Contrario al efecto catastrófico que desean, esperando la explosión social que no se les dio en meses de terrorismo, empresas capitalistas salvajes criollas y transnacionales con el cuento del dólar today, que en el momento de redactar esta opinión va por 65 mil Bs., dejan una estela de descontento que desnuda el traspiés de quienes se han propuesto inútilmente, sabotear la revolución socialista. La situación ayuda a conocerlos y observar su miserable conducta. La frase de un ama de casa al salir de un mercado, me llenó de orgullo cuando dijo "esos gran carajos que mandan a estos bodegueros a cobrar estos precios, no nos van a fuñir…".
Oírla confirma que los cicateros de la alta empresa privada, creen en "la burbuja" de sus encuestadoras, que solo acertaron el 16-D 2015 y con el cuento de "la última cola" ganaron las parlamentarias. Olvidaron que no vencieron con votos propios, sino porque casi 2 millones de electores "chavistas" se abstuvieron, cayendo en la trampa de culpabilizar a Maduro por la guerra económica. En 2017 el país está claro, la inflación es producto del capitalismo salvaje que se burla de los pobres, mientras se llena de dólares preferenciales aprobados por el gobierno socialista, al que quieren derrocar y para ello le aportan dinero a la oposición.
A 3 semanas de elegir Alcaldesas y Alcaldes en nuestros 335 municipios, y considerando el resultado de los comicios para Gobernadores, es notorio que el voto dará espaldarazo mayoritario al socialismo, advirtiendo eso sí, que por última vez el colectivo popular da confianza a quienes viven gracias al legado del Comandante eterno. No les permitiremos ejercer el poder si su conducta iguala la de adecos y copeyanos hasta 1999, que no volverán. La revolución es vida y soberanía, para que no nos entreguen de nuevo a factores del mercantilismo representativo. Cárcel a corruptos especuladores, donde quiera que se encuentren.