Cuando intentamos analizar lo que sucede en nuestra querida Patria nos llenamos de ideas, conceptos, frases para de definir lo que somos. Cuando el Gobierno Nacional toma algunas decisiones, como por ejemplo, el nuevo aumento de salarios o cuando firma unos contratos para explotar el Arco Minero, o sencillamente toma la decisión de dar a las Fuerzas Armadas un poder como el que nunca antes soñaron tener nuestros soldados. Seguimos analizando y sentimos que las colas lejos de disminuir aumentan y el gobierno se esfuerza desarrollando nuevas iniciativas con ministros que van y vienen. La inseguridad sigue crispando al más valiente y obliga a las familias a enconcharse temprano y otras, ya tocadas por el hampa, ante la angustia de volver a pasar por cautiverio optan por abandonar el País. Observamos como un conglomerado de ciudadanos aplaudieron en ovación profunda a las fuerzas de seguridad del Estado cuando lograron dar de baja a 5 antisociales. Sebastiana Barráez comenta que la inmoralidad de los moralistas no tiene límite cuando le proponen que escriba en su columna que una persona está siendo acosada (sin estarlo) por el gobierno venezolano para que le puedan asignar asilo político en EE.UU. La alta dirigencia política ha logrado que la Asamblea Nacional sea considerada un jarrón chino y que las demás instituciones del Estado se conviertan en un muro de contención en las demandas democráticas. En suma, nos encontramos en un proceso entrópico donde la economía se convierte en irracional y nos lleva a un proceso destructivo, raspamos las reservas para pagar deuda, permitimos que la inflación devore cualquier salario incluyendo el pírrico que acaban de aprobar con lo que crearemos más déficit tanto público como privado y con ello menos recaudación fiscal. No hay posibilidad de diálogo ya que nadie lo quiere, a la par el pueblo baja su calidad de vida y con ello la delincuencia asume posiciones de Estado. Todo el sistema se viene abajo, nos encontramos en una crisis sistémica donde la Economía, la Política, y la Sociedad entera han entrado en crisis degenerando la ética y la moral del Sistema en su conjunto. Son muchos los factores que la han creado: en la Economía el gobierno se da cuenta muy tarde de que el extractivismo, los controles, la diversidad de tasas cambiarias, algunas expropiaciones, etc., etc., no funcionaron del todo bien. En la Política: la pérdida de la Asamblea Nacional por el chavismo y con ella el Decreto de Guerra a Muerte al Poder Ejecutivo, trajo la crisis Política que ha venido destruyendo todos los Poderes Públicos. Los efectos del hecho económico (inflación, liberación de precios, desabastecimiento de comida y medicinas, etc., cual río desbordado, golpea dramáticamente al pueblo hasta llevarlo al paroxismo. La irracionalidad en la emisión de dinero inorgánico, narcotráfico, la paz en Colombia, etc., hacen que los paramilitares, carteles internacionales y cuanto bicho malo haya parido esta tierra, se vienen a darles cátedra a nuestros muchachos de cómo es posible hacer dinero rápido. La crisis en todo el Sistema Político, Económico, Social, Moral definen la CRISIS SISTEMICA. Cada Sub-Sistema está relacionado con el otro y todos entraron en entropía donde es más fácil destruir que construir, ¡la irracionalidad es imparable! Dos grandes bloques se creen los dueños de todo: Estado-Gobierno-Partido por un lado y minúsculos Partidos de Oposición-Asamblea Nacional por el otro lado. Pero la gran verdad es que la gran mayoría está allí en zozobra, en colas, trabajando, observando, son los hijos de la Patria, llenos de necesidades (como todos los humanos) han visto como se ha roto la cadena del Poder Obedencial. La Solución Sistémica debe afectar a la totalidad del Sistema, y se puede lograr si se aceptan los verdaderos orígenes de la crisis y se convoca al pueblo todo al gran proyecto de reconversión del modelo (sin abandonar principios), a la verdadera revolución ideológica, cultural, social, económica, industrial, tecnológica, energética. Ante la CRISIS SISTÉMICA, ¡SOLUCIÓN SISTÉMICA!
