Tenemos que hablar sin eufemismos. Que “Dólar Today” mantenga desde su página electrónica (inútil que sea bloqueada porque hay acceso a través de Facebook) una tasa sobrevaluada del bolívar con respecto a la moneda extranjera, tampoco es menos cierto que el gobierno nacional con su errada política cambiaria y su hermetismo sobre la conducción económica ha llevado a esta hecatombe social que en cualquier momento va a terminar liquidando la existencia completa de un país.
Recordemos que el gobierno desde finales de 2014 venía “anunciando” un nuevo esquema cambiario que terminó realizándolo en febrero de 2015. Ello originó un disparo de la inflación en promedio entre el último trimestre de ese 2014 y lo que va de 2015 (aunque el Banco Central de Venezuela -BCV- no lo haya anunciado) entre un 4 y 5% mensual; verbigracia, el llamado “aumento” de 15% del salario mínimo, decretado en inicios del año, hace tiempo quedo pulverizado no sólo por “Dólar Today” sino por “líderes” que no aceptan hablarle al país sobre la inmensidad de la crisis y el déficit de divisas que confrontamos para cubrir las importaciones que requiere Venezuela; máxime cuando un gobierno que se autodenomina “socialista”, prefiere pagarle a los capitalistas de Wall Street, que emplear sus divisas en las necesidades de un pueblo.
Si lo anterior ya es grave. Los precios de los alimentos han llegado a precios muy elevados para la mayoría de los venezolanos (me incluyo con un sueldo de docente que apenas supera los seis mil bolívares). Es mentira eso de encontrar productos con precios regulados, salvo por Mercado de Alimentos (Mercal) y eso no está en todas partes, ni a la vuelta de la esquina, sin obviar las horas bajo el sol o la lluvia que debe hacerse para adquirir comida en esa red pública estatal. La carne, el pollo y el pescado promedian un 10% por kilogramo del salario mínimo vigente. En el mismo orden el jamón y el queso. ¿Cuánto valen el tomate, la cebolla, las verduras y hortalizas en general? ¿Se puede lograr una alimentación balanceada durante un mes con los actuales ingresos que perciben los trabajadores asalariados? Que me disculpe el presidente Maduro, sus ministros y el presidente del BCV, pero eso es imposible. Tampoco, podemos omitir la escasez que cada día se acentúa en rubros básicos, lo cual tiene como contraparte que las mafias paralelas sigan fortaleciendo sus redes sobre los pocos productos que van llegando a los anaqueles; en otras palabras, la especulación voraz abre sus sauces sobre un pueblo indignado y cada vez más empobrecido.
Además, un par de zapatos, un pantalón, una camisa cuestan miles de bolívares. ¿Cómo hace un(a) venezolano(a) para mantener una familia con dos o tres hijos y cuyos ingresos tan menguados pueda acceder a esas cosas básicas? Hay que rogar a Dios que no se te dañe una nevera, cocina o lavadora ¿Cómo comprar semejantes bienes básicos para una familia? ¿Qué hace un importador o industrial? ¿Cierra su negocio o vende a precios astronómicos (Dólar Today) al no poder obtener las divisas a valor preferencial o aumenta los precios, ahora “legalizados” por Merentes con el llamado Sistema “Marginal” de Divisas” (Simadi), el cual tampoco es precisamente para quienes constituyen la macroeconomía sino para el llamado “menudeo”?
El país con las mayores reservas probadas de petróleo en el mundo no merece esta suerte. Conforme “Dólar Today” juega con un dólar sobrevaluado. El gobierno hace demagogia con una tasa subvaluada de Bs, 6,30 por dólar para decir que tenemos el salario “más alto” de América Latina. ¡No podemos!
El gobierno tiene alternativas de financiamiento. Por ejemplo, establecer una política de concesiones para la red ferroviaria y vial. Reconstituir el modelo agro-productivo. Generar apertura en el mercado gasífero. Permitir la instalación de cadenas hoteleras y de turismo. Todo ello, bajo una norma jurídica de respeto al inversionista conforme con el marco de la Ley Habilitante llamada “contra-imperialista” se pudiera comenzar a revertir esta debacle económica.
Por lo pronto, no sólo “Dólar Today” pulveriza la economía del país, sino que gracias a Merentes como operador cambiario y financiero del país ha permitido que los venezolanos nos encontremos en las puertas de traspasar nuevamente el umbral de la pobreza. A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.