Varios periódicos regionales de Anzoátegui reportaron una actividad encabezada el día lunes 11 de julio por el ex diputado Giovani Urbaneja,  dirigente social que decidió convocar a la población de la zona sur del estado Anzoátegui, para solicitar por ante los organismos competentes, un Recurso de Amparo en favor de los derechos a la alimentación y a la salud, como derechos humanos fundamentales.

El reclamo fue realizado en procura de protección para el derecho a la alimentación y a la salud (medicamentos y equipos médicos) que tienen todos los ciudadanos y, prioritariamente, los niños, niñas y adolescentes, así como las personas de la tercera edad, e incluso los animales, víctimas de la grave situación de crisis que estamos atravesando desde hace prolongados meses y de la que, según el ex diputado Giovani Urbaneja, muchos se están aprovechando por la falta de autoridad que garantice control y alivio de un conjunto de irregularidades que afectan al abastecimiento y a la capacidad de obtener alimentos y productos farmacéuticos para el tratamiento de enfermedades.

Giovanny Urbaneja, preside la Fundación Socialista de Integración del Sur, y se concentró el lunes con ciudadanos y ciudadanas de las comunidades, padres de familia, en la avenida Fernández Padilla de Guanipa, frente al centro comercial Malaver I. El propósito era efectuar una toma pacífica “en rechazo a la crisis alimentaria que tiene a la mayoría de las personas bajando de peso”, según expresó el ex diputado convocante junto al resto de los participantes.   

En el desarrollo de la actividad Urbaneja repudió la   posición del gobernador y  de alcaldes que califican de "guarimberos" a quienes manifiestan por necesidad. La protesta contra el hambre fue hecha en procura de que la Defensoría del Pueblo y el Sistema de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes, juntamente con el Tribunal de LOPNA,  interpongan un Recurso de Amparo para garantizarle la comida a los niños, especialmente ahora que salen de vacacionestendrán acceso a los alimentos que se proporcionan a los alumnos en las escuelas y esto agravará la situación.

El presidente de FUNDISUR, G. Urbaneja, declaró que "preocupa que sean los niños los más afectados, ya que son víctimas de la desnutrición”, dijo Urbaneja. Para él “esto como parte de la guerra económica, donde los pobres son los caídos de esta guerra, mientras que los aliados para combatirla son los más peligrosos, por la falta de sensibilidad social y compromiso de lealtad”.

Denuncia que están violando el derecho de la alimentación de los ciudadanos,  y convirtiéndolo en tres modelos de abastecimiento que describe de la siguiente manera:

a) uno para los pobres, con el beneficio de cuatro artículos por mes.

b) otro modelo para los funcionarios.

c) y el otro; exclusivo para la corrupción.

Sobre este último dice que "reina la compra de los productos de primera necesidad por pacas, sin importarles nada, valiéndose como en toda guerra, los vivos llevándose todo y revendiendo los productos, violentando el estado de derecho y la propia constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela."

Señala el ex-diputado que “esta es una de las razones por las cuales hacemos el llamado de alerta al pueblo para que luchemos unidos contra el hambre y la mentira, con valentía y responsabilidad social y no permitamos que sigan traficando con la comida de nuestros hijos.”

Se desconoce aún cuál es la respuesta a este reclamo y solicitud de protección, por parte de los organismos garantes de los derechos constitucionales de la población venezolana.