productos básicos y que se supone deberían estar regulados, pero vaya usté' a saber; y la queja perenne que uno escucha cuando va a comprar cualquier cosa por parte de comerciantes y expendedores, en el momento de presentar un precio otra vez insólito, o cuando no hay del fulano producto: “es que los proveedores no tienen mercancía, los vendedores y distribuidores están sin existencias o en espera, no tienen acceso al dólar legal, tienen que comprar al precio de dólar de la calle, las aduanas están trancadas, CADIVI o el SITME no han terminado de liquidar”, y pare de contar...
Sean estas excusas banales, falsas, u oportunistas -que nunca faltan, estamos claros- o realidades del tamaño del Sol, uno se pregunta: ¿y dónde está el gobierno?.
La cantidad de relatos, artículos, análisis, denuncias sobre todos estos asuntos es, repito, impresionante, por lo constante y abundante. Por ejemplo, hoy en Aporrea leí este par de escritos:
“Renuncio al PSUV Bolívar para no ser cómplice de corruptos”
http://www.aporrea.org/
“Papel tualé, ¿eficiencia o nada?”
http://www.aporrea.org/
Ciertamente, como muchos relatan, estamos plagados de hamponatos de pequeño, medio o alto nivel, que se encargan de revender en el comercio informal, sacar por las fronteras hacia Colombia, meter a grupos familiares o de vecinos a comprar varias veces en varias colas, acaparar, remarcar, especular, evadir las disposiciones gubernamentales, gestores que te “habilitan” todo más rápido aquí o allá para conseguir tal cosa, o “agilizarte” trámites; Guardias Nacionales u otros organismos de seguridad, que cobran por proteger, dejar hacer, dejar pasar, traspasar fronteras; funcionarios de contraloría o defensa al consumidor, etc. que cobran cifras bien gruesas para asegurar a quienes les pagan acceso a divisas, permisos, papeles, registros, certificados, comprobantes, exención o retención de impuestos, y toda la maraña de gestiones burocráticas que alientan y multiplican la corrupción en todas sus formas, como dice Luis Britto García: “inventa trámites y crearás corrupción”, y un largo pare de contar. Esto es cuento de todos los días y todas las horas. Total, las mafias nos tienen rodeados y reventados.
Mafias por todas partes y para todo. Mafias, roscas, movidas, matraqueadores, los que 'la mueven', conectados, enchufados, gestores, habilitadores, resolvedores de toda laya y toda calaña, pillos, bandidos y sinvergüenzas de todos los colores y todos los tamaños. Mafias en las cadenas de alimentos, mafias en las farmacias, mafias en las distribuidoras farmacéuticas, mafias en los transportistas, mafias en las aduanas, mafias en el SENIAT, mafias en CADIVI, mafias en el SITME, mafias en INDEPABIS, mafias en los bancos, mafias en el mercado negro del dólar, mafias en las distribuidoras, mafias en los tribunales, mafias en las cárceles, mafias en las registradoras, mafias en los ministerios, mafias en las alcaldías, mafias en las gobernaciones, mafias en Fedecámaras (o toda ella una mafia), mafias en CONSECOMERCIO (o toda ella una mafia), mafias en los sindicatos, mafias en la prensa, mafias en la radio, mafias en la televisión, mafias internacionales, mafias en las policías, mafias en el CICPC, mafias en la Guardia Nacional, mafias en las Fuerzas Armadas, mafias en los partidos políticos, mafias en las ONG's, mafias en las empresas, o mafias en las asociaciones de empresas, mafias en los intermediarios, mafias en los consejos comunales, mafias en las asignaciones de vivienda, seguro social, pensiones, mi casa bien equipada, etc.; mafias en las aseguradoras, mafias en las iglesias, mafias por todas partes, ¡Dios mío!, mafias, mafias y más mafias...
Por supuesto, cuando uno ve esta telaraña de mafias, roscas y matracas, viene a mente la típica frase: “bueno, eso siempre ha sido así en Venezuela”, “eso no es nada nuevo”, y es cierto, toda la vida eso ha sido así en este país. Está bien. Cierto. Nada de eso se puede desaparecer como por arte de magia, ni existe quizá el Mandrake para hacerlo.
Pero hay un gran problema, sobre todo en el contexto de un gobierno que enarbola como grandes lemas frases como: “Misión Eficiencia o Nada”. “Lucha frontal contra la corrupción”. “mano de hierro contra los corruptos y saboteadores”. Etc. El problema es que se esa mano de hierro no se ve por ninguna parte, o al menos, lo que se ha visto, es como que muy tímido, muy poco, muy poca cosa. Parece más bien una mano de seda... O de plastilina.
