Ver el programa de José Vicente Rangel, es simplemente ver una apología a el gobierno de Maduro, dolor da ver aquel critico de los gobiernos, que hoy frente a la mayor crisis de la república en los últimos 50 años nada dice y todo calla, entrevista a su vástago ese que lleva su nombre, pero nada del coraje que tenía en la juventud su padre, coraje ya perdido, que solo está ahí para intentar desde su tribuna no censurada, no criticar la censura, humillar la disidencia y dar "tubazos" periodísticos que ya son chisme de lavadero.
Lo cierto es que con la última nota que leo de José Vicente Rangel, esta donde al parecer todos somos felices me cuesta entender en qué país vive el otrora periodista independiente, ¿será que de verdad él se cree lo que dice? Claro el comenta los resultados de una encuestadora y como en Venezuela las encuestadoras siempre se topan con la realidad o sea los resultados reales y verificables, las encuestadoras están en el descredito. Claro no olvidemos que José Vicente Rangel es parte de los habitantes de MADUROLANDIA, esa nación que solo existe en los micrófonos de RNV y en las pantallas de VTV.
Con esto de los recuerdos voy notando como Palito Ortega aquel cantante argentino que termino siendo simpatizante de la dictadura militar más perversa o una de las más perversas del cono sur, también le cantaba a la felicidad: https://www.youtube.com/watch?v=Ivu9LBIHoh8 y lo hacía con singular alegría, mientras la nación se caía a pedazos en medio de un gobierno nefasto, peligroso, que desaparecía a los habitantes, que devaluaba la moneda y que sufría una inflación de espanto y claro tenía unos militares que atropellaban a la disidencia y culpaban de todos los males sufridos por esa nación a agentes extranjeros y a una conspiración. La cúpula del gobierno y algunos artistas apoyaban al régimen militar argentino.
Bien la nota de José Vicente Rangel, dice: Al consultar a la población sobre cuál es la palabra que describe mejor su estado de ánimo, 61% manifestó sentirse optimista, frente a un 30% que dijo sentirse pesimista. https://www.aporrea.org/actualidad/n318070.html o sea el país está de lo mejor, si somos de las naciones de Palito Ortega o de José Vicente Rangel. Que el salario de un mes alcance con dificultad para dos cartones de huevos es una maravilla, que no se consigan antibióticos es la melodía, que los funcionarios de PDVSA nombrados por Chávez o Maduro sean solo unos enemigos de la nación, que te roben en la calle por la delincuencia desatada, que los agentes de los servicios de inteligencia del Estado estén transportando drogas. Todo eso imagino que nos debería hace optimistas.
La vida nos va dando señales y la hacienda pública sigue en números rojos, tan rojos rojitos como las cuentas de PDVSA. Los días pasan y lo perverso de un gobierno se va notando, lástima que José Vicente Rangel ya no vea con ojo crítico lo que viene ocurriendo en el país, ya él tiene su candidato o sea a su hijo e imagino que él será de esa "que quien le pega a la familia se arruina" que se arruine la patria, él y los suyos felices y radiantes. Igual que Palito Ortega.
Notas a pie de página: La descarada ventaja en los medios electrónicos, prensa escrita y las acciones nada éticas del CNE, si ese CNE que funciona como brazo ejecutor de las decisiones políticas PSUV para apoyar de hecho y de derecho a Erika Farías, son solo una demostración que el ejecutivo hace lo que quiera, que los poderes de la nación son solo los débiles de la nación. Si débiles frente al ejecutivo.
Un debate entre Eduardo Samán y La Erika Farías candidata de Jorge Rodríguez (El Atila de Caracas) sería interesante, claro imagino que La Erika una chica ya no tan chica formada entre consignas y el pleonasmo no participaría nunca, ellos están apostando al aplastamiento mediático del oponente, mientras tanto Venezuela se desangra sus jóvenes huyen del territorio nacional, los dueños del poder se reparten a la nación como godos del siglo XXI.