Si le hubiese puesto un título bonito al artículo, seguramente no lo hubieses leído, pero en verdad, este escrito es para ti escuálido, que aun no entiendes por qué apoyamos a Nicolás Maduro y a nuestras instituciones, y el artículo también es para ti chismoso dizque chavista, que seguramente fuiste con el chisme a decirle a tu jefe las barbaridades que dizque dije aquí, sin siquiera leer lo que escribo, pero les cuento a ambos que he tenido la oportunidad única tal vez, de ver por dentro el sistema ferroviario venezolano, no todo por supuesto, pero sí pude observar los grandes esfuerzos del Ministerio del Poder Popular para el Transporte Terrestre, que dignamente representa nuestro camarada Tupamaro, Hipólito Abreu; ese esfuerzo que se traduce en el motor que impulsa, como una catenaria a miles de hombres y mujeres que trabajan en Metro Caracas, Metro Los Teques, Metro Maracaibo y Metro de Valencia, más la gente que labora directamente para el Instituto Ferroviario del Estado; en fin, el trabajo es arduo en entes adscritos del ministerio del Poder Popular Para el Transporte Terrestre, como Aeropostal, Bolivariana de Aeropuertos, Bolivariana de Puertos, Conferry, Conviasa, Ferrolasa, Fontur, Instituto Aeropuerto Internacional de Maiquetía, El IFE, Inac, INEA, INTT, Metro Caracas, Sistema Integral de Transporte Superficial S.A. (SITSSA), Sistema de Transporte Masivo de Barquisimeto (TRANSBARCA), Trolebús Mérida C.A. (TROMERCA) y la Corporación Venezolana de Navegación, S.A. (VENAVEGA).
La reflexión se acentúa dado a las condiciones de guerra económica y asedio político y social, el cual vive el pueblo venezolano y su gobierno, por parte de potencias extranjeras y países satélites en la región suramericana, que sirven como bellacos; a los intereses específicos de apoderarse de los recursos naturales de Venezuela, por parte del imperio más asesino de la historia, los Estados Unidos de Norteamérica.
Ver que aún así funcionan estas empresas, es digno de admirar (…) un ejemplo de ello, los más de 800 trabajadores de Metro Valencia; empresa que preside la licenciada Yolyemil Rodríguez; que día tras día, con las uñas, con recursos reducidos; se impone con su más importante talento, los trabajadores; que mañana tras mañana, llevan un excelente servicio de calidad a todos los carabobeños, en Metro Valencia no se le pide carnet político a nadie y por eso transporta un aproximado de 300 mil usuarios mensuales, para la satisfacción, el progreso de todos y todas que usan este moderno sistema.
Yo soy metro Valencia, y en estos casi 26 años en las lides del periodismo creo jamás haber hecho referencia a los lugares o instituciones donde he prestado mis servicios, pero es de maravillarse de las concisiones en la cual uno trabaja, he sabido de gente que por razones que no voy a discutir ha decidió irse a otro país, posición que con absoluta responsabilidad respeto, las he visto llorar no solo porque dejan Venezuela, sino porque abandonan una familia cohesionada pura y sincera, como la casta C.A. Metro Valencia, ¡Epa! una familia como todas; con "ovejas negras", con derechistas e izquierdistas, con soñadores y pesimistas, sí pero familia. Yo sigo aquí (…) rodilla en tierra, se que habrán aquellos que dirán "será que éste no le pega la crisis", pues les digo, si me pega, me da arrechera cuando tengo que comprar una harina de maíz precosida en 4 mil bolívares, me da muchísima arrechera que aumenten el pasaje indiscriminadamente, pero aún así; sigo aquí, aportando a mi país, dando por él lo que él ha dado por mí y los míos, no me olvido que en mi patria, recibieron a mi madre en el hospital Central de Acarigua-Araure allá en Portuguesa y pudimos nacer mis hermanos y yo; sin que hubiesen complicaciones económicas devastadoras como las que suceden aún hoy en otros países, donde para respirar hay que pagar, en Venezuela no se cobró jamás por las gotas de la lluvia para obtener agua, como sí sucedió en Bolivia en fin, sigo firme, dispuesto a seguir luchando contra quienes se han olvidado quiénes son, de dónde vienen y a dónde van, y prefirieron venderse cual jineteras a los intereses de las oligarquías latinoamericanas y europeas, conmigo no cuenten para eso, escuálidos (…) conmigo cuenten para seguir impulsando la revolución bolivariana, cuenten para ayudar en la construcción de la Gran Misión Transporte Venezuela, conmigo cuenten para la consolidación de una nación grande, unida, fortalecida de la mano del único presidente que reconozco, Nicolás Maduro Moros, al menos hasta el 2025, conmigo cuenten para recordarle a todos y a todas, que somos hijos de Simón Bolívar, hijos de Hugo Rafael Chávez Frías, hijos de un terruño grande y hermoso que nos regaló el Dios de tus padres y el de los míos.