Lo digo de nuevo como lo he afirmado en otros artículos: ESTE GOBIERNO SE ESTÁ VIENDO CADA VEZ MÁS COMO UN GOBIERNO PENDEJO. Un gobierno pendejo, mano blanda, dormido en los laureles, ineficiente y que se deja joder y arrinconar por las mafias que supuestamente ya tiene más que identificadas.
Está bien, no se puede acabar de un plumazo con todas ellas, pero ¡por favor!, ¿hay que ser graduado en Harvard, o con PHD's en Cambridge o Tucusiapón para saber ponerle un parao fuerte, notorio, grande, visible y por al amor de Dios, definitivo, DE UNA VEZ POR TODAS, a lo más puntual de nuestros problemas?: QUE LA GENTE PUEDA CONSEGUIR TRANQUILAMENTE, SIN ANGUSTIAS, SIN MATRACAS, SIN COLAS DE 4 O MÁS HORAS, SIN NUMERITOS O MARCAS EN EL BRAZO, SIN MALTRATOS DE GUARDIAS NACIONALES O AGENTES DE SEGURIDAD, SIN QUE LE COBREN EL TRIPLE O EL CUÁDRUPLE PARA CONSEGUIR PAPEL TUALÉ, HARINA DE MAÍZ PRECOCIDA, LECHE, HARINA DE TRIGO, AZÚCAR, ACEITE, POLLO, CARNE, O LO QUE SEA... Productos básicos, caramba; BÁ-SI-COS, no asuntos secundarios o lujos. Y es que lo secundario, pero que también es necesario, tendría que conseguirse también de esta forma.
Sabemos que esto no es nada fácil, es verdad. Sabemos que muchas veces estas mafias, actúan de verdad-verdad como auténticas mafias y utilizan diversos métodos coercitivos, retaliaciones, presiones, chantajes, e incluso, amenazas a la seguridad y la vida de personas, ya sean funcionarios, comerciantes, o el usuario o consumidor común o corriente. Así que muchos tienen que conformarse con el ya clásico en nuestro país: “bueno, cómo se hace...”, o el más famoso “que máj vamo jasé... éjto ej lo que hay...” epítome de la conformidad y la impotenca ante lo cual nada puede hacerse.
¿Pero entonces? ¿El Gobierno está indefenso, inerme, impotente, derrotado, arrinconado, apabullado, o apendejeado ante estas mafias? Ésa es la impresión, queridos integrantes honestos del Gobierno y del Estado. Y me quedo corto, puesto que por parte de quienes realmente sí adversan, odian y desprecian profundamente este Proceso de Cambios, la respuesta simple y llanamente es: “ES QUE EL GOBIERNO ES EL PROPIO MAFIOSO, DUEÑO DE MAFIAS, INTEGRADO POR MAFIAS, O AL MENOS ABSOLUTAMENTE INEFICIENTE ANTE SUS MAFIAS.”
Bueno, que la oposición piense eso es totalmente normal. El problema es que ya esto empieza a pensarlo la gente común y corriente que se tiene que calar horas y horas bajo el sol haciendo colas, para no conseguir lo que busca o terminar asaltado en los bolsillos, pagando el doble, el triple o más de lo debido. E incluso, los propios simpatizante o partidarios del Proceso Bolivariano empiezan a pesarlo también.
Y el Gobierno se percibe como aletargado, que no se percata, inactivo, ineficiente, o que agarran a dos pendejos corruptos aquí y allá, pero como que se conforma con eso y no da el golpe de gracia a quien debería dárselo: al núcleo de las mafias especuladoras, hambreadoras, acaparadoras y tracaleras que a toda vela han seguido avanzando por estos lares sin que parezca que nadie pueda pararles el trote.
¡Que alguien diga algo en el Gobierno y sus diversas instancias! Respondan:
¿Es que acaso están perdiendo la famosa GUERRA ECONÓMICA que desde hace un año vienen librando contra el Proceso Revolucionario y contra el pueblo, los mafiosos, rosqueros y tracaleros que nos han tenido contra las cuerdas...?
No queremos pensar que sí. Pero muchos piensan que sí.
De nuevo, otra vez, reiteramos: ¡A PONERSE LAS PILAS, PERO DE VERDAD, ATÓMICAS, Y A DAR MUESTRAS FEHACIENTES Y CONTUNDENTES DE ELLO!
Que esto se note, que se vea, que se sienta, que es la primera prioridad desde el Presidente de la República pa'bajo. ¡Sientan el clamor del pueblo y dénse por aludidos, redoblen, tripliquen los esfuerzos.
Hay todo un pueblo esperando para apoyarles...
valross69@hotmail.com