El bombero sea hombre o mujer es uno de esos pocos servidores públicos que hace su oficio sin esperar nada a cambio, sobre todo si pertenece a la tropa de ese cuerpo.
Actitud solidaria que practica a favor de sus semejantes que lo hace acreedor al prestigio que goza en la sociedad.
El bombero por lo general procede de las muchísimas familias cultas y decentes que viven en nuestras barriadas populares tanto de la capital como del interior del país. El hombre o la mujer que se alista en el cuerpo de bomberos, lo hace por vocación y convicción, característica que lo distingue a lo largo de su carrera, lo que constituye la razón para que la mayoría de ellos o ellas, hagan de la profesión de bombero la carrera de su vida.
Determinación que los lleva a mejorar sus conocimientos profesionales con la finalidad de ser un servidor integral, tanto es así que muchos de ellas y ellos manejan disciplinas profesionales de diversas índoles, que le ayudan a fortalecer sus posibilidades de ascensos dentro del componente directivo.
En este aspecto vale la pena destacar lo que está pasando en el cuerpo de bomberos de Caracas, donde por informaciones que manejo, se está dando una situación contraria a la histórica conducta que tiempo atrás predomino en los niveles jerárquico de esa institución.
Se trata que de cierto tiempo para acá en la línea de mando de ese cuerpo se ha entronizado una cúpula, que por intereses personales, rompió el vinculo con la gerencia media y con la tropa, ocasionando serio trastorno en la relación tradicional que por muchos años constituyo la regla de oro entre el personal para mantener la armonía, la moral y la disciplina.
Este comportamiento de la cúpula bomberil, ha interrumpido una de las reglas más importantes que se aplicaba en la cadena de mando de esa institución, la que permitía que la oficialidad media, tuviera garantizada el ascenso a posiciones superiores en la medida que la superioridad haciendo justicia y honor a su honestidad respetaba el derecho a ocupar las posiciones de mando que por las circunstancias que fueran quedaran vacantes. Legítima aspiración de una oficialidad, que se ha preparado profesionalmente, disciplinada y con los meritos acumulados producto de su ininterrumpida labor cumplida a favor de la comunidad.
Desmejoramiento de las reglas del juego por parte de esa cúpula que está causando profundo malestar en la oficialidad media y desmoralización en la tropa, como consecuencia de la injusticia que se está cometiendo con sus voceros más cercanos.
La tropa siente que su institución ha sido fracturada, intencionalmente, con el ánimo que reine la anarquía y sea quien marque la pauta, para que de esta manera, no haya quien impida la manipulación que se está haciendo con los ascensos, para evitar que lleguen a cargos jerárquicos oficiales que no son de su entorno.
Mientras esa cúpula mantiene el aislamiento y el contacto con la tropa, no habrá instancia de comunicación que conozca de su problemática social y menos de los presuntos hechos de corrupción que circulan por los pasillos de esa institución.
A esto se agrega el desinterés en atender el deterioro que está sufriendo el parque de unidades bomberiles, ambulancias y equipos contra incendio y de protección del personal de tropa.
Siempre he sostenido que aquí nada es casual, tengo la sospecha que la descomposición interna del cuerpo de
Bomberos de Caracas es parte del proceso de desmoralización de las instituciones del Estado promovida por la derecha, con la complicidad de individuos que llegaron a puestos de mando solapadamente haciéndose pasar por chavistas, posiciones que han utilizados para destruir las instituciones desde adentro, aplicando la política del caballo de Troya.
De tal manera que pudiéramos concluir en la apreciación que tiene un sector importante de la oficialidad y de la tropa de los bomberos de Caracas, que se identifican con el gobierno del Presidente NICOLAS MADURO y que se subordinan a las directrices del nuevo jefe de Gobierno del Distrito Capital DANIEL APONTE, en cuanto a que la cúpula que dirige a esa institución, trabajo para desmoralizar a la tropa para que el 6D votara contra el proceso revolucionario, tal como EN EFECTO SUCEDIÓ, contrario a los años anteriores cuando la situación era distinta en ese cuerpo.
O sea que no estamos tan lejos de asegurar que la estructura que dirige a los bomberos de Caracas, tiene el propósito de perpetuarse en la conducción de ese cuerpo y con ese fin es que vienen rompiendo la cadena de sucesión en el mando, jubilando a los oficiales que con sobrados meritos y por derecho le corresponde ascender en la cadena de mando.
Al respecto tengo la información que ante las justas demandas que se están produciendo en los niveles medios y de la tropa con el fin de poner fin al proceso de deterioro que sufre la
Institución, los altos mandos han cerrado los canales de comunicación y acceso a la oficialidad media y de la tropa.
Es lamentable que una institución con tanto prestigio público, haya sido descuidada por la instancia del gobierno del Distrito Capital que le corresponde vigilar, supervisar y administrar su funcionamiento, permitiendo que se entronicen en su más alto nivel de dirección, grupos o roscas que inspirados en intereses particulares, lesionan aspectos que tradicionalmente marcaron el rumbo ético de ese cuerpo en materia de respeto a la jerarquía, orden administrativo, preocupación vocacional por el personal de tropa, conformada por los hombres y mujeres que integran su componente más importante.
Recomiendo al Jefe de Gobierno del Distrito Capital compatriota DANIEL APONTE, colocar oídos a las voces de la oficialidad media y del personal de tropa que a mi entender expresan el sentimiento mayoritario de esa institución.
Recomendación que hago a los fines de evitar a tiempo que la situación pase a males mayores
Como están las cosas se rompe el dicho de que entre “BOMBEROS NO SE PISAN LA MANGUERA.”