"Queridos amigos del sector cultural del estado Portuguesa, como ya saben soy el 8vo Presidente del Instituto de Cultura del estado Portuguesa, creado por Decreto Ley del Consejo Legislativo en 1997; antes de mi llegada por estos espacios de Cultura, estuvo la presencia del Licenciado Carlos Luis Peña, a quien recuerdo por su rigidez y disciplina, trabajé con él como su Coordinador de Literatura; el amigo Freddy Larriva, a quien conocí en lo personal y siempre tuvo hacia mí un trato deferente y afectivo; a la poetisa Carmen Sánchez Guillen, quien con su manera particular de ver la cultura contribuyó a fortalecer los espacios de formación tomando decisiones difíciles para la época pero que hoy se comprenden en razón de las circunstancias presupuestarias en que el sector cultural se ha visto sentenciado en casi todas sus épocas; la licenciada Marisol Yánez quien vino a inyectarle modernización a la gerencia cultural y a fortalecer el patrimonio operativo del ICEP, su gestión dejó logros importantes para el Instituto y se podría decir que permitió elevar la capacidad de autonomía, para ser independiente de cualquier presupuesto o asignación gubernamental. Luego vino Gurmencinda Hidalgo, mujer de temple y una gran visión del mundo cultural, siguió ampliando espacios y creando condiciones para el resguardo del patrimonio e idiosincrasia portugueseño; vendría luego la gestión de la profesora Carmen Guedez, a quien tuve la oportunidad de acompañar desde el área de la planificación y gestión, obteniendo importantes avances en el manejo de los criterios de masificación de la cultura, aprovechando los escenarios públicos para llenar de alegría y recreación a las comunidades; y como Presidente séptimo, el profesor Job Jurado, de quien venimos a tomar el testigo, en el marco de lo que fue su política pública de crear espacios combinados culturales donde las artes se manifiesten con su autonomía y dinámica a cuerpo entero, así nació la idea de Ciudad Cultural y la creación de un proceso que inicie reconstrucción del pensamiento patrimonial, donde la figura de los cronistas populares conformen una nueva visual del significado de la cultura en el estado Portuguesa.
"El profesor Job la tuvo difícil, porque ideas tan innovadoras ameritan apoyos de todas las instituciones locales, regionales y nacionales, no es solamente una idea que se puede pensar que se logrará materializar de un momento a otro, requiere músculo, fuerza y en un país bloqueado, intervenido en todas sus formas y maneras, la falta de liquidez para financiar este tipo de iniciativa hace que materializar las ideas se vuelva soberanamente difícil. Sin embargo, hay tareas que se pueden comenzar a activar y estamos ya revisando opciones y buscando a corto y mediano plazo, acciones que nos permitan comenzar a despejar los obstáculos y volver a ser optimistas en este camino hacia la consolidación de la cultura en Portuguesa como patrimonio popular de todos y todas. Que podamos tener pertenencia hacia nuestra Institución y tengamos la capacidad de darle respuestas a todas las necesidades de nuestros cultores y cultoras.
"La crisis económica, inducida por el bloqueo internacional, la poca disposición de algunas instancias gubernamentales en la comprensión de la cultura como una inversión social que también garantiza apoyos y una imagen positiva para el liderazgo de nuestros Gobernantes, y la depreciación natural en la que ha caído parte del patrimonio cultural ante la falta de recursos económicos que puedan ser invertidos en el mantenimiento y recuperación de estos valores de nuestro estado Portuguesa, es una de las principales tareas por hacer en esta que es mi gestión, pero es verdaderamente la gestión de todos y todas, porque mi paso por acá es circunstancial y el de ustedes es permanente.
"Me van a acompañar un grupo de mujeres y hombres con un alto nivel de eficiencia y operatividad; todos convencidos de elevar la calidad del sector cultura y de profundizar nuevas brechas para volver a establecer criterios de autonomía e independencia que eleven la calidad de vida de nuestros trabajadores culturales. A todos y a cada uno de las figuras que me acompañaran les invade un deseo de ayudar a recuperar el patrimonio cultural y los espacios culturales, a pesar de la pandemia y de todos los obstáculos que pareciera colocar el destino como una nube que disipa la confianza y la esperanza de quienes aspiramos no "arar en el mar", sino en tierra fértil.
"A todas estas, la nueva gestión ha nacido con dos acciones simbólicas que marcan ya una nueva etapa: el regreso al logotipo ganado por Concurso público en 1998 y la manifestación de una frase que sirva de gancho para atraer a la colectividad a un escenario de esperanza y reconciliación plena en la que nos sintamos más familia y aprendamos a convivir bajo esta nueva manera de sentir la cultura en tiempo de pandemia, con distanciamiento social voluntario pero con una oferta cultural pensada para minimizar interacción humana pero a su vez para acrecentar nuestro vínculo espiritual con las bellas artes. La frase en cuestión dice: "Un Equipo en Acción con un pueblo en Revolución".
