Del amor del dinero procede el trabajo en buscarlo y el perpetuo temor de perderlo, que como verdugo cruel hace carnicería del alma.
Fray Luís de León.
Tiempo sin escribir en el Blog, al no estar cerca de ustedes el opinar se me hace difícil... pero en estas lejanías, no me ha dejado de causar asombro lo de los precios de los electrodomésticos en mi bella Venezuela, y mi mente comenzó a divagar…
Voy a suponer que soy un comerciante en electrodomésticos y que tengo unos CUATRO MILLONES de los mentados bolívares “fuertes” y quiero comprar dólares a CADIVI, para traer 2.500 televisores que valen unos 250$ en precio de lista, el vendedor otorga un 50% de descuento por compras por cantidad.
Pero como yo soy un vivían comerciante venezolano, le digo al fabricante que me pase la “Factura Proforma” al precio de lista y que me facture después a ese precio; el fabricante, que lo que le interesa es vender, acepta naturalmente…
Por lo tanto presento a CADIVI la factura proforma de “Chinito TV Co.” por US $ 625.000, y CADIVI me otorga los morlacos (a 6,30 BsF c/u) le doy al fabricante el precio real de la compra (312.500 US$), eso sí, le recuerdo que me los facture al precio de lista.
Los otros 312.500 los negocio en el mercado paralelo a 55 BsF por US$; de ellos, obtengo para comenzar, la bicoca de 17.187.500 BsF (o sea más de cuatro veces mi inversión original)…
Pero… ahora viene lo bueno… tengo los 2.500 televisores aún y hago la siguiente cuenta:
Precio lista 250 US$ x 55 = Precio de venta 13.750 BsF
Eso significa mis estimados lectores que a los televisores les saco la bicoca de: 34.375.000 BsF los cuales sumados a los 17.187.500 BsF de la venta de los morlacos hacen un total de 51.562.500 BsF.
Eso significa que los 4.000.000 de BsF que tenía originalmente se multiplicaron por 12,9…
¿Verdad que soy un tronco de comerciante?...
Nos vemos en las teclas…
JotaDobleVe…
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