27 agosto 2018 - Una migrante venezolana identificada como Jennifer Ramírez Rivero, de 39 años de edad, fue hallada muerta en su apartamento ubicado en la avenida 5 de la ciudad de Cúcuta, Colombia. Su hijo, un pequeño de dos años, permaneció con vida al lado del cadáver hasta que la Policía ingresó a la vivienda.
Según un medio de comunicación local, los vecinos alertaron a la Policía por el olor tan fuerte que salía del lugar y el llanto de un niño que paró luego de varios días. Al ingresar al apartamento del edificio Spanis, donde vivían desde hacía algunos meses, encontraron el cadáver de Jennifer descompuesto en el suelo y a su hijo, sentado y sin moverse, al lado de su madre.
Una vecina relató que tomó al niño. Lo bañó, le dio algo de comer y luego lo entregó a la Policía Metropolitana de Cúcuta, que lo llevó al hospital para recibir atención médica. Presentó desnutrición y restos de piel de su madre en las uñas, por lo que presumen que intentó "despertarla" o moverla.
Sobre la causa del crimen, el coronel de este cuerpo policial, Javier Barrera, reveló que "Todo indica que es un crimen pasional. Murió a causa de asfixia mecánica, posiblemente el lunes en la mañana".
Detalló que Jennifer, quien era modelo, permanecía con su ropa de pijama y presentó signos de estrangulamiento. Además, las cosas dentro del apartamento estaban algo desordenadas.
El principal sospechoso es un hombre "de tez morena" quien, según los vecinos, la acompañaba frecuentemente y hasta le llevó un ramo de flores para celebrar su próximo cumpleaños. Sin embargo, desde el lunes pasado –día que las autoridades presumen que se cometió el crimen- el hombre no se presentó más.
Frente al crimen, las autoridades colombianas aseguraron que continuarán el proceso de investigación. Se pudo conocer que la venezolana Jennifer Ramírez fue candidata en la Feria Internacional de San Sebastián en San Cristóbal.