En diversos espacios nacionales, relacionados con esta dinámica de transformación revolucionaria y de profunda inclusión social y étnica liderizada por el Presidente Hugo Chávez Frías y ahora bajo la conducción de un equipo dirigido por el Presidente Nicolás Maduro, donde nos han invitado a participar con nuestras visiones y apreciaciones políticas, desde hace varios años hemos insistido en sugerir lo pertinente e indispensable de reunir y organizar en todo el país, diversos equipos de trabajo integrados por hombres y mujeres formados en distintas disciplinas y/o con experiencias políticas en los temas nacionales e internacionales. Cualquier proceso político de transformación de la Sociedad, el Estado y el Gobierno que implique desplazar a las élites internas y externas conformadas alrededor del Poder Público y sus privilegios durante muchas décadas, tiene la obligación ética y épica de prepararse para defender y consolidar los cambios que definen su condición transformadora. En consecuencia requiere contar con múltiples equipos de analistas, que desde diversas perspectivas de acompañamiento crítico, provean regularmente al Presidente, su equipo de gobierno y la dirección política de insumos o materiales relacionados con la situación nacional y los escenarios internacionales (países, regiones, bloques, alianzas) en los cuales interactúa de forma directa o indirecta Venezuela y su Estado.
Es importante tener presente que el nuevo gobierno y su liderazgo debe enfrentar el sólido establecimiento de la cultura dominante, la cual se sustenta y alimenta de los valores, símbolos, rituales religiosos, juicios y prejuicios, referencias estéticas, sustentos éticos, normas morales y demás elementos constitutivos de la cultura como construcción tangible e intangible de los humanos. En ese rico, diverso y sólido andamiaje cognoscitivo que acompaña a los seres humanos de cada sociedad y sus etnias, confluyen como fuerza mayoritaria los aportes impuestos por las culturas que han logrado establecer su dominación, acompañada en minoritaria y diversificada presencia, por los aportes de los grupos sometidos a la dominación, así como de aquellas que se incorporaron posteriormente con los inmigrantes. Es decir que los valores predominantes de las culturas esclavistas, feudales, racistas, torturadoras, genocidas, contrabandistas, mercantilistas e imperialistas que prevalecían en los territorios de la actual Europa durante los siglos XV y XVI , enriquecidos en su expansión y crecimiento imperial con las prácticas del capitalismo y el liberalismo, aumentadas con la presencia de una potencia industrial y militar como los Estados Unidos de Norteamérica, constituyen los referentes valorativos y culturales prevalecientes en nuestra sociedad.
Para los encargados de consolidar y defender todos esos valores y componentes culturales de lo dominante y establecido, resulta una tarea más fácil porque se trata de trabajar con los referentes conocidos, validados, ejercidos y asumidos por las mayorías como lo adecuado, apropiado e identificador de su pasado, presente y futuro. De allí que esas actividades de construcción y reproducción de ideas y referentes simbólicos a favor de la explotación humana y la alienación gozosa ante la dominación imperialista desplegadas durante los 1.440 minutos de cada día, desde los más diversos centros académicos y corporativos de elaboración ideológica, tienen la ventaja de avanzar por múltiples medios de información y comunicación mundiales y globalizados, impulsados por las más variadas construcciones de la incertidumbre, la confusión, el miedo, el terror, el rechazo y el odio a las nuevas expresiones sociales, étnicas, discursivas y particularmente al ascenso socio-económico-educativo de numerosos sectores sociales y étnicos hasta ahora excluidos del aprovechamiento de la Renta derivada mayoritariamente del Petróleo. Esta situación nos ayuda a comprender las respuestas muy agresivas y violentas promovidas por los grupos sociales, corporativos, políticos, familiares e individuales que han sido desplazados de los espacios fundamentales del Poder Público, conformando una respuesta de reacción (reaccionaria) ante el nuevo escenario de poder que pretende establecerse y consolidarse para el largo plazo.
