Si lo que pasa en Cagua con sucesivos y desagradables apagones, provocando disgusto generalizado, ocurre también en otros municipios y localidades del país sea por descuido o por sabotaje, está logrando el efecto político deseado por quienes hayan urdido ese tipo de maniobras antinacionales. Pude constatarlo el Martes 17 de este Junio 2008, cuando vi y oí lamentos, discusiones y descalificaciones en lugares públicos por parte de empresarios, gente del pueblo y profesionales, a raíz de la ausencia de luz eléctrica desde la noche anterior en un sector de la capital sucrense, territorio aragueño. El reclamo a CADAFE – CAGUA fue respondido manifestando los funcionarios que no tienen transformadores, no pueden seguir pidiéndolos prestados a Valencia y… “estamos con las manos amarradas”. Situaciones como estas hacen que el colectivo enseguida discuta en la calle cual sorpresiva campaña de agitación, sin faltar quienes le echan la culpa a Chávez, le sacan en cara que “regalamos cauchos a Nicaragua” y “asfalto a Bolivia”, “regalamos dinero a Haití” y “casas a República Dominicana y Guatemala”, “gasolina y gas baratos a los londinenses pobres” y… pare usted de contar y chismear, ayudados por la matriz de opinión periodística sembrada en cada venezolana y venezolano en campañas de prensa, radio y TV, que (no me canso de recordarlo) magnifican lo desagradable o supuestamente malo, a tiempo que ocultan descaradamente informaciones de lo que en beneficio a la salud, seguridad, educación, pago de la deuda social como pensiones o jubilaciones, ha sido bandera del gobierno socialista revolucionario bolivariano. Será que hay interesados en electrocutar a Chávez y su proyecto político, haciéndolo todo para demostrar que antes la electricidad, los teléfonos, el cemento y el petróleo, el hierro o cualquier servicio público, era mejor o más eficiente que ahora cuando las ganancias petroleras se reparten más equitativamente, el colectivo tiene más circulante, mejor atención a la salud, más liceos, escuelas, simoncitos o preescolares, universidades, centros de atención médica, carreteras, autopistas, estadios, ferrocarriles, metros, nuevos puentes, fábricas diversificadas, préstamos bancarios a bajo interés para viviendas o franquicias, atención prioritaria a las PYMES pequeñas y medianas empresas, o el interés socialista por incluir a la colectividad sin distinción de raza, sexo, condición social o nacionalidad, en la venta de alimentos a precio regulado en los pedevalitos, o subsidiado y muy barato en los Mercal. No será que vuelven a estar infiltrados y listos para el sabotaje, los mismos “hijos de mala patria” a quienes les importó nada llevarnos en Diciembre 2002 y Enero 2003 a perder miles y miles de millones de dólares en el sabotaje petrolero y el paro cínico, pidiéndole a la colectividad no enviar a sus hijos a clases y perder el año, porque el propósito era CHAVEZ VETE YA…. Considerando estas circunstancias gravemente sospechosas y que estamos en año electoral, concluyo advirtiendo al gobierno del presidente Hugo Chávez. para que ponga atención y eficiencia a la meridiana luz de la verdad de los hechos, por cuanto CADAFE, aquella compañía bautizada en mis programas de radio en los años ochenta como ce, a, de, a, efe, e, Compañía Anónima de Administración Fraudes y Estafas, ahora nacionalizada debe descubrir e informar dónde están los saboteadores y dónde los ineptócratas, o de lo contrario la revolución bolivariana va a quedar ELECTROCUTADA. Advertencia: “se ha determinado que todo hombre o mujer de Venezuela con actuaciones iguales o parecidas a las de los adecos y copeyanos del pasado, pasa de funcionario revolucionario a funcionario robolucionario”.
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