A la fecha, la banca privada sigue prestando servicios bajo el régimen del "corralito". Sólo dispensa por taquilla hasta 20.000 Bs.F en un billetico de Bs.F 20.000 exactos.
En su defecto, si usted aduce que necesita sencillito, entonces le contraargumenta que el gobierno es el único culpable porque este no le suministra suficiente cono del nuevo, y por eso le invita a que reciba todo el billete que necesite pero en los de baja denominación (de 50 Bs.F pa´bajo).
Los de Bs.F 100 los dispensa sólo por cajeros automáticos que, a tales efectos, los ubica estratégicamente y con exclusividad para ese tipo de billetes. A propósito: hay quienes razonablemente piensan que se trata de taquillas automáticas especializadas para los traficantes de esa moneda hacia el país que te conté.
Seguimos: usted le pide a la banca privada "fuertes" de los nuevos y a esos no se les ha visto en Valencia ni en pintura[1]. ¿Dónde están esas monedas?, ¿quién las acapara?, ¿estamos acaso en presencia de alguna reiterada malversación de fondos?
Si usted se deja llevar por lo que informa Sudeban, que, a propósito, está invirtiendo mucho en publicidad en su favor por ahora que en la red ha sido cuestionada como una institución a la que al parecer la deficiente conducta de los servicios bancarios hasta ahora le ha resbalado, si nos dejamos llevar por esos informes, decimos, y esgrimimos que los pensionados podemos recibir y retirar nuestra pensión en con la mayor brevedad posible-por razones obvias-entonces la banca ipso facto desmiente a SUDEBAN y dice que a su despacho no han llegado semejantes instrucciones.
De allí que nos preguntemos lo que el título de esta entrega ya nos lo hizo saber. Hemos supuesto, también, que , aunque cauce molestias, ese corralito pareciera frenar la fuga de los conos monetarios porque no es difícil suponer que muchos pensionados naciopnales y extranjeros de origen se vean tentados a ganse algunos churupitos con su pensión en billetes exportables.
[1] Recuerdo haber señalado por el diario El Carabobeño la fuga del níquel amonedado para que el país receptor acuñara sus moneditas con una considerable economía de costos. También recuerdo que fue durante la 4ta. República y que tal artículo pasó sin pena ni gloria.
