Comprobé rumores acerca de la actitud mafiosa de agencias bancarias en todo el territorio nacional, en las cuales se incurre en inexcusables prácticas de desatención, que hacen vivir momentos difíciles a pensionados o no, quienes sufren más incomodidades por atravesar la etapa vital que conocemos como edad provecta, o tercera edad. Un drama innecesario de largas colas, que imponen a jubilados y clientes habituales.
Empleados de bancos privados y funcionarios de entidades financieras públicas, juegan a evitar decirles “viejito” o “viejita”, utilizando el cariñoso “abuelito” o “abuelita”, cual sonora advertencia a quienes por los años vividos a Dios gracias, su presencia parece estorbarle a algunos fatuos de comportamiento. Al respecto el PCV solicita investigar la existencia de una “banca paralela”, lo piden desde la Asamblea Nacional Constituyente diputados electos representando al partido comunista.
Concretamente sufrimos reiterada entrega de efectivo fraccionado y en billetes de baja denominación, con la “coincidencia” de recomendar sitios cercanos a las entidades bancarias donde les suministran efectivo, cobrándoles 10% o más del monto a retirar. Un virtual corralito en la banca nacional porque “no existe declaratoria oficial de corralito”, como ha habido en otros países”. Un tope para el cobro de cheques o pensiones, sospechoso ejemplo de este corralito disimulado.
Se necesitan respuestas de protección ordenadas por la soberana ANC, que puede implementar discusión y análisis igual que lo ha hecho en otros aspectos, para resguardar de abusos y proteger a la población que acude a los bancos. Compromiso de constituyentistas, ejemplo mundial de la Asamblea Nacional Constituyente en nuestra democracia participativa, socialista, protagónica y humanista, sin discriminación de ninguna índole.