"Asistimos a brindarle apoyo a una nueva generación muy distinta a la de los noventa del siglo XX; una generación que tiene una cultura urbana, con manifestaciones que muestran una ciudad que busca ocupar un lugar central en la construcción del pensamiento social moderno en toda la cultura occidental; venimos con la idea de abrir un espacio privilegiado para los jóvenes pero también venir a apoyar la delimitación de espacios de recreación y acompañamiento para los adultos mayores, a través de los Centros Formativos.
"El talento juvenil lo entendemos como expresión de una cultura que busca encontrar en su idiosincrasia nuevos valores para activar sociabilidades haciendo posibles nuevos ideales que les permita reinventarse en el marco de la ciudadanía y la participación popular. Lo cierto es que, en la cultura juvenil, el debate se ha de dar sobre lo urbano y sobre la representación social en espacio territorial de la ciudad, de una generación que pueda emanciparse e ir creando nuevos escenarios culturales, permitiéndoles ser una alternativa de valores nueva en la cartografía cultural regional.
"Por otro lado venimos a proponer crear puentes entre las políticas públicas culturales y las corrientes emergentes en el mundo cultural que deben tener no solamente un espacio sino un reconocimiento por parte de la institucionalidad para que pueda ir desenvolviéndose bajo criterios de libertar y espontaneidad sin mayor limitación que la que impone el respeto y la tolerancia como valores en una sociedad democrática, de justicia y de derecho.
"Así mismo, tenemos un interés fundamental en promover la publicación del pensamiento creativo de la juventud portugueseña, incluyendo también a los adultos mayores que tuvieron sus sueños y anhelos de ser conocidos como orfebres de la palabra, a través de una plataforma editorial de carácter virtual que venga a responder, por el momento, a la gran demando de algunos sectores sociales para la difusión de sus obras en los diversos géneros literarios. En el caso del adulto mayor, hay la plena disposición de crear para ellos actividades y acciones que le brinden espacios propios para el disfrute y manifestación de sus elementos culturales en las diversas manifestaciones de las bellas artes.
"Otro aspecto que se va a fortalecer son los planes de formación en la cultura tradicional portugueseña que incluye un subsector de cultura tradicional andina, dado la cercanía de nuestro territorio llanero al pie de monte andino, lo que nos ha dado una combinación cultural muy importante que es necesario proyectar. Los cultores de estas tradiciones serán oídos, así como los sectores de la cultura campesina que tienen desde ya en nuestra gestión un lugar importante para que se sientan incluidos en el marco de unas políticas públicas culturales que las consolida como expresión autóctona de nuestro pueblo.
"El ICEP, hoy más que nunca necesita crecer hacia adentro y hacia afuera; proyectar la cultura portugueseña a nivel nacional e internacional, y comenzar a articular los criterios de acción estratégica descritos en el Plan de la Patria 2019-2025, que hacen alusión a la inclusión y a la diversificación de los valores culturales por todos los territorios de nuestra América del Sur. Es necesario implementar y construir una nueva cultura de la vida y de la solidaridad para el futuro; partir de lo que el cultor Gino González (cantautor, literato y educador venezolano que nació en El Socorro, estado Guárico, en 1962), denomina plan espiritual de la vida, para que el pueblo muestre sus valores amorosos, participativos y colectivos, fortaleciendo en cada localidad el área cultural, entendiendo que la cultura es más que música, arte o expresión artística. La cultura, recalca Gino, es transversal a todos los ámbitos de la vida, del cómo se vive y los elementos que posee en una sociedad hacia niveles más altos de solidaridad, humanidad y confraternidad.
"Es necesario a todas estas, seguir con el debate de una nueva versión de la Ley para la Descentralización y Desarrollo Cultural en el estado Portuguesa, adecuada a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999), incluyendo elementos en el área cultural con los principios socialistas y con una visión integracionista en la que podamos establecer compromisos y trabajos conjuntos con el Ministerio del Poder Popular para la Cultura.
"El Plan de la Patria en el marco de esta nueva Ley, permite introducir en este Proyecto un compromiso con la vida, la solidaridad, el cuidado del medio ambiente, con la historia antiimperialista y rebelde y aprendiendo a conocernos como pueblo.
"En una palabra, venimos a crear condiciones nuevas para producir nuevas acciones y con ellas transformar el ambiente cultural en un escenario donde partiendo de la cultura del amor y la aprehensión, hagamos posible romper la desesperanza y desmotivación y convertirnos en los impulsadores de un Universo Cultural que alcance fortalecer en los cultores un sentido de pertenencia que vaya más allá de una simple oferta o carta de buena intención; nos limitaremos a los hechos y desde ellos les demostraremos hasta dónde es posible llegar cuando se tiene amor por el trabajo y pasión por el servicio a nuestro prójimo.
"Somos una cultura en movimiento permanente, una cultura que va hacer historia; sin discursos populistas y sin banderas demagógicas, con la transparencia y el respeto a todo aquello que invoca rectitud, honorabilidad y compromiso. Con afecto y entrega total a todos ustedes, quedo, Atentamente, Dr. Ramón E. Azócar A. /Presidente".