Haciendo un poco de historia Sivensa fundada en 1948; dio origen a la filial Sidetur, que fue registrada en 1972. De esta empresa parte el Complejo Siderúrgico Nacional el 31/10/2012, que la conforman seis (6) plantas; de las cuales Casima, ubicada en Puerto Ordaz; es a la que nos vamos a referir. Luego de una lucha traumática por parte de los trabajadores contra un bloqueo patronal dada mas a poner obstáculos y no tender puentes a la paz laboral. Con una empresa como Sidetur con una demanda cautiva de sus productos en el 2001 y 2002, su cuadro productivo presento una disminución drástica. La dirección patronal obedeciendo a los dictámenes del empresariado golpista cerró sus puertas con las consecuencias que todos conocemos. Luego viene el año 2009 – 2011; la empresa recibe otro colapso en su producción; en este caso es por la negatividad de cumplir con los trabajadores ciertas clausulas de la Contratación Colectiva y algunos problemas que confrontaban los trabajadores con la higiene y seguridad laboral; diferencias que aprovecharon los trabajadores para montar el sindicato y solicitar ante las instancias del gobierno nacional la expropiación de la empresa. En el 2012 todavía bajo dirección privada hubo un repunte en la producción; pero luego en el año 2013, ya bajo la administración del Estado se produjo un bajón que se ha venido agudizando durante el 2014. Lo cual es preocupante pues ha alcanzado un cumplimiento con respecto al presupuesto de un 43,61% y un cumplimiento con respecto a su capacidad instalada de un 36,35 %; con una producción de 163.564 TM de acero. Resultados que consideramos críticos; si tomamos en cuenta que son cifras provenientes de una empresa que está remontando o tratando de remontar la cuesta de la productividad.
Pero lo critico de todo esto es que han puesto en boca del ciudadano Presidente Nicolás Maduro; óigase bien en cuatro (4) oportunidades a decir que el Complejo Siderúrgico Nacional está rompiendo record de producción y ha puesto como ejemplo la planta de Casima. Cuando bien saben los trabajadores que los resultados económicos elaborados y presuntamente maquillados por la misma planta expresan lo contrario. Todo esto lo saben los trabajadores, que saben donde están parados y conocen la realidad de la empresa y se dan cuenta que la actual gerencia transita por terrenos pantanosos. Este año como ya lo hemos señalado, el presupuesto de Casima fue de 375.042 TM; cuando la capacidad instalada es de 450.000 TM de acero y solo se produjeron 163.564 TM; ósea se cumplió con un 43,61% y un 36,35% de su capacidad Instalada.
Alejandro Álvarez Secretario General de trabajadores de la Industria Siderúrgica (SIDERNAC); ha venido alertando por distintos medios desde septiembre del 2014, la falta del mantenimiento anual; como estaba contemplado en el cronograma; así como la falta de bienes e insumos requeridos y no fueron solicitados en las fechas establecidas. Por otra parte la falta de equipos y repuestos posterga las paradas para el año 2014 y pone en peligro su normal funcionamiento de la maquinaria.
De la producción de Casima dependen las plantas de Antimano y Guarenas; pues ellas requieren de las palanquillas de Casima para ser laminadas. Una cuota de responsabilidad de la actual crisis; sostiene Alejandro Alvarez la tiene el BCV; pues este organismo se ha hecho la vista gorda ante el requerimiento de Bancoex de las divisas solicitadas. Esto entra en contradicción; pues siendo esta empresa del Estado; este mismo le da La espalda sin aportar argumentos de peso. La Burocracia y la perniciosa permisologia; esa misma que esa combatiendo el Ministro Dante Rivas hace estragos en esta empresa. Ahí tenemos los electrodos de 24 pulgadas, nos dice Álvarez, para el horno de fusión: son cancelados hoy por ejemplo; pero el barco que los trasporta tarda dos (2) meses, la permisos para su liberación quince (15) días. Algún encapuchado dentro de la empresa está poniendo piedras en el camino para dudar de lo que dice el Presidente Maduro públicamente, que Casima es el ejemplo a seguir. Así en similares condiciones operan las otras cinco (5) plantas, que amenazan con cerrar sus puertas en caso de prevalecer sus problemas que vienen confrontando. Esto pondría contra la pared cerca de 2900 trabajadores a nivel nacional.
El Plan de la Patria es bien claro en sus postulados del rol protagónico que deben presentar los trabajadores en la dirección de las empresas; al parecer esto que esta tácitamente allí es letra muerta y donde el Presidente Chavez puso todo su empeño. Pese a todos estos obstáculos la dirección sindical, que no negocia a espaldas de los trabajadores, ha logrado las mejores reivindicaciones y condiciones salariales, nada comparables con otros trabajadores de las históricas empresas básicas. Pero hasta donde esta condición estara garantizada, nos dice Alejandro Álvarez, sino está avalada por un repunte en la producción, en el autofinanciamiento y la utilidad que es el norte de toda empresa. No queremos ver retratados a estas empresas con lo que pasa con Refractarios Socialistas; una empresa desolada, donde sus trabajadores solo reciben el salario mínimo porque una irresponsable dirección no permite que produzca. O una empresa como Sidor donde sus trabajadores cobran sin trabajar, con un contrato colectivo leonino y oneroso a los intereses de la empresa para su cumplimiento o empresas como Alcasa, Venalum, Carbonorca o Bauxilum; produciendo solo a un 20% de su capacidad instalada o unas EPS en el esterero con nueve (9) esperando que arrancan y en pañales.
Los trabajadores que expusieron su pellejo para que esta empresa pasara a manos del Estado; son ahora los grandes ignorados en la conducción y toma de decisiones de la empresa. La empresa debe colocar en sitios visibles los Balances de Comprobación mensuales. El Balance General anual acompañado de sus Estados de Ganancias y Pérdidas. La Declaración del Impuesto sobre la Renta. La publicación del listado de clientes planta por planta. El porcentaje que va destinado a la Gran Misión Vivienda. Listado de cheques pagados. En fin toda información que repercuta en la dirección y conducción de la empresa y sea de vital conocimiento por todos los trabajadores.
Así como está esta Planta (Casima); están otras empresas. Las EPS, sus administraciones que tienen la bicoca de nueve (9) años al frente a sus cargos; nadie, ni ningún organismos contralor ha revisado sus procesos contables; menos el nivel de avance. Ponen a Ministros turistas y sobre todo uno de ellos Ricardo Melendez a repetir cifras erráticas de su avance y su culminación en el 2015; como sucedió con la Siderúrgica Abreu de Lima, donde cualquier observador bisoño que visite a esta naciente empresa se percata que le están metiendo mentiras. Para acá envían comisionados, elaboran informes; pero nadie sabe que dicen. Otros llegan y se van sin pena y sin gloria; sin percatarnos de lo que investigaron. Uno de ellos es un Sr. Juan Arias, se presento por ahí y además su presencia fue reseñada por la prensa regional como Comisionado Presidencial para las Empresas Recuperadas. Vino y se reunió con bates quebrados; no invito a quienes debió haber invitado; no fue a donde tenía que haber ido. Simplificando no hizo lo que tenía que haber hecho.
Presidente Maduro lo están poniendo a decir embustes. Estas empresas reclaman un diagnostico de verdad. Un cambio estructural en su modelo organizativo que responda al modelo de sociedad que estamos construyendo.