A este comportamiento reaccionario de los sectores nacionales desplazados del control de los espacios privilegiados del Poder Público y el consecuente manejo discrecional de los ingresos derivados de la Renta Petrolera, se unen los propietarios y altos ejecutivos de diversas empresas transnacionales que operan en Venezuela, las cuales han visto disminuidos los montos de sus ganancias y apropiación de la Renta, y particularmente se ven excluidos de su inmensa influencia anterior en el diseño y aplicación de políticas públicas económicas, financieras, monetarias, tributarias, laborales, mineras, ambientales, educativas y en otras áreas cuya responsabilidad le corresponde constitucionalmente al Estado Venezolano. La reducción de su anterior influencia sobre el Poder Público Nacional, así como la disminución de sus inmensas ganancias, constituyen uno de los aspectos fundamentales que motiva su participación en las más variadas iniciativas abiertas y particularmente encubiertas para desestabilizar y desplazar al Gobierno Bolivariano. Sobre estos comportamientos y la actual situación de escasez de alimentos, medicamentos, artículos de uso doméstico, repuestos para vehículos y otros productos, es interesante investigar la triangulación de las mismas empresas ubicadas en varios países (EEUU- Europa- América Latina y el Caribe y finalmente Venezuela), a través de las cuales se compran los insumos y productos importados con dólares preferenciales o subsidiados (Bs. 4.30 hasta 2013 y luego Bs. 6,30 - Bs. 12,0 – Bs. 50,0) con manipulación especulativa de precios y adquisición de cantidades de productos finalmente inferiores a lo aprobado por los organismos públicos como los anteriores SITME - BCV, CADIVI y el actual CENCOEX. Para hacer posible estas manipulaciones, especulaciones cambiarias, engaños y estafas al Estado y al pueblo venezolano, es indispensable la presencia de importantes Redes de Corrupción que trabajan desde lo público en alianza mafiosa con los privados o particulares, aportando los primeros todo el apoyo de tramitación, supervisión, certificación y garantía en las entregas de divisas para hacer posible la realización de las operaciones de apropiación irregular de una buena parte de la Renta derivada del Petróleo (en divisas), generando escasez de productos y estableciendo precios que se corresponden con el valor artificial del dólar paralelo y no con la divisa subsidiada que le aprueban a través del organismo público encargado de asignar las divisas subsidiadas o preferenciales, cuyos valores en bolívares ya hemos señalado anteriormente.
A esta práctica dolosa y perturbadora de la actividad económica diaria desarrollada contra la mayoría de venezolanas y venezolanos, se unen diversos empresarios nacionales propietarios de grandes y medianas empresas dedicadas a la importación, empaquetado, distribución y venta de productos e insumos. Durante los años 2013, 2014 y ahora cuando comienza este nuevo año 2015, hemos sentido las desagradables y perturbadoras consecuencias de estas acciones desestabilizadoras que obligan a las venezolanas y venezolanos a dedicar una parte importante de su tiempo a ubicar auto-mercados, abastos, bodegas, farmacias y tiendas de productos para el mantenimiento personal y del hogar donde estén vendiendo los productos que escasean, para luego pasar varias horas en largas colas que permitan finalmente adquirir algunos de los artículos. La intención es manejar las emociones personales, familiares y de grupos para crear una alteración psicológica que permita cultivar y desarrollar los programas de manipulación de masas hacia escenarios de irritación, desconcierto, rabia para finalmente intentar promover situaciones de violencia individual y colectiva. Estos programas de manipulación y alteración de emociones de grandes grupos humanos se fundamentan en las experiencias desestabilizadoras probadas y aplicadas a otros pueblos durante el siglo XX y XXI, así como de experimentos ejecutados sobre seres humanos en institutos de investigación como el de Tavistock (Sussex, Inglaterra), centros y cárceles secretas manejadas por los organismos gubernamentales de los EEUU y otras conocidas como Guantánamo, donde someten a los detenidos y secuestrados a las más crueles torturas experimentales.
Los gobiernos y estados como Estados Unidos y algunos de sus socios europeos agrupados en la OTAN, quienes actúan desde una perspectiva imperialista y agresiva con respecto a cualquier espacio/país donde se intenta construir un modelo socio -económico soberano, al margen de los alineamientos geopolíticos y de orientación gubernamental tutoreados por ellos, como es el caso de Venezuela, siempre organizarán acciones para desestabilizar, distraer los esfuerzos de gobierno, financiar y entrenar a los grupos políticos que adversan estos proyectos soberanistas. Igualmente alinearán de manera coordinada y globalizada los diversos instrumentos de comunicación, información, distracción, diversión y manipulación ubicados bajo su área de dominio. Allí encajan las actuaciones de intelectuales de distintos orígenes nacionales que participan en foros, conferencias, congresos y en apariciones públicas regulares, atacando la orientación y resultados del proceso político bolivariano y además reivindicando el modelo del capitalismo neoliberal anglosajón como paradigma de su aspiración mayor "del fin de la historia". Igualmente los artistas y anclas comunicacionales que participan en actos televisados globalmente de entregas de premios, festivales de música, cine y televisión, quienes reciben el guión obligatorio de atacar al gobierno que la mayoría de habitantes de Venezuela hemos elegido democráticamente para que ejerza su mandato constitucional.
No podían faltar en estas agresiones los políticos y particularmente los ex – gobernantes afiliados a las corrientes más reaccionarias y anti – populares, quienes además durante sus gestiones presidenciales se caracterizaron por reprimir brutalmente a las mayorías de sus pueblos, aplicando las prácticas de las desapariciones, torturas, asesinatos y persecuciones. Algunos de ellos, como el ex – presidente Sebastián Piñera de Chile, acumularon su capital político y económico a la sombra protectora de una oprobiosa, asesina y vergonzosa dictadura militar como la de Augusto Pinochet. El mismo gobierno que asesinó miles de obreros, profesionales, estudiantes, militantes políticos, campesinos y funcionarios públicos. El mismo que se esmeró en aplicar las prácticas de las torturas aprendidas en las escuelas militares de los EEUU, obligando a miles de chilenos y chilenas a huir de su país y buscar refugio, protección y afecto en los más diversos países del mundo, entre ellos Venezuela. Otros, como el colombiano Andrés Pastrana tienen el mérito de haberse aliado con sectores del narco – paramilitarismo y el imperialismo norteamericano para sostener su poder y además, apoyados en estos grupos mafiosos y criminales, ser responsables de las prácticas de la persecución, tortura, encarcelamiento y asesinato de grandes sectores de la población colombiana, así como el desplazamiento forzado de cientos de miles de colombianos desde sus espacios vitales hacia otros territorios y particularmente hacia Venezuela, donde consiguieron apoyo para tratar de reconstruir sus vidas alejados del terror narco – paramilitar y de Estado que los perseguía para aniquilarlos y despojarlos de sus bienes. Finalmente no podía faltar el ex – presidente mexicano Felipe Calderón que junto a su antecesor y compañero del partido PAN (Vicente Fox), son reconocidos por la más amplia literatura mexicana como los protectores del Cartel de Sinaloa (también conocido como el Cartel del PAN), el más poderoso de los 88 grupos criminales organizados que actualmente ayudan a mantener bajo la violencia, el miedo y el terror a la mayoría de los habitantes de México.
Durante la presidencia de Felipe Calderón aumentaron los grupos criminales y la extensión de su dominio por todos los estados del país y el Distrito Federal. Entre ellos el agresivo y violento Cartel de los Zetas, conformado y dirigido por oficiales del ejército y la policía federal que este mandatario envió a los EEUU para que los entrenaran y adiestrarán para luchar contra los carteles de narcotraficantes. Al regresar a México se dedicaron a conformar un nuevo grupo criminal capacitado en tácticas y estrategias de combate y en el manejo de armas de guerra. En este país latinoamericano, Abigael El Chapo Guzmán estuvo libre y dirigiendo su banda de criminales y narcotraficantes desde que salió fugado atravesando numerosas puertas de una cárcel de "máxima seguridad", cuando el Presidente Vicente Fox cumplía 50 días en el gobierno y se mantuvo libre durante los dos gobiernos de la ultraderecha Panista encabezados por Fox y Felipe Calderón. Sólo fue capturado cuando los organismos policiales y de inteligencia de los EEUU, bajo el actual gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto (PRI), asumieron que este jefe mafioso ya no tendría protección presidencial y debían retirarle el apoyo que hasta ese momento le permitió actuar y acumular una fortuna para el Cartel de Sinaloa de más de 20.000 millones de dólares invertidos en México y diversos países del mundo. En Colombia y México es noticia pública de rutina, desde hace varias décadas hasta la actualidad, que dirigentes políticos de los principales partidos relacionados con las derechas que han gobernado allí, altos mandos militares y policiales, así como diversos funcionarios públicos aparecen abiertamente relacionados y asociados con alguna de las violentas bandas criminales o carteles que mantienen aterrorizada y sometida a la mayoría de los habitantes de estos países hermanos.
Ante las "nuevas circunstancias de dificultades" económicas derivadas de una importante baja en los precios del petróleo, arremetida coordinada de los grupos económicos privados nacionales e internacionales, intento de grupos políticos de la ultraderecha venezolana por iniciar otro proceso de violencia y asesinatos para intentar propiciar un escenario de confrontación interna que facilite una intervención de EEUU y sus socios de la OTAN. Así como la participación abierta y agresiva del gobierno y estado norteamericano contra la mayoría de venezolanas y venezolanos que nos dimos soberanamente nuestro gobierno. Es indispensable y pertinente corregir a fondo fallas, ineficiencias y presencia de comportamientos corrosivos de corrupción en diversas instituciones públicas, las cuales propician y en algunos casos funcionan asociadas a las intenciones desestabilizadoras de los grupos señalados.
Se trata de sumar, sumar y sumar permanentemente la mayor cantidad de apoyos para este inclusivo, complejo y asediado proceso de transformación referencial globalizado. Es el momento de potenciar y practicar sin miedo una ética bolivariana y revolucionaria inspirada en los ejemplos de la acción política y gubernamental de referentes como Hugo Chávez Frías, José Pepe Mújica y Evo Morales, entre otros liderazgos cargados de ejemplos de esfuerzos, capacidad combativa, audacia, profunda humildad, compromiso irrevocable con las mayoría populares creatividad dialéctica, fuerza ética frente a la tentación del poder y la riqueza y éxito en el ejercicio del gobierno.
Caracas, 28 de enero de 2015.
Germán Yépez Colmenares
Historiador – Profesor de la UCV
germilio.yeco@gmail.